Ricardo Pinto Neira
Parte diciendo que pese a que fue parte de un equipo campeón, no se siente en la galería de los ídolos históricos del club. "Yo estuve sólo un año y medio y venir a Cobreloa me sirvió para volver a salir al extranjero y por lo mismo, siento que le devolví la mano al club. Ellos me permitieron jugar a un gran nivel porque ese equipo del '92 era extraordinario y yo pude generar recursos para la institución. Pero en ese equipo hubo ídolos de verdad, como Héctor Puebla, Marco Figueroa, Fernando Cornejo. Esa gente sí que es parte de la historia, yo no", reconoce "El Pillo", ese volante creativo multicampeón con Colo Colo y subcampeón de Copa América en 1987 que recuerda con cariño su paso por Calama.
"Lo pasé muy bien acá, principalmente porque me tocó jugar en un equipo que hizo una campaña inolvidable, que jugaba a estadio lleno y ganaba. Estuvimos muchos partidos sin perder y eso nos hizo cada vez más fuertes. Recuerdo que en la final con Fernández Vial que ganamos 3 a 1, el estadio estaba hasta las banderas. La gente disfrutaba porque ese era un equipo de lujo. No podría rescatar a uno porque éramos un todo", relata Vera.
Jaime Vera rememora que "ese era un equipo que no venía bien tras la salida de Fernando Cavalleri, que lo tomó don José Sulantay y de inmediato le impregnó su sello, su motivación. Y como tenía buenos jugadores, empezamos a ganar y después no nos pudo parar nadie".
Calama
Vera pidió jugar Copa Libertadores con "Los Dragones Celestes" por cercanía con Iquique pero además, porque conoce la ciudad y sabe qué ventajas sacarle. Como las sacó ese Cobreloa campeón de 1992.
"Yo soy un agradecido de esta ciudad. La gente me trató muy bien, mi familia disfrutó estar acá y todavía tengo muchos amigos aquí. En esos años, el estadio que había no era el mismo que tienen hoy. Nosotros no teníamos esas comodidades que existen ahora y que ojalá que los jugadores valoren para devolver a Cobreloa a Primera División".
El "Pillo" dice no tener opinión sobre el actual Cobreloa, el que cayó al ascenso porque "no estuve acá, no estoy al tanto y no me corresponde opinar" pero como ex jugador, sabe muy bien qué le regalaría al club que lo catapultó de nuevo al fútbol internacional.
"Yo le devolvería los dirigentes de esa época. Hacían que los jugadores estuviéramos muy cómodos e incorporaban a la gente justa, la que se identificaba con esta camiseta y con los mineros. Estaba Orlando Álvarez y después llegó Sergio Jarpa, dirigentes de primer nivel que nos hacían sentir a gusto y eso nos permitía trabajar muy tranquilos. Uno no sabe qué pasó en el último tiempo, si es fundamental o no el apoyo de una empresa como Codelco que en mis años acá estaba. Pero esos directivos tenían a Cobreloa en lo más alto, no como está hoy", cerró.