Cuestionan continuidad del intendente Volta tras la derrota electoral
CRÍTICA. Nueva Mayoría asume que se trató del peor resultado en décadas y acusa falta de unidad en el bloque.
Dos alcaldes y veinte concejales en toda la región. Esa fue la escuálida cosecha electoral que hoy mantiene al intendente Valentín Volta fuertemente cuestionado y con claro riesgo de dejar el cargo en los próximos días.
En efecto, fuentes de la Nueva Mayoría sostienen que tras el negativo resultado logrado por el oficialismo en las elecciones municipales del domingo, donde no sólo perdieron cupos en los municipios sino que bajaron ostensiblemente la votación global del sector, la continuidad del militante DC a la cabeza del Gobierno Regional se torna inviable.
La Moneda de hecho ya estaría sondeando dentro de la falange posibles reemplazos para Volta, pensando en una remoción que debiera concretarse durante esta semana.
El intendente internamente ha negado haber recibido señales de una posible remoción, aunque a sus cercanos ha planteado que el resultado electoral del domingo perfectamente podría costarle el cargo.
El abogado, en todo caso, tenía planes de dejar la Intendencia en noviembre para preparar una posible candidatura a gobernador regional o diputado, por lo que, de concretarse la salida, se trataría de un adelantamiento de estos planes.
Gabinete
El día después de las elecciones, Valentín Volta se reunió por cerca de dos horas con su gabinete de seremis y aunque no mencionó una inminente salida, varios de los asistentes confidenciaron que el ánimo mostrado por el jefe regional da sustento a tales versiones.
Durante la reunión el intendente no dudó en calificar los resultados de las votaciones como "desastrosos" para el oficialismo y pidió a las autoridades presentes reflexionar en relación a los errores cometidos, entre ellos, la incapacidad de aunar candidaturas en varias comunas de la región.
En general existe unanimidad en que los resultados electorales fueron un duro golpe para la Nueva Mayoría en la región.
El sector gobernante apenas logró retener dos de las nueve alcaldías que estaban en disputa, acumulando el 17,6% de la votación regional total.
Este resultado lo sitúa detrás de Chile Vamos, que de contar con un municipio, pasó a dominar cinco, algo no visto en tiempos de democracia.
Pero eso no es todo. El oficialismo además obtuvo una de las peores votaciones de su historia en concejales, 27,7%, lo que se tradujo en que sólo 20 de sus 96 candidatos tuviera éxito en sus pretensiones.
Reacciones
El senador Pedro Araya (independiente), calificó los resultados del domingo como "la peor derrota sufrida por el sector en décadas" y culpó de esta situación a "líderes intransigentes que no permitieron construir los acuerdos necesarios".
Según Araya, esta falta de unidad también les pasó la cuenta en Calama y Tocopilla, donde la suma de votos entre los candidatos de la Nueva Mayoría y del PRO eran suficientes para retener esos municipios.
En tanto, el senador Alejandro Guillier (independiente) explicó que en estas elecciones el oficialismo pagó el costo de la "desorientación política, las divisiones y el caudillismo que lo han afectado por años".
El periodista, sin embargo, puso en una perspectiva distinta el resultado del domingo y explicó que la derecha también bajó su votación, lo que da cuenta que "los grandes ganadores fueron en realidad los independientes".