17 de diciembre
No te restes, súmate, para seguir creando las condiciones para construir juntos un país con más justicia social.
En el reciente acto de entrega de 140 viviendas para familias de Antofagasta, conversé con una mujer de unos cuarenta años sobre sus sueños para Chile, luego de invitarla a participar el 17 de diciembre en las elecciones presidenciales, en el marco de la campaña No te Restes, Súmate.
Me señaló que quería un país con igualdad de oportunidades, no en el que todos fuesen iguales, porque hay diferencias, pero sí uno donde sus hijos pudiesen llegar lejos, aunque a ella, como jefa de hogar, le faltaren los recursos para llegar a fin de mes. Un país que la acompañe en sus emprendimientos, por qué no poder transformar su venta de almuerzos en un negocio establecido y así "…poder contratar a vecinos y amigos".
Me dijo que no era justo que si alguien de la familia se enferma, hay que hacer bingos para juntar las "…lucas para el tratamiento". Que si uno se queda sin trabajo, "…la cosa se viene difícil".
Estaba feliz con su nuevo departamento, después de años de arrendar y de permanecer fiel a su comité durante 8 años. "…al final, valió la pena tanto esfuerzo y volver a confiar", terminó diciendo.
Confiar, tanto esfuerzo, me quedaron resonando sus palabras. Tal vez allí, en esa mezcla, esté lo mejor del futuro de Chile.
Gabriela Mistral nos decía que así como Brasil era el cuerno de la abundancia, Chile era la voluntad de ser, esa de tantos que habitan nuestra tierra y que cada día se levantan temprano y acuestan tarde para sostener con su trabajo a sus familias y, con ello, contribuir al desarrollo de nuestro país. Esa voluntad de ser que da cuenta del esfuerzo individual, de la inteligencia para hacer cundir el presupuesto familiar, de los emprendimientos de nuestras Pymes.
Pero ese tesón no puede quedar solo, no puede hacer frente, por sí mismo, a todas las contingencias de la vida como la enfermedad, la pérdida del trabajo, la educación de los hijos. Esa fuerza de voluntad traducida en emprendimientos también requiere de apoyos, de competencia justa, de relaciones laborales equilibradas. Ese tesón, esa voluntad de ser, requiere de justicia social para una efectiva igualdad de oportunidades.
Víctor Flores Dañobeitía,
Seremi de Gobierno