Estamos cercanos a la celebración de las "Fiestas Patrias", y considerando los gastos que ello implica, muchas personas optan por la alternativa de pedir un crédito o un avance en efectivo. Lo primero que los consumidores deben tener presente es que no hay crédito gratis. Por otro lado, al momento de tomar la decisión hay que determinar el alcance de las obligaciones y posibilidades de pago.

La Ley de Protección de los Derechos de los Consumidores (LPC), establece una serie de derechos e incluye herramientas que les permiten a las personas cotizar adecuadamente y saber de antemano cuánto terminarán pagando.

En caso de acceder a un crédito, es aconsejable solicitar una cotización y compararla con la institución de al lado. La Ley dispone que esta valoración tiene una vigencia de un período mínimo de 7 días hábiles.

Asimismo, las empresas financieras deben entregar a los consumidores una hoja de resumen, la que tiene un formato estándar y debe ir en la primera carilla del contrato y de las cotizaciones. Debe indicar el costo total del crédito y todos los gastos o cargos asociados al crédito que el consumidor está solicitando, entre otros aspectos relevantes.

Al momento de cotizar y elegir la mejor alternativa, el consejo es fijarse en el Costo Total del Crédito (CTC), que es el monto que terminará pagando al final.

Además, es importante considerar la CAE, indicador que permite conocer el costo del crédito en un año y comparar fácilmente entre varias empresas.

Las entidades bancarias no le pueden vender ni ofrecer productos de forma atada a los consumidores. Esto quiere decir que no pueden imponer o condicionar la contratación de un producto a otro distinto, sin darle la posibilidad de contratar dichos productos por separado.

En el caso del uso de las tarjetas de crédito, es mejor concentrar todas las compras en una sola transacción. De esta manera se ahorra en el pago de comisiones.

Al tratar de responder la pregunta si es mejor realizar un avance en efectivo o el crédito, en general los estudios del SERNAC han establecido que es más barato comprar a crédito que pedir un avance en efectivo.

Tras la realización de la fiesta en honor la Virgen de Guadalupe de Ayquina, se retomó el debate respecto a la necesidad de instaurar un feriado regional permanente, para el 8 de septiembre, día de la masiva celebración religiosa. Fueron parlamentarios del oficialismo como el senador Alejandro Guillier y el diputado Marcos Espinosa, quienes reiteraron que insistirán ante el gobierno para que el día sea festivo.

Ambos congresistas estaban en el Santuario cercano a Calama y comprobaron que la asistencia de fieles disminuyó en comparación con el año pasado, donde el día 8 de septiembre estuvo en rojo en el calendario y permitió que muchos feligreses llegaran desde distintos puntos de la región.

Recalcaron que la iniciativa del feriado permanente debe partir desde el Ejecutivo, porque desde sus roles parlamentarios sólo pueden hacerlo año a año y no con un carácter de permanencia. De paso criticaron que aún se esté debatiendo el tema, que forma parte del trabajo destinado a otorgarle mayor autonomía a las regiones, de la mano de la elección de gobernadores regionales por voto popular.

Es en estas discusiones que se trabó la iniciativa y nadie asegura que el futuro gobierno acepte la normativa con la que se avanza para los llamados feriados regionales, que según los estudios son justificables.

Este último aspecto es el que se quiere volver a debatir ya que es resistido desde las autoridades del Ministerio de Hacienda debido a los costos asociados. No hay que olvidar que la Región de Antofagasta es una de las más productivas del país, y el costo para el Estado suele desanimar a quienes quieren apoyar la idea y proponen alternativas para que sea un día semi-laboral.

La importancia que ha tenido la fiesta de Ayquina es conocida desde hace tiempo por las autoridades y saben que en ciudades como Calama, el 8 de septiembre, gran parte de sus habitantes se desplazan al Santuario, y el ritmo de la vida cotidiana decae. Por ello, se hace entendible que se otorgue el festivo y se pueda seguir con una tradición tan arraigada en la gente.