Comité organizador niega arreglos en el sorteo del Mundial de Rusia
DUDAS. El jefe del comité organizador dijo no dudar de la transparencia.
El presidente del comité organizador del Mundial de Rusia 2018, Alexéi Sorokin, negó ayer posibles artimañas en el sorteo del evento que se celebró el viernes en el Palacio del Kremlin.
"Todo el mundo vio cómo se celebraba el sorteo y quién lo organizó. Yo no tengo duda alguna sobre la absoluta transparencia del procedimiento", dijo Sorokin a la agencia Interfax. Sorokin tildó de "leyendas" los comentarios sobre la existencia de "bolas calientes" que ayudarían a la FIFA a manipular el sorteo.
"Todo esto se comprueba y se vuelve a comprobar. Hace mucho tiempo que nadie lo hace, si es que alguna vez se hizo. Son cuentos", subrayó.
El directivo destacó que "las bolas se guardaron en una habitación especial y el estatus de las personas que participaron hablan por sí mismo de su absoluta honestidad".
La "suerte" de rusia
Sorokin subrayó que la "buena fortuna" es la única explicación para que al país anfitrión le tocara, además de Uruguay, dos de los equipos más débiles del torneo: Arabia Saudita y Egipto.
El Grupo A, que encabezaba Rusia como cabeza de serie, ha sido considerado unánimemente el menos fuerte de todos por la prensa internacional. El sorteo del viernes fue presidido por el Presidente ruso, Vladimir Putin, y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y contó como maestro de ceremonias con el ex futbolista inglés y actual presentador de televisión Gary Lineker.
El Mundial arrancará el 14 de junio del próximo año con el partido entre las selecciones de Rusia y Arabia Saudita -encabezada por el ex técnico de Chile, Juan Antonio Pizzi- en el Estadio Luzhniki, donde se disputará también la final.
El secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, inició ayer una visita a Brasil para discutir asuntos de seguridad global y de grandes eventos deportivos. Brasil fue el anfitrión del Mundial de Fútbol en 2014 y Río de Janeiro fue sede de los Juegos Olímpicos, por lo que "la experiencia acumulada" por Brasil "puede ser de un gran valor para Rusia", indicó Pátrushev.