Analizan antiguas tabletas de inhalación de alucinógenos
EN SALAR DE ATACAMA. Equipo multidisciplinario trabaja con alta tecnología en proyecto Fondecyt para develar los secretos detrás de objetos utilizados hace siglos por la cultura atacameña, así como para determinar el rol de esa actividad en dicha sociedad prehispánica.
Con instrumentos de alta tecnología, científicos de la Universidad Católica del Norte (UCN) realizaron un completo análisis de las incrustaciones minerales presentes en tabletas de inhalación de alucinógenos utilizadas por los antiguos habitantes del salar de Atacama.
Esto, en el marco de un estudio interdisciplinario que consideró seis piezas pertenecientes a la colección de parafernalia sicotrópica del Museo R. P. Gustavo Le Paige s.j. de la UCN en San Pedro de Atacama, las que por primera vez fueron examinadas con un moderno equipo de microfluorescencia de rayos X que aportó valiosa información.
El trabajo del equipo interdisciplinario se enmarca en el proyecto Fondecyt 1160849, el que tiene como objetivo profundizar en aspectos relacionados con la inhalación de polvos sicoactivos como práctica milenaria en la cultura atacameña, así como indaga en el rol que jugaba esta actividad en dicha sociedad prehispánica.
"Hay una presencia importante de incrustaciones de minerales de cobre en las tabletas, lo que es parte del toque identitario atacameño", resaltó la arqueóloga e investigadora responsable del proyecto, Dra. Helena Horta.
La académica del Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Museo (IIAM) de esa casa de estudios superiores, explicó que mediante esta labor también se pudo detectar una presencia relevante de turquesa y crisocola entre las incrustaciones aplicadas a los objetos analizados.
"Es una práctica que surge en el Periodo Medio, aproximadamente desde el 400 después de Cristo y que se mantuvo hasta tiempos coloniales tempranos, y tiene que ver con la base misma de los conceptos religiosos imperantes en una vasta región del sur de los Andes", agrega la Dra. Horta.
La especialista añadió que inicialmente arribaron a Atacama tabletas y otros elementos de la parafernalia importados desde el área circun-Titicaca en Bolivia, pero los atacameños luego comenzaron a fabricar sus propias creaciones talladas en maderas nativas, surgiendo así diferentes estilos locales a través del tiempo. De hecho, las creaciones locales son las que sobrevivirán a la llegada de los españoles.
Colección
El Museo R.P. Gustavo Le Paige s.j. cuenta en la actualidad con más de 700 tabletas y un número indeterminado de tubos para inhalar, los que fueron utilizados en diversos contextos por los habitantes precolombinos del salar de Atacama y áreas vecinas. Esto se refleja en que la colección también incluye objetos provenientes de distintos puntos del área centro-sur andina, algunos de ellos tan distantes como Tiwanaku, en el lago Titicaca, el noroeste argentino y el Norte Chico en Chile.
El proyecto también incorpora el estudio de otros elementos como morteros, espátulas y piloncitos para moler y dosificar la semilla del cebil (Anadenanthera colubrina var. cebil), árbol en cuyas vainas se encuentran las semillas con sustancias psicoactivas que eran inhaladas por la nariz.
Además de detectar la presencia del cebil, también se ha encontrado restos de tabaco nativo, quedando en evidencia que se aplicaba una combinatoria muy específica y variada de vegetales. Estas plantas eran utilizadas no solo en rituales o experiencias de contacto con las divinidades, sino que también eran empleadas para uso medicinal y en la cura de ciertas enfermedades.
"Nuestra intención es estudiar ajuares funerarios completos, depositados en el museo. Este año analizamos Quitor 6, un cementerio grande de 323 tumbas, y en sus ajuares aparecen muchos elementos de la parafernalia sicoactiva. También se registran gorros, vestimentas, cestas con alimentos, mineral de cobre en forma de collares de cuentas, bolsitas con mineral de cobre sin procesar y objetos de metal como hachas y mazos, entre otros", resaltó la investigadora.
Tabletas
Las seis tabletas que incluye esta fase del estudio fueron seleccionadas por sus especiales características de estilo y la interesante iconografía de sus diseños. Estos artefactos son solo de madera, pero en ocasiones incluyen pequeñas incrustaciones de minerales -como cuentas para collar o mineral en bloques- que los científicos identificaron mediante el uso de modernas técnicas y equipamiento.
La fase de análisis fue desarrollada en Antofagasta en los laboratorios del Departamento de Ciencias Geológicas de la UCN, lo que resalta el carácter multidisciplinario del trabajo, el que incluye un equipo de 10 profesionales y técnicos de áreas como química, geología, bioantropología y arqueología, entre otras.
Técnicas avanzadas
El proyecto, con un presupuesto total de 150 millones de pesos y que se extenderá hasta 2019, consideró la utilización de alta tecnología y modernas técnicas de trabajo.
Sobre el particular, la Dra. Valentina Figueroa, directora de Investigación del IIAM de la UCN y experta en metales, puso de relieve el uso de la arqueometría como una línea de estudio que emplea diversas técnicas con análisis físico-químicos, para buscar solución a problemáticas arqueológicas.
Resaltó la utilización de un instrumento de microfluorescencia de rayos X de la marca alemana Bruker (modelo M4 Tornado) para establecer la composición elemental de los minerales incrustados en las tabletas. "Con el uso de esta máquina podemos analizar 10 minerales con una buena resolución en un tiempo de 15 minutos por tableta". También valoró la oportunidad de realizar este tipo de trabajo en Chile, y en particular en la Región de Antofagasta, ya que antes este tipo de análisis solo se podía realizar en Santiago o en el extranjero.
"Es una tecnología nueva en el mundo", resaltó Andrew Menzies, profesor de geoquímica del Departamento de Ciencias Geológicas de la UCN, al referirse a las capacidades que entrega el equipo de microfluorescencia de rayos X utilizado en la investigación.
El uso de este instrumental -aclaró el experto- tiene amplios beneficios, en especial para la industria minera, pero también puede ser utilizado en otras áreas como la arqueología. "Es muy flexible y tiene múltiples posibilidades para distintos tipos de investigaciones", complementó Menzies.
Otro punto a favor que resaltó el experto, es que el uso del equipo no daña la tableta para obtener información, lo que es una ventaja sobre otros métodos en los cuales es necesario destruir o moler la muestra antes de poder analizarla.
Los investigadores también pusieron especial énfasis en el cuidado y en las medidas de seguridad adoptadas para trasladar las piezas desde San Pedro de Atacama hasta los laboratorios del Departamento de Ciencias Geológicas en la Casa Central de la UCN en Antofagasta. Sobre este punto, la administradora de la unidad de Colecciones y Conservación del Museo, Jimena Cruz, explicó que para mover las tabletas se debió seguir un estricto protocolo con el fin de preservar este patrimonio y evitar cualquier daño durante el viaje, para lo cual se dispuso de un embalaje especial que evitara el movimiento de las piezas en su interior.
10 profesionales y técnicos de áreas como química, geología, bioantropología, arqueología, entre otras participaron de este fase de análisis realizada en Antofagasta.
$150 millones es el presupuesto total de este proyecto, el cual se extenderá hasta el año 2019, que consideró la utilización de modernas técnicas y alta tecnología.
700 tabletas contiene el Museo RP Gustavo le Paige y un número indeterminado de tubos para inhalar, los que fueron utilizados en diversos contextos.