María Isabel Pérez Rivera
Una compleja situación es la que deberá enfrentar el departamento provincial de Bienes Nacionales en Calama, para poder catastrar y conocer qué personas son las que se encuentran habitando en las tomas que se ubican desde Ojo de Opache hacia el norte, por el sector poniente de la ciudad.
Así lo dio a conocer la jefa provincial de la cartera, Angelique Araya, quien señaló que durante febrero espera poder iniciar este trabajo, ya que como asistente social también le interesa conocer cuál es la situación económica y social real de quienes se encuentran viviendo en tomas no autorizadas.
"Efectivamente tenemos sectorizadas las tomas del sector poniente. Una se encuentra desde La Cascada hasta Cobija donde existen asociaciones con calidad indígenas que presentaron postulaciones, pero además existe una comunidad territorial indígena atacameña, que presentó una postulación de más de 750 hectáreas, donde pretenden levantar nuevamente el pueblo de Chunchuri", dijo Araya.
Un proyecto ambicioso de esta comunidad territorial, que, además de ser parte de las únicas figuras que pueden solicitar terrenos, busca levantar una iglesia, potenciar la agricultura tecnificada y tradicional, crianza de animales, tambos y talleres artesanales.
"Esta agrupación se encuentra trabajando además con otras agrupaciones indígenas existentes en la ciudad, como los Inti Llajta, Forjadores de un Nuevo Oasis, Inti Huaira, Hijos de El Loa, por mencionar algunos", dijo la jefa de Bienes Nacionales en la provincia El Loa.
Desalojos
Hacia el final de la calle Cobija, existe el Comité Oasis Perdido. Con respecto a la situación de estas personas, Araya dijo que próximamente serán desalojados.
"No hay postulación, y sólo hace unos días se presentaron, pero la verdad es que el desalojo ya está cursado", dijo, señalando además que "aprovecho de aclarar que no es cierto cuando dicen que Bienes Nacionales está entregando terrenos por el sólo hecho de cercar y plantar un par de arbolitos. Acá hay una demanda indígena y nosotros somos muy respetuosos de las comunidades indígenas y se va a trabajar con ellos", expresó.
Respecto de los sectores que se encuentran entre Tocopilla y Hurtado de Mendoza, Angelique Araya se refirió al lugar como una nueva Calama. "Hay grandes ocupaciones, por lo tanto tenemos que trabajar en ello, porque además no todas las ocupaciones están en terreno fiscal. Existen también terrenos de privados, servidumbres mineras y destinaciones", dijo.
Apoyo
La jefa provincial de Bienes Nacionales levantó una matriz de conflicto, informando a las autoridades competentes de la situación, además de solicitar apoyo humano a otros estamentos públicos para la aplicación de un instrumento similar al que se utilizó con los campamentos en Antofagasta con los servicios públicos.
"Quiero hacer un barrido de todos los sectores para saber cuántas familias son, de dónde son y cuáles son sus actividades económicas, porque muchas personas tienen problemas habitacionales, a diferencia de los indígenas", cerró.
"Han habido actos de matonaje donde han agredido a mujeres, señalando que Bienes Nacionales entregó el terreno. Eso no es así". Angelique Araya Jefa Provincial Bienes Nacionales"