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Gobierno anuncia el inicio oficial de la banda que mejorará el servicio de 4g

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El ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo, anunció el comienzo oficial de la operación comercial que apunta a mejorar el servicio de la red 4G a nivel nacional.

La banda 700MHz comenzó sus funciones ayer, en el marco del Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información. Se caracteriza por una mayor estabilidad en la red y mejor cobertura en espacios cerrados.

"Los usuarios van a experimentar una mejora en sus señales cuando se encuentren dentro de un inmueble, ya que una de las características de esta nueva banda tiene una mejor penetración en edificios", indicó Gómez-Lobo.

Destacó que esta banda permite una amplia cobertura debido a su baja ubicación en el espectro radioeléctrico, lo que beneficiaría en especial a las zonas rurales. El objetivo del Gobierno sigue siendo la reducción de la brecha digital.

"Con esto, Chile se mantiene a la vanguardia de las telecomunicaciones a nivel regional, dado que es uno de los primeros países en desplegar 4G y el único con un proceso diseñado con obligatoriedad de cobertura nacional", subrayó el titular de Telecomunicaciones.

Estas mejoras, según el secretario de Estado, se traducirían en mejoras en los precios y en la calidad de los servicios, ya que aumentaría las velocidades de conexión.

Dos compañías de las tres que se adjudicaron la banda 700MHz encendieron sus antenas durante la jornada de ayer, anticipándose al plazo fijado para ello en el proceso de licitación.

También se entregaron los resultados de la Séptima Encuesta Nacional de Uso y Acceso a internet. Entre sus principales resultados destaca que el acceso a internet en Chile ha crecido sostenidamente, para llegar en 2015 a un 72% de los hogares, de los cuales 74% corresponde a zonas urbanas y el 56% a zonas rurales.

72% de hogares en Chile tienen acceso a internet, según datos del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones.

1.281 localidades del país deberán contar con los servicios provenientes de las compañías que cuentan con esta banda.

La edad cronológica no predice la verdadera esperanza de vida

DETERIORO. Un estudio advierte que en la actualidad el envejecimiento se debe medir según el estilo de vida y la prevalencia genética de una persona.
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Pamela De Vicenzi

Quedó atrás la clásica asociación entre edad cronológica y salud. Mientras hay adultos mayores que gozan de buena salud y lucidez mental, en la mediana edad ya se evidencian enfermedades recurrentes en la vejez, especialmente de tipo cardiovascular.

Un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) da cuenta de cómo medir hoy en día la edad biológica de la persona y sugiere que ya no es posible predecir su esperanza de vida de manera cronológica.

La investigación busca determinar el deterioro de su organismo no a través del envejecimiento, sino a partir de ciertas condiciones que favorecen la aparición de ciertos males.

Caminos divergentes

Martha McClintock, académica de sicoloía y desarrollo humano de la Universidad de Chicago (EE.UU.), da cuenta de un nuevo modelo para evaluar el envejecimiento de las personas.

Esto incluye factores como la salud mental, antecedentes de fracturas o daños orgánicos y el nivel de actividad física que realizan.

McClintock señaló que hay que repensar el envejecimiento y que existen caminos divergentes, como si se tratara de "deltas en un río. Llegamos al final de la jornada a través de diferentes vías", explicó la académica, citada por Time.

En general, las enfermedades solían actuar de manera cronológica. Por ejemplo, cuando una persona padece alguna enfermedad cardíaca o cáncer, se hacen predicciones a partir de su edad. Mientras más años tenga, mayor es el riesgo de mortalidad.

El estudio de Chicago, al igual que otros, plantea que las personas responden de manera diferente a estas enfermedades y es necesario tomar en cuenta factores como la prevalencia genética y su estilo de vida. Estas experiencias se pueden ajustar y dar lugar a resultados diferentes.

Los resultados

McClintock y su equipo revisaron datos de 3.000 personas de 57 a 85 años inscritos en un programa de salud. Los investigadores realizaron un seguimiento durante más de cinco años y registraron varias características de salud física y mental.

Los especialistas estudiaron 54 variables de salud, incluyendo factores como la movilidad y la vista, que podrían entregar datos sobre si la vejez va bien encaminada.

Los resultados mostraron que las personas consideradas más sanas tenían un mayor peso y una presión arterial más alta. Estos participantes presentaron niveles positivos en cuanto a enfermedades específicas, movilidad, vista y audición.

En cambio, quienes tenían un peso normal no tenían problemas cardíacos o diabetes. Sin embargo, sufrieron de úlceras o anemia, además de un riesgo de mortalidad dos veces mayor durante los cinco años del seguimiento.

Un tercer grupo presentó condiciones de salud negativas, no se trataron de manera correcta enfermedades como la diabetes y por ello no gozaban de buena movilidad.

McClintock señaló que estos resultados ponen de relieve la complejidad de la imagen que la sociedad tiene del envejecimiento y remarcó la importancia de ampliar las variables del deterioro de la salud.

En cuanto al peso corporal, el equipo de investigación hizo hincapié en evitar el sobrepeso para frenar la aparición de enfermedades metabólicas. Pero las personas que no las padecen en la vejez no necesitan de controles de peso extremos.

Los predictores de salud más precisos

El estudio de Chicago remarca que hay predictores de salud que pueden ser más precisos. Estos son la depresión, la soledad y la fragilidad ósea. "En lugar de políticas centradas en la reducción de la obesidad como un problema de salud, un mayor apoyo a la reducción de la soledad entre los adultos mayores aislados o la restauración de las funciones sensoriales sería más eficaz en la mejora de la salud y el bienestar de la población de más edad", subrayó Edward Laumann, coautor del trabajo.

Científicos presentan un dispositivo que protegería a las mujeres del sida

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Un dispositivo que ayuda a prevenir la trasmisión del sida podría convertirse en la esperanza de millones de mujeres que viven bajo un alto riesgo de contagio, especialmente en los países más pobres.

El anillo vaginal, que libera poco a poco un fármaco antirretroviral, fue presentado ayer por la Asociación Internacional para los Microbicidas (IPM, en inglés), entidad sin fines de lucro.

Según consignó El País hace unas semanas, en medio de la difusión de este método en una conferencia en Boston a fines de marzo, el uso de este dispositivo reduce la tasa de infecciones por el VIH alrededor del 30% (un 27% en uno y un 31% en otro).

"Aunque muchos hablan de que el fin de la epidemia está cerca, la batalla todavía no ha terminado. Las mujeres siguen infectándose a niveles muy altos en África Subsahariana", señaló a EFE la directora ejecutiva de la IPM, Zeda Rosenberg, quien precisó que seis de cada diez afectados de esta región son mujeres.

Este anillo de silicona, que se coloca en la vagina y debe ser sustituido cada cuatro semanas, pretende ayudar a atajar la epidemia en la región, donde las mujeres de entre 15 y 24 años tienen el doble de posibilidades de contraer el VIH que los hombres.

Con este nuevo método, similar al anillo vaginal anticonceptivo, las mujeres pueden tomar el control sobre su salud sin depender de manera exclusiva del uso de condón, método de control masculino. Al no tratarse de un anticonceptivo, y a juicio de los especialistas encargados de su desarrollo, se simplifica su comercialización en ciertos entornos culturales. Tras realizar varios experimentos en África Subsahariana para demostrar su efectividad, el anillo está ahora bajo un nuevo estudio, cuyos resultados se conocerán a partir de julio.