Carolina Collins
La decisión de retrasar en tres meses el estreno de su séptima temporada, no sólo dejó a "Game of Thrones" fuera de la posibilidad de competir en los Emmy. También aumentó la ansiedad de los miles de seguidores que desde 2011 siguen la serie que ya comienza a acercarse a su fin.
El séptimo ciclo de la ficción de HBO basada en las novelas del británico George R.R. Martin, que comienza mañana en el canal de cable, es además el penúltimo de la serie que desde su estreno se convirtió en un verdadero fenómeno, arrasando no sólo a nivel de la crítica y los premios, sino también de audiencias, batiendo con cada nueva temporada los records en Estados Unidos.
Retraso y expectación
El éxito ha sido tal, que pese a que el año pasado "Game of Thrones" se coronó como la reina de las series al ser nominada en 23 categorías de los Emmy, HBO se dio el lujo de posponer el estreno de su nueva temporada, dejando con esto a su caballito de batalla abajo de la premiación más importante de la industria televisiva, que el jueves anunció a sus nominados.
La decisión de la cadena implicó tres meses adicionales de espera para los fans. Cada año, la serie estrenaba una nueva temporada en abril, pero HBO confirmó tras el fin del sexto ciclo el año pasado, que cambiaría esa costumbre y dejaría para julio el estreno.
Lo que no implicó que el interés decayera. El fanatismo y la expectación ha sido tal, que la cadena estadounidense se vio obligada a grabar escenas falsas para evitar las filtraciones. Algo que los ha afectado a lo largo de las siete temporadas que han producido en locaciones ubicadas en Irlanda, Islandia, Croacia y España.
Así lo reveló el protagonista de la serie, Kit Harington, quien encarna a Jon Snow, durante una entrevista con el comediante estadounidense Jimmy Kimmel: "Teníamos un montón de paparazzis siguiéndonos cuando estábamos en España, pero fingimos algunas escenas. Pusimos a algunas personas juntas en situaciones cuando sabíamos que los paparazzis estaban cerca", y se negó a contar cuáles esas eran esas escenas falsas que salieron publicadas en varios sitios web.
Secreto de estado
Y es que el secretismo en torno a la serie es tal, que el mismo Harrington reveló que el elenco no ve la serie hasta que todo el público lo hace. Así, hasta ahora, no hay mucha claridad sobre lo que vendrá en la nueva temporada, que a diferencia de las anteriores que contaban con diez episodios, solamente tendrá siete que, sin embargo, ya se anunció que serán más largos. Además, esta no será la más corta, porque la octava tendrá uno menos.
Según han adelantado los numerosos trailers que han sido liberados hasta ahora, ha llegado el momento de la gran batalla por el Trono de Hierro. Pero no será la única.
Todo parece indicar que el invierno ya ha llegado a los siete reinos y con él, la gran guerra contra los "White Walkers", los fantasmagóricos seres que habitan al otro lado del muro. Así lo adelantó el afiche de la temporada revelado por HBO, que tiene como protagonista al Night King y no a los personajes de las siete casas.
En esta temporada además ocurrirá la esperada llegada de Daenerys Targaryen (Emilia Clarke) y sus dragones a Westeros y probablemente, a King's Landing, donde por fin se podrá ver su choque con los Lannister por el Trono de Hierro, que quedó controlado por Cersei (Lena Headey).
Pero la historia seguirá transcurriendo en paralelo en el norte, donde Jon Snow y su hermana Sansa Stark, se preparan para la gran batalla.
Tal como su antecesora, esta temporada también correrá por un camino independiente del que escribió George R.R. Martin en su saga inconclusa, "Canción de hielo y fuego", que aún no publica su sexto tomo y que dejó a "Game of Thrones" a cargo de sus guionistas.
