El Comité de Inteligencia del Senado de Estados Unidos afirmó que no encontró "ningún indicio" de que la administración de Barack Obama hubiera interceptado comunicaciones de la Torre Trump, como asegura el Presidente Donald Trump.
"Basándonos en la información de que disponemos, no vemos indicios de que la Torre Trump fuera objeto de una vigilancia por parte de ningún elemento del Gobierno de Estados Unidos ni antes ni después del día de las elecciones de 2016", dijeron el republicano Richard Burr y el demócrata Mark Warner, en un comunicado conjunto.
Un día antes, el presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara Baja, Devin Nunes, también declaró que no tenía pruebas. Ese mismo día, Trump insistió en su acusación y sostuvo que "pinchar un teléfono abarca muchas cosas".
SEGUNDO decreto
En otro flanco abierto para Trump, jueces de Hawai y Maryland suspendieron la entrada en vigor del nuevo decreto migratorio que debía activarse ayer a la medianoche. Es la segunda vez que la justicia estadounidense frena la medida, que busca cerrar temporalmente las fronteras a personas de seis naciones que fueron incluidas, durante el gobierno de Barack Obama, en la lista de países que apoyan el terrorismo.
El mandatario criticó a los jueces y dijo que llegará con la disputa hasta la Corte Suprema. "Tenemos intención de apelar a esta sentencia defectuosa", advirtió el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer. "El peligro es real y la ley es clara", agregó y precisó que el Departamento de Justicia está analizando cuál es el mejor momento para iniciar la ofensiva legal.
Trump dijo ayer que "vamos a pelear este fallo, vamos a llevar este caso tan lejos como sea posible, incluyendo todo el camino hasta la Corte Suprema. Vamos a ganar", expresó y agregó que el fallo del juez de Hawai "ha sido un exceso judicial sin precedentes".
US$ 1.500 millones para iniciar el muro
Donald Trump necesita contratar 500 agentes fronterizos y 1.000 nuevos agentes de inmigración para cumplir su promesa de construir el muro fronterizo. Ayer, al presentar primer borrador del presupuesto, pídió 1.500 millones de dólares para el año fiscal 2017, por concepto de diseño y planificación de esta mega obra, y 2.600 millones de dólares más para el año fiscal 2018 (octubre 2017-septiembre 2018).