Fue una tarde para el olvido y los jugadores lo saben. La dura e inesperada derrota minera en el Francisco Sánchez Rumoroso dolió más por la forma que por los números. Cobreloa fue un equipo sin chispa ni reacción tras la apertura de la cuenta y en el plantel naranja eligen asumir el tropiezo por sobre buscar excusas.
Uno de los que más sintió la caída ante Coquimbo Unido fue el zaguero Cristián Oviedo. "Claro que afecta, porque hasta lo hablamos. Estábamos muy bien antes del primer gol de ellos, bien posicionados, cómodos, incluso, en comparación al partido con Arica y nos marcan y no nos podemos sacar ese gol".
El debutante en el torneo insiste en que "el equipo incluso mostró más que en el partido pasado, se corrió más, se mejoró, se jugó sin miedo, me atrevería a decir. Pero nuevamente nos perdemos goles cuando tuvimos para matar al rival y si perdonas en esta división, después te puedes quedar con las manos vacías, como nos tocó".
Pablo Parra tampoco estaba muy feliz con el resultado del último fin de semana. "No es primera vez que nos pasa y ya parece cuento repetido. Empezamos bien, tenemos opciones, las perdemos como una que me quedó a mí y después de eso, como que nos caemos. Sin duda que es un tema de confianza y nos está pasando la cuenta seguido. No queda más que dar vuelta la página y ponernos a pensar positivo para ganar el próximo partido en casa".
Capitán
Arturo Sanhueza no busca excusas. "Jugamos bien de entrada, nos hacen un gol y nos caemos. Como que todavía no aprendemos esa lección de cómo jugar en esta categoría. Es lamentable, porque ya se está haciendo costumbre perder jugando fuera de casa y si queremos conseguir el objetivo, no basta con ganar todos los partidos en casa. Somos Cobreloa y tenemos que tener la jerarquía para sacar puntos en todos lados", dijo el mediocampista loíno.
El capitán del equipo sostiene que "se trató de cambiar la suerte en el segundo tiempo. Siento que mejoramos cuando pusimos más gente arriba, pero con el segundo gol de Coquimbo, nos desdibujamos y eso no puede seguir pasando. Uno entiende la molestia de los hinchas, pero acá no hay que apuntar sólo al técnico. Los que jugamos somos nosotros y es injusto que todas las críticas recaigan en una sola persona".
Y sobre el tema psicológico, Sanhueza no duda. "Todos nos damos cuenta de ese bajón psicológico y no nos puede seguir pasando. No puede ser que con Arica, donde un equipo puso más ganas o ahora, con Coquimbo, donde el rival corrió mejor que nosotros en la cancha, terminamos viéndonos tan mal. Hay que buscar un equilibrio entre lo que hacemos en casa y lo mal que nos vimos jugando fuera".
Cobreloa tendrá dos semanas para preparar el próximo partido ante Deportes Valdivia en Calama, pactado para el próximo 18 de marzo. Un duelo donde el técnico Rodrigo Pérez contará con dos delanteros más: Diego Alvarado y Leandro Reymúndez.
Vivió un partido extraño en Coquimbo. Sentado en la banca de suplentes, sin haber entrenado con sus compañeros y jugando contra el equipo que defendía hasta el año pasado, el delantero uruguayo Leandro Reymúndez saboreó la última derrota desde adentro.
"Sí, fue una situación especial, pero ya me concentro en lo que viene, que es poder jugar con mis compañeros, debutar lo más pronto posible y ayudar al objetivo que tenemos, que es subir a fin de año", declaró el charrúa.
baja más se confirma para el duelo entre Cobreloa y Valdivia. Michael Contreras no llega a ese partido. 1
meses sin ganar de visita completó Cobreloa. La última vez fue ante Cobresal, el 8 de octubre de 2017. 5