El complejo penitenciario junto con el nuevo hospital, comprenden una inversión cercana a los $200 mil millones y reafirma el compromiso de nuestro gobierno con Calama.
"Ojalá que nunca se llene…", fue el comentario cuando nos informamos del nuevo Complejo Penitenciario para Calama, porque el recinto tendrá capacidad para 1.000 internos.
Megaproyecto que contempla residencia para los gendarmes y un Centro de Educación y Trabajo para los internos. El edificio reunirá las condiciones para el cumplimiento de las penas y ulterior reinserción social de los internos.
Lo trascendental es que la nueva cárcel para Calama, pondrá punto final al cuadro de hacinamiento que hoy aflige a la población de internos y borrará de una vez esa triste postal que hoy vemos allí en calle Granaderos, con familias esperando largas horas para visitar a los suyos.
El terreno de 285 hectáreas, dista 31 kilómetros de Calama -camino a Tuina- y lo importante es que el proyecto ya cuenta con su RS (recomendación favorable) por el Ministerio de Desarrollo Social.
El complejo penitenciario junto con el nuevo hospital, comprenden una inversión cercana a los $200 mil millones y reafirma el compromiso de nuestro gobierno con Calama.
En cuanto al hospital de avenida Balmaceda, entrará en funcionamiento en noviembre y sé que la comunidad está atenta a su apertura. En una visita a las instalaciones, se me acercaron unas vecinas de la población O'Higgins, contentas porque el establecimiento contará con unidad de diálisis.
Estamos a días de la apertura de este moderno hospital, dotado para responder efectivamente a las necesidades de las familias, en términos de infraestructura y calidad profesional de la atención médica.
En tal sentido tenemos señales saludables porque el equipo de cirugía del hospital "Carlos Cisternas" fue primero en el país, por cumplir con las metas de listas de espera quirúrgicas, respondiendo de esta manera al compromiso presidencial.
Nuevo hospital y nueva cárcel para Calama. Dos sentidos anhelos de larga data por la comunidad loína que encuentran eco en esta administración de la Presidenta Bachelet, pero sobretodo, reivindican la dignidad de las personas.
Eduardo Ochoa Navea,
Gobernador de El Loa