Gobernar es educar
El compromiso es avanzar en justicia social, participación ciudadana, igualdad y educación.
Esta frase acuñada durante el Gobierno del presidente Pedro Aguirre Cerda entre los años 1938 - 1944, pone de manifiesto el rol protagónico que debe tener el Estado en la formación de los ciudadanos y en la construcción sólida de las bases de nuestra sociedad que buscamos proyectar para el futuro.
Nuestro actual gobierno escuchando a nuestros ciudadanos y ciudadanas ha reinstalado esta consigna, no sólo con la implementación progresiva de la Reforma Educacional que en nuestra región, a la fecha, ha beneficiado a mil 479 jóvenes con gratuidad, sino que a través de varias políticas públicas buscan potenciar la participación de los ciudadanos en la toma de decisiones del país. Prueba de lo señalado anteriormente, fueron seis meses de distintas instancias de diálogo ciudadano del Proceso Constituyente, donde a nivel nacional más de 230 mil personas pudieron conversar, debatir, y ser escuchados sobre qué valores y principios deben inspirar a nuestra sociedad, los derechos y deberes que debe tener toda persona que habite en nuestro territorio, y las instituciones que deben estar contempladas en nuestra carta fundamental, es decir, con este proceso se generó una instancia de formación ciudadana en temas cívico - constitucionales , a fin de que las personas participen de forma informada y se expresen cívicamente.
La misión de nuestro Gobierno es acortar las brechas de desigualdad, esto nos lleva en el sector Justicia a trabajar intensamente en los mecanismos de reinserción social, sobre todo en los programas de carácter educativo, tanto a nivel básicos y medios, de las que personas condenadas han sido privadas como consecuencia de la reclusión.
Durante el año 2016, se matricularon en la región, 712 personas privadas de libertad que se encuentran regularizando sus estudios. Además, contamos con áreas especializadas como el Centro de Educación y Trabajo (C.E.T) que permite a los internos aprender un oficio, que garantice el sustento propio y el de sus familias, facilitar el ejercicio de los derechos no restringidos por la reclusión.
Así también el trabajo realizado por los Centros de Atención e Integración Social (C.A.I.S) para brindar todo el apoyo a las personas que ya cumplieron sus condenas pero que necesitan una oportunidad para seguir desarrollándose en la vida.
Marcelo Encina Muñoz,
Seremi de Justicia y Derechos Humanos