Nuestro mayor tesoro
Los hijos son diamantes en bruto y es deber como padres entregarles las experiencias y herramientas para que liberen su potencial.
Generalmente el nacimiento de los hijos, trae consigo una gran expectativa, dentro de las más importantes es que nazca sano y saludable, y dentro de las secundarias y más secretas se encuentran un sin fin de planes que cada uno como padre quisiera que se cumplieran, estamos en esto y no nos damos cuenta cuando llega la hora de que nuestros niños entren a la escuela, en el que la ansiedad de ellos se mezcla con la ansiedad propia como padres por las grandes expectativas que tenemos con respecto a su rendimiento, su adaptación, y su bienestar.
Con la llegada de esta etapa escolar nos encontramos con la gran tarea de elegir el establecimiento educacional, en el que a nuestro parecer habrá una mayor preparación y un mejor proyecto educativo que nos garantice el ingreso de nuestro hijo a la educación superior.
Nuestra realidad como ciudad nos dice que los padres con cada año que pasa, están eligiendo los establecimientos particulares por sobre los establecimientos municipales, pero una vez elegido el establecimiento, creemos que nuestra tarea como padres se reduce solamente a cumplir con la entrega de materiales y con establecer medidas disciplinarias para el estudio, presumiendo que el establecimiento es el único responsable de la educación y formación del alumno.
Hay padres preocupados que se encargan de poner a disposición de los hijos un ambiente adecuado para el estudio, libros de consulta o la entrega de la gran herramienta de la Internet y medios tecnológicos, pero aunque el niño cuente con todas estas herramientas no se logra un mejor rendimiento, también existen los padres que no dejan que los niños se recreen y los obligan a estudiar pero tampoco obtienen rendimientos brillantes.
Nosotros como padres estamos acostumbrados a exigirles a nuestros hijos, pero no les entregamos las herramientas necesarias para que logren tener éxito en los estudios, entre estas herramientas tenemos, la estimulación temprana e integración sensorial en la etapa pre-escolar, la correcta adquisición de la lectura, técnicas de estudio y comprensión de lectura en la etapa de primer y segundo ciclo al igual que en enseñanza media.
Patricia Canales Rojel,
Psicopedagoga