Más de 5 mil embarazadas atendió la red municipal de salud de Calama en 2016
ESTADÍSTICAS. Pese a que la tasa global de fecundidad está disminuyendo en el país, la región se ubica como la tercera por sobre la media nacional. En tanto Calama disminuyó en 223 las inscripciones de los recién nacidos en comparación con 2015. Dentro de las atenciones se encuentran menores de 15 años.
Los cambios favorables acontecidos en el país y en la región en términos del mejoramiento de las condiciones sociales, culturales y de calidad de vida de la población, entre otros aspectos, han influido en el descenso constante que ha experimentado la fecundidad, tanto en su nivel como en estructura, en las últimas cuatro décadas.
De hecho, las características asociadas a este descenso en Chile se aproximan cada vez más a las de las naciones más desarrolladas.
Es así que a partir de la segunda mitad de la década de 1960, en la mayoría de los países de América Latina comenzó a disminuir el número de hijos por mujer, desde un promedio de 6 hijos, se ha llegado, en la actualidad, a la cifra de sólo 2,8 hijos por mujer.
Por ello que el nivel de fecundidad de Latinoamérica es similar al que tuvo Europa en 1950 y que actualmente es el continente que presenta menor fecundidad mundial: 1,4 hijos por mujer.
Si comparamos, entre 1950 y 2000, América Latina disminuyó su fecundidad en un 53% y Europa en 47%.
En tanto la tasa global en Chile alcanzó la cifra de 1.8 hijos promedio, es más, el año pasado un total de 247 mil 555 bebés fueron inscritos en las oficinas del servicio de Registro Civil e Identificación, 12 mil 769 menos si se compara con las cifras registradas el año 2015.
Panorama diferente al que se proyecta en la región de Antofagasta la cual, según el último Anuario de Estadísticas Vitales, elaborado por el Registro Civil en conjunto con el ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Estadísticas (Ine), la tasa global de fecundidad asciende a 2.2 hijos como promedio.
Esto la cataloga entre las siete regiones que superan la media nacional, lo cual es asociado positivamente por expertos en la materia, ya que de esta forma se asegura la proyección de la comunidad en el futuro.
Calama
Por su parte la ciudad registró, sólo en la red de salud municipal, 5 mil 723 ingresos de gestantes al programa Prenatal el año pasado, de las cuales 3 mil 501 declararon que era un embarazo no deseado.
Las cifras, entregadas por la matrona y asesor técnico en el departamento de Salud de la Corporación Municipal de Desarrollo Social y Educación (Comdes), Daniela Yáñez, evidencian que la población que contiene el mayor número de gestaciones son las mujeres de 20 a 24 años, monto que ascendió a 1. 690, posteriormente le sigue el bloque de 25 a 29 años de edad con 1. 511 unidades.
"En el programa de la mujer , que incluye el Prenatal, vemos todos los controles del embarazo y con ello se generan estadísticas de los ingresos, cuántas de ellas tienen riesgo psicosocial, cuántas son inmigrantes, las edades en las que se distribuyen, entre otros aspectos", declaró al respecto Daniela Yáñez.
De esta forma se van conformando informes mensuales que son enviados al Servicio de Salud de Antofagasta donde se reúnen a nivel regional y sirven para generar políticas de apoyo contextualizadas a la realidad local, según explicó la profesional.
Quien agregó que en cada centro de salud de la red en la ciudad existe un equipo de matronas que son las encargadas de ejecutar el programa.
Embarazo riesgoso
Dentro de los ingresos locales también se incluye la población de niñas menores de 15 años, quienes en 2016, registraron 32 embarazos. Todas declararon que no era deseado.
"En estos casos nosotros como Comdes tenemos un programa de apoyo para que concluyan sus estudios y manejen de la mejor forma posible la situación, que de por si es compleja", dijo Yáñez.
Agregando que "el objetivo primordial es que ésta población no registre embarazos".
Por ello es que se han implementado los "espacios amigables para adolescentes" donde los interesados pueden recibir orientación sexual, por parte de expertos, sin estar en compañía de un adulto, "además es gratuito y tiene horarios diferidos para que sea más accesibles a los jóvenes", dijo la matrona.
Estos espacios se pueden encontrar en algunos Centros de Salud Familiar (Cesfam) ubicados en Calama.
Otro segmento que es catalogado como riesgoso son las mujeres embarazadas que superan los 35 años, incluso en 2016 se registraron 10 gestaciones de personas entre los 40 a 45 años.
"Lo ideal sería que las interesadas en ser madres lo hagan hasta los 34 años, ya que después la fecundidad comienza a descender. No es que no se pueda, pero si son riesgosos, tanto para la gestora como para el bebé", comentó Daniela Yáñez.
Otra de las recomendaciones que entrega la profesional es que las embarazadas se realicen el primer control antes de las 14 semanas de gestación, ya que de esta forma existe oportunidad de evitar contagios al bebé de enfermedades como el Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida, conocido como Sida
Pero cuáles son las razones por la que la tasa global de fecundidad en la ciudad como en la región es superior a la media nacional, el sociólogo y profesional del Centro Ingeniería Organizacional (Cio), de la Universidad de Chile, Rodrigo Bruna, comentó que este "fenómeno" es multifactorial, pero que el telón de fondo es la economía.
Factores
Que Calama registre una alta tasa de natalidad se puede explicar por varios factores los cuales, en general, son determinados por tener una economía sólida, pese a los tiempos difíciles que ha vivido el precio del cobre en los últimos meses, dijo el profesional.
"Incluso si uno ve la evolución del embarazo en Calama en los últimos cinco años, se identifica una disminución en los últimos, ya que tener mejor economía da la seguridad necesaria para planificar aumentar o tener familia", explicó el sociólogo.
Otro factor que incide es la migración. "Para nadie es desconocido que existe una importante población migrante en las ciudades del norte. Ellos vienen por mejores oportunidades laborales como sociales, pero con otras realidades", declaró Bruna.
Es decir que son comunidades que de por sí tienen altas tasas de natalidad, y que no tienen muchos accesos a sistemas de anticoncepción.
De igual forma influye la educación de las personas, "ya que acá se da un fenómeno inversamente proporcional sobre todo en las mujeres. Ó sea, está comprobado que entre mayor grado educacional tiene una mujer menor es la cantidad de hijos que tiene", explicó Bruna.
Por lo tanto en Calama, la movilidad de población, la posibilidad de encontrar trabajo, la falta de oportunidades educacionales de calidad, entre otros, proporcionan un ideal para tener bebés, añadió el sociólogo.
Sin embargo esto no se debe considerar negativo, por el contrario, "ya que si queremos que perdure nuestra sociedad se debe pensar en el aumento de la población", dijo finalmente Bruna.
"En estos casos como Comdes tenemos un programa de apoyo para que concluyan sus estudios y manejen de la mejor forma posible la situación, que de por si es compleja" Daniela Yáñez
Matrona y asesor técnico Comdes"
5.723 ingresos de gestantes al programa prenatal registró la red de salud municipal en Calama, de ellas 32 tenían menos de 15 años y 10 sobre los 45 años de edad.
2.695 inscripciones de nacimientos fueron registradas el año pasado, disminuyendo en 223 si se compara con el 2015. En tanto el 2014 fue el año con mayores trámites de este tipo, ascendiendo a 3.013.