El "capitalismo afectivo" o cómo facebook negocia con las emociones
SOCIEDAD. La red constituiría una suerte de catarsis para "purgar demonios" como la ansiedad y el exhibicionismo de la cultura actual.
En sus 12 años de vida, Facebook ya cuenta con más de 1.800 millones de usuarios, y en 2009 instaló como fundamento su pregunta "¿qué estás pensando?". Ante ello, el autor de "Facebook, lo que la red social hace con nuestras vidas", Vicente Serrano, reflexiona: "¿es un descaro que una máquina nos pregunte qué estamos pensando?".
Serrano, autor del ensayo "Nihilismo y modernidad", acuñó el término "Fraudebook" para referirse al fenómeno del "capitalismo afectivo", durante el Festival Puerto de Ideas, en Valparaíso.
Banco de la intimidad
"Mi objetivo es reflexionar sobre el lado más oscuro de este banco de la intimidad" en el que las personas abren una cuenta para depositar sensaciones, emociones y afectos, explica el doctor en Filosofía de la Universidad Complutense de Madrid.
El filósofo admite que Facebook ha transformado los medios de comunicación e incluso las expresiones políticas, como quedó de manifiesto con el movimiento de los indignados, las movilizaciones estudiantiles en Chile o la Primavera Árabe.
"Si se hubiera seguido con atención lo que estaba pasando en las redes sociales, no habría sido una sorpresa la elección de Donald Trump", asegura.
"fraudebook"
"Hay una estafa. No en el sentido jurídico, pero sí en el de que no nos da cosas que promete y nos proporciona otras que no buscamos", afirma el docente, para luego contar su propia experiencia en la red social: "Durante unos meses estuve expuesto a la ansiedad constante y un cierto exhibicionismo. Resultó una experiencia bastante cargante".
Ahí el filósofo descubrió una suerte de catarsis "para purgar aquellos demonios", donde identificó "tres fraudes, falsedades o sucedáneos", de los cuales el primero sería la amistad como elemento definitorio.
"La mayoría somos conscientes de que nuestros amigos de Facebook son otra cosa y lo asumimos como algo inocuo", cuando lo cierto es que la amistad es un bien escaso y desinteresado que exige cierto esfuerzo.
"Lo de Facebook no es verdadera amistad, es una categoría que incluye amigos, colegas, clientes, usuarios de plataformas y hasta enemigos", afirmó.
Turistas
El segundo fraude de la red social sería, a juicio de Serrano, la biografía: "Facebook objetiva acontecimientos de nuestra existencia de manera indiscriminada. Nos convertimos en turistas de nuestra vida, con un afán exhibicionista de dejar plasmado todo lo que hacemos".
Llegado a este punto, el académico sostiene que "la intimidad se revela como una inmensa fuente de riqueza", porque la publicidad llega a un ámbito que es tan íntimo como el de los afectos.
Estados de ánimo
Para Serrano, "Facebook está modificando su condición de red social para convertirse en otra cosa. (...) La gran mentira es que el servicio es gratuito y que siempre lo será", como dice en su declaración de principios.
"¿Realmente recibimos un servicio a cambio de nada? No, nosotros lo hacemos aportando una información muy valiosa: nuestros estados de ánimo", sostiene acerca del "tercer fraude".
"Es un descaro que una máquina me pregunte '¿qué estás pensando?'", señala el filósofo español.
La venta de "los sentimientos, la vida afectiva", serían el nuevo producto de la actual sociedad, concluyó.
El manejo de datos según Facebook
Solicitud de Gobierno
En el último semestre de 2015, el Gobierno de Chile solicitó a Facebook los datos de 285 usuarios. La compañía respondió al 70% de los requerimientos.
Causas penales
La mayoría de los datos entregados a los Estados, declara la compañía, responden a causas penales como robos o secuestros, además de IP's.
Contenido
Ante las solicitudes estatales de restringir contenido, la compañía elimina lo considerado ilegal, notificados por ONG's y usuarios de Facebook.
La influencia electoral
Acerca de si el resultado de las elecciones estadounidenses fueron influenciadas por Facebook, Zuckerberg dijo que la idea es una "locura". Sin embargo, seis de cada diez ciudadanos declaran leer noticias en la red, de acuerdo al Pew Research Center, donde muchas de estas notas provienen de diversos medios como CNN o BuzzFeed, lo que también contribuye a que datos erróneos se propaguen entre los usuarios, recomendados por el sistema electrónico.