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ENTREVISTA. arturo sanhueza, capitán de Cobreloa:

"Es un camino largo, pero mi sueño sería dirigir algún día a la selección chilena"

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"Tuve la oportunidad de hacer los cursos cuando estaba en Colo Colo y los hicieron Mena, Riffo y 'Kalule' pero no me llamaba la atención. Después me entusiasmé, principalmente por lo que me decía gente del fútbol, como el profe Jorge Pellicer, que me decía 'tienes visión para organizar, deberías pensarlo' y me decidí porque uno siempre tiene que pensar en el fútbol", comenta el estudiante de la generación 2014 del INAF en Concepción, la primera en el sur -comenzaron en Santiago- y que tiene nombres tan conocidos como los de Leandro Delgado, Claudio Muñoz -que congeló para ir a San Marcos de Arica- o Sebastián Roco.

¿Qué es lo más difícil?

Los traslados, el desgaste, quitarle espacio a la familia. Cuando estaba en Temuco y ni hablar del período en Cobreloa, donde uno a veces sale de la casa para jugar afuera el día jueves y por esto de tener el lunes en Concepción, recién llegas el martes a Calama. En ese sentido, el apoyo más grande es el de mi mujer -Karen Paredes- quien se ha llevado el peso con los niños cuando yo tengo que estar fuera de la casa.

¿Te daban permiso los técnicos pese a ser capitán del equipo?

Landeros -Luis, ex DT de Temuco- nunca me hizo problemas cuando comencé. Aunque como salimos campeones y teníamos que estar para semanas claves, conversábamos el tema. Hice el curso con Sebastián Domínguez y Orlando Gutiérrez, que también estaban en ese equipo. Acá en Cobreloa, el apoyo de Carlos Rojas, César Bravo, el profe Sulantay fue fundamental. Y el club me ayuda porque me cambia pasajes cuando tengo que regresar al otro día para integrarme.

¿Cómo es un día de un aspirante a técnico del INAF?

Como todos los estudiantes, tenemos el peso de pagar una mensualidad -poco más de 140 mil pesos- y tener un régimen de clases teóricas y prácticas. Llegamos a las 8 y media de la mañana y tenemos clases en la Universidad Santa María hasta las dos. En la tarde tenemos el trabajo táctico en la cancha de la universidad donde aplicamos estrategias y ponemos en juego el sistema que queremos implementar.

¿Y cómo jugarían los equipos de Arturo Sanhueza?

Con línea de cuatro atrás, dos volantes de contención y un enganche, donde uno de contención es centralizado y otro mixto más tres en punta. Siempre pensando en que el enganche pueda ser mixto ya que en los equipos actuales ese creativo específico ya no existe. Es polifuncional.

¿Algo como el Colo Colo de Borghi donde jugaste?

Sí, o el Temuco de Landeros que también tenía ese sistema y atacaba con dos delanteros por las orillas y un centrodelantero que finiquitaba las jugadas que armábamos.

¿Y te gustaría trabajar en Cobreloa?

En todos los clubes donde jugué y donde me dieron la posibilidad de desarrollarme. Acá voy a trabajar con César Bravo aunque primero debo conversar con él. La idea es apoyarlo cuando la sub 19 juegue acá y en los entrenamientos que no se topen con los del primer equipo. Y sin duda que me gustaría poder trabajar en Fernández Vial, en Temuco, en Wanderers o Colo Colo algún día. Hacer carrera.

¿Visualizas tu futuro como entrenador?

Sí, me gustaría porque es una manera de seguir en el fútbol aunque también, como lo hice cuando estuve en el retiro, me llama la atención el tema de la gerencia deportiva, de la gestión.

¿Y el sueño mayor?

Sé que es un camino largo pero mi sueño sería dirigir a la selección chilena algún día. Con las nuevas generaciones que surgieron gracias a esta selección de ahora, los niños son más ganadores y los futbolistas que vienen no tienen la mentalidad que tenía uno cuando le tocó defender al país y salíamos a defender el empate. Estos de ahora quieren ganar "hasta en el play". Hay muchas más opciones de ganar algo en el futuro con una selección chilena.

Arturo vidal

Una de los objetivos del capitán loíno es que, una vez retirado del fútbol activo, irá a Europa a perfeccionarse, a conocer realidades de clubes de primer orden. Y allí, juega un papel muy importante su ex compañero y amigo, Arturo Vidal.

"Me dijo que cuando yo quiera ir, dependiendo del club donde él esté jugando, me va a recibir allá. Incluso me ofreció un jeep porque tiene hasta un chofer a disposición para que yo me mueva, por ejemplo, desde Münich a otras ciudades para ver como trabajan allá", confidencia.

Uds son muy cercanos y eso se vio en la concentración de la selección en Calama, donde Arturo Vidal hasta publicó una foto de ambos juntos...

Sí, no me había querido referir al tema porque respeto mucho la intimidad de mis ex compañeros que están en la selección. Pero fue un encuentro muy bueno, especial. Y con Arturo -Vidal- claro, nosotros concentrábamos juntos en Colo Colo, somos amigos de años. Así que conversamos mucho, me contó de su mamá, de cómo estaba su familia, sus niños, habló con mis hijos por teléfono que lo querían saludar...

¿Llegó bajoneado a Calama? ¿Por lo del supuesto problema en un casino o por el autogol con Paraguay?

Él es muy sensible con esos temas y sí, estaba un poco sentido porque siente que siempre le están buscando algo. Arturo podría no venir a la selección porque en Bayern le piden que no venga. Pero él siempre siente la necesidad de estar. Por eso, le dije que se centrara en lo que siempre hace, que es el mejor jugador del mundo en su puesto y que no tiene que darle explicaciones a nadie.

¿Se va a retirar de la selección?

Todos nos vamos a retirar en algún momento de donde jugamos. Pero siento que lo dijo porque estaba sentido, él es un guerrero. Le queda mucho por entregar, jugó un mundial lesionado y fue igual, quiere revanchas siempre. Va a dar la pelea en estas últimas dos fechas porque él y el resto del equipo saben que mientras tengan opciones para clasificar, la pelea hay que darla.

¿Ves a Vidal como un futuro técnico también?

Le interesa mucho el tema, lo hablamos acá en Calama. Es más, a él y a los otros seleccionados les ofrecieron hacer el curso y varios están interesados. Creo que Arturo tiene potencial porque también es un organizador dentro de la cancha y es líder. Trabajar juntos sería increíble pero a él le queda más por jugar que a mí.

Mercado laboral

Sanhueza no se diferencia del discurso que prevalece en los entrenadores chilenos, eso respecto del poco mercado que hay para los profesionales forjados en suelo nacional. "A los que vienen de afuera muchas veces los esperan demasiado tiempo y esto es por resultados. A Chile llegan entrenadores que de repente no han demostrado que pueden dirigir acá y le quitan opciones a otros que llevan años trabajando bien. Por ejemplo, cuando llegó Larcamón -Nicolás- a Antofagasta, pensé que ese lugar debieron dárselo a otro como Héctor Tapia o Jorge Pellicer. Pero él se ganó su puesto con resultados. Otros nunca rindieron y los esperaron igual".

¿Hay pocas opciones de trabajo?

Lo que pasa es que por año, el INAF saca 20 entrenadores nuevos en Santiago y 15 salen en Concepción. Por más que algunos de mis compañeros son ex jugadores que sólo quieren tener el título para ejercer con una escuela de fútbol, es cierto que somos muchos para poco campo laboral. Pero la gente que sale del INAF sale muy bien preparada.

Todos los lunes desde hace tres años, primero desde Temuco cuando jugaba en el sur y ahora desde Calama, Arturo Sanhueza llegaba puntualmente a la sala de clases de la Universidad Federico Santa María de Hualpén para comenzar una larga jornada académico-práctica. Su objetivo, el que se concretará en noviembre próximo, cuando junto a la sub 19 de Cobreloa y bajo la supervisión de César Bravo realice sus 72 horas de práctica profesional. Después de eso, titularse como entrenador de fútbol.