En menos de seis horas llovió en Calama lo equivalente a un año
PRECIPITACIONES. Los 5,4 milímetros de agua caída, que dejaron 750 afectados y más de siete mil hogares sin energía, obligaron al municipio a habilitar un albergue, suspender clases y actividades.
En sólo seis horas llovió el equivalente a todo un año. Así de intensas fueron las precipitaciones que afectaron a toda la provincia El Loa desde la madrugada de ayer, las cuales pese a ser advertidas el día anterior por José Albarracín, encargado comunal de Protección Civil y Emergencias de la municipalidad, dejaron estragos en diversos puntos de la ciudad.
Es así, que se contabilizó a 750 afectados, de los cuales 10 fueron catalogados como casos sociales críticos, es decir, que se han visto afectados tanto sus viviendas como su mobiliario.
También, más de 7 mil hogares quedaron sin energía, la cual fue restituida durante la jornada, según indicó el subgerente técnico de Elecda, Filidor Palma, quien además agregó que "la compañía intensificó sus esfuerzos y puso en marcha su plan de contingencia para enfrentar estas situaciones, cuadruplicando la presencia de sus brigadas de atención de emergencia".
Bajo este contexto, es que desde temprano se activaron dos servicios de ayuda concentrados, el Comité Comunal de Emergencia, así como también el Comité Provincial de Emergencia (Coe).
El primero presidido por el alcalde de Calama, Esteban Velásquez quien determinó la habilitación de un albergue en la escuela D-49 Vado de Topáter, el cual estará disponible mientras sea necesario su uso, ya que en él se encuentra una familia a la cual se le inundó completamente la vivienda, como también están cobijando a gente en situación calle.
Estos últimos, porque el albergue del programa Calle está con su máxima capacidad, según explicó el asistente social y encargado del inmueble, Alejandro Quezada.
Educación
Respecto a los centros educacionales de la ciudad, la máxima autoridad comunal suspendió las clases de los establecimientos trimestrales, ya que el resto del alumnado se encuentra con vacaciones de invierno.
En tanto los docentes, quienes tenían planificado una jornada de evaluación tuvieron que reagendar sus actividades.
Sin embargo, algunos de los colegios que no se vieron afectados por las precipitaciones, como el Instituto Obispo Silva Lezaeta y Nuestra Señora Guadalupe de Ayquina, desarrollaron la reflexión con normalidad.
Servicios
Un punto a favor ante la emergencia, fue el suministro del agua potable, el cual no presentó anomalías; al igual que los servicios de salud.
En este sentido, sólo se identificó un par de filtraciones que no afectaron la atención de los usuarios en el hospital Carlos Cisternas, es así que el gobernador Claudio Lagos comentó que "no faltan los motivos por lo que es objeto de críticas el viejo hospital, pero esta vez aguantó hidalgamente el chaparrón. A diferencia del triste episodio vivido en la última emergencia, esta vez no pasó a mayores y reconocemos el esmero de su gente por mantener la normalidad en la atención".
Ayuda
Ante el frente climático, todas las unidades tanto municipales como del Estado se pusieron a disposición de los afectados.
En este sentido, la Dirección de Desarrollo Comunitario dispuso equipos de profesionales que verificaron en terreno la situación a nivel ciudad. Dentro de sus acciones, se encuentra la entrega de más de 700 cortes de nylon.
Asimismo, Carabineros de Chile dispuso personal extraordinario aparte del plan Cuadrante, según comentó el coronel de la institución, Jorge Tobar.
De igual forma, dijo que "cuando comienza este frente climático alrededor de las tres de la mañana, dispusimos personal extraordinario para la regulación de aquellos puntos en la ciudad que en términos viales se han visto más afectados. Asimismo, en los sitios donde dejaron de funcionar los reguladores de tránsito como son los semáforos, para evitar cualquier eventualidad".
En cuanto al Ejército, también se puso a disposición personal, tanto humano como material, para ayudar en casos que sean necesarios.
Pueblos del interior
Con respecto a los pueblos que conforman Atacama la Grande y Alto El Loa, el gobernador comentó que "tenemos la información que va a seguir lloviendo y nevando en algunos sectores, hasta el momento no hemos tenido mayores problemas según el reporte que entregan los municipios y las policías de que pese a este mal tiempo, los pueblos han resistido bastante bien".
Además, la autoridad solicitó un informe a Indap, para ver el estado de los canales como del forraje para la agricultura que se realiza en el sector.
Afectados
Pese a las labores y esfuerzos realizados respecto a la entrega de ayuda. Se identificaron sectores en que los pobladores, por iniciativa propia y bajo la necesidad, se organizaron para subsanar algunas de las emergencias.
Un ejemplo de ello, son los habitantes de la calle Pucón, entre Maipú y Vasco de Gama en la Nueva Alemania, en donde la calle se encontraba completamente colapsada por las aguas e ingresando a las viviendas, que en su mayoría son habitadas por adultos mayores.
Bajo esta situación, cerraron la vía con cinta para que los automóviles no contribuyeran al mal estado, como también sacaron de las casas a los abuelitos afectados para que se trasladaran a otros hogares.
Fresia Orrego, quien vive en el sector comentó que "la situación es siempre complicada, porque cuando llueve el agua que viene desde las calles de arriba, se desvían hacía nuestro pasaje y nosotros nos inundamos completos. Por eso que nos ponemos de acuerdo para ayudarnos, ya que nadie ha venido aún, sólo los muchachos de Aguas Antofagasta que nos están ayudando a bombear el agua".
Una situación similar se vivió en el pasaje Tarapacá Sur, en donde fueron los jóvenes quienes con baldes y palas realizaron labores de despeje.
Uno de ellos fue Jesús Colque, quien comentó que "estamos afectados porque pasa siempre la misma cosa, todas las veces que llueve tenemos que proteger nuestras viviendas o nos quedamos sin nada".
Asimismo, agregó que "se me inundaron las tres piezas de la casa, pero igual tengo que ayudar a los vecinos".
Pronóstico
La emergencia vivida ayer, fue producida por un núcleo frío en altura, el cual está en retirada.
Es así que para los próximos días, se esperan bajas temperaturas y vientos hasta 40 kilómetros por hora, según indicó el centro de análisis de la dirección Meteorológica de Chile, el cual pronostica que los termómetros llegarán a los cero grados con máximas que bordearán los 20.