Luego de la ampliación de detención, ayer se realizó la formalización de la mujer de 40 años, de nacionalidad colombiana que el último fin de semana se convirtió en la primera sospechosa de la muerte de su marido.

Según los antecedentes expuestos en la audiencia, el matrimonio se encontraba compartiendo en la residencial que hace un mes estaban habitando en la población O'Higgins, cuando de un momento a otro, comenzaron a pelear. La mujer por razones que son materia de investigación le dio una estocada en el corazón a su esposo, provocándole la muerte inmediata. La víctima de 49 años quedó tendido en la cama, hasta que llegó Carabineros, quienes comprobaron de manera visual el asesinato.

Con estos datos y pese que la mujer no estaba con sus cinco sentidos al momento de la detención, se pudo establecer 90 días de investigación y su paso a prisión preventiva por el delito de parricidio. La fiscalía recopilaran más datos de este caso en ese tiempo.

Un trabajador fue interceptado por tres asaltantes, quienes lo golpearon y amenazaron armas blancas, mientras esperaba locomoción colectiva en el sector poniente de Calama.

La situación ocurrió cuando el trabajador de nacionalidad boliviana de 28 años, llegó hasta la intersección de las calles Maipú con Frei Bonn.

A esa hora esperaba la línea de locomoción colectiva para dirigirse a su respectivo trabajo. Pero en cosa de segundos, tres hombres se le acercaron e inmediatamente le empezaron a decir que les pasará algo de dinero. Ante la negativa sacaron de entre sus prendas armas blancas y lo empezaron a intimidar para que entregara sus pertenencias.

El trabajador pese a la intimidación, se negó a entregarlas, lo que ofuscó a los delincuentes quienes comenzaron a golpearlo hasta que cayó al suelo. Una vez inmovilizado, lo registraron y le sustrajeron el celular y algo de dinero. Cuando transeúntes se acercaron, los atacantes arrancaron del lugar.

La víctima se acercó hasta el cuartel policial a solicitar ayuda y explicar que los tres sujetos eran colombianos, por sus rasgos físicos y obviamente el timbre de su voz durante las amenazas.

Parecía ser un día cualquiera cuando esta comerciante de 34 años, abrió su pequeño almacén de la calle Felipe Lilayú de la villa Portal del Inca. En cosa de segundos dos sujetos ingresaron haciéndose pasar por compradores y esperan un descuido de la mujer, para sacar un arma de fuego.

La calameña quedó petrificada, al ser apuntada con una pistola y en medio de amenazas, los sujetos le pidieron que entregara todo desde la caja registradora.

La vendedora hizo caso en todo momento, entregando el dinero e incluso le arrebataron hasta el celular. Los dos sujetos se alejaron con sus pertenencias y pese que vecinos colaboraron con la búsqueda, no dieron con el paradero de los asaltantes. Estos antecedentes fueron puestos a disposición de la fiscalía local.

Katherine Jofré S.

En cosa de segundos, una pequeña de 12 años, terminó gravemente herida al ser alcanzada por un vehículo mientras cruzaba una calle en las inmediaciones de su escuela.

Según los antecedentes que se manejan, la estudiante tiene solo 12 años y es alumna de la Escuela Andrés Bello y cómo es de costumbre llegó temprano a clases y compartió con sus compañeros en esas horas de estudio, hasta que sonó la campana que indica el término de la jornada.

La pequeña junto a un grupo de compañeros arreglaron sus cosas y salieron de la sala de clases con la esperanza de retirarse lo antes posible a sus hogares para disfrutar del almuerzo con sus hermanos. Testigos mencionaron que a esa hora son muchos los estudiantes que cruzan calle Antofagasta para tomar locomoción colectiva y esta menor no fue la excepción.

Accidente

Cuando iba con sus compañeros cruzando por el paso peatonal completamente demarcado, en cosa de segundos fue embestida por un vehículo de la locomoción colectiva.

Sólo se escuchó una fuerte frenada y el grito desgarrador de la pequeña.

Toda la comunidad escolar que a esa hora estaban en el lugar, salió a auxiliarla y retener al conductor que en ese momento quedó impresionado por ser el autor de este accidente.

La menor perdió el conocimiento y quedó con heridas evidentes, por lo que llamaron rápidamente a los equipos de emergencia y sus familiares. Hasta el lugar llegó uno de sus tíos, quien acompañó en todo momento a la pequeña, hasta que llegó la ambulancia.

Los paramédicos lograron inmovilizarla y trasladarla rápidamente al servicio de urgencia, lugar al que llegó gravemente herida. Lograron estabilizarla y quedó hospitalizada con lesiones graves. Hasta el cierre de esta edición, la menor permanece recuperándose en el Hospital Carlos Cisternas, pero sigue con diagnóstico reservado.

Detenido

El conductor de 29 años fue detenido por carabineros por lesiones graves y según su relato, el se detuvo en el cruce señalizado, pero cuando retomó la marcha no se percató que la pequeña iba pasando, momento en que la atropelló.

Junto a todos estos antecedentes fue puesto a disposición de la Fiscalía local.

Un calameño que iba llegando hasta su vivienda en calle Hernán Cortés, observó a dos individuos ingresando al segundo piso de sus vecinos. Inmediatamente alarmó a Carabineros, quienes llegaron al inmueble.

Los individuos aún estaban en la casa cuando llegaron los uniformados, por lo que se dieron a la fuga por los techos y saltando los muros de los patios. Los motociclista lograron interceptar a una mujer, a la cual inmovilizaron y en su poder mantenía un balón de gas. El segundo implicado, arrancó con un notebook e ingresó a la toma para no ser capturado. Pese a los patrullajes no lograron dar con su paradero.

La mujer por su parte, se trataba de una extranjera de nacionalidad colombiana de 18 años que permanecía en el país de forma ilegal.

Justo al mediodía y en pleno centro sujetos con un arma de fuego asaltaron a un transeúnte y se dieron a la fuga.

La situación se desarrolló en la esquina de Balmaceda con Vargas, cuando la víctima de 44 años, se trasladaba por el lugar, cuando dos sujetos se abalanzaron hacia él para pedir con gran violencia sus pertenencias.

El afectado opuso resistencia y fue momento en que los atacantes lo tiraron contra una muralla y le colocaron un arma de fuego en las costillas, amenazándolo de muerte.

Por temor a perder la vida, el calameño entregó desde su celular hasta billetera para que lo soltaran.

Cometido el asalto, los individuos salieron corriendo por calles aledañas sin dejar pistas. El trabajador denunció el hecho y pese al patrullaje preventivo, no se pudo dar con el paradero de los atacantes.