Pablo Orellana G.

Expectación existía en torno al inicio del nuevo juicio oral contra Eliut Martel Claudio, el único imputado de dar muerte a Deiny Torres y la hija de ambos, la pequeña Claudia Martel Torres. Ante todo porque el autor de las muertes renunció a su derecho de guardar silencio y compartir su versión de los hechos y de la relación que mantenía con las víctimas.

De entrada, el fiscal del caso, Marcelo Bravo, explicaba el contexto de las muertes y entregaba a los magistrados del Tribunal Oral en lo Penal un escalofriante dato en el inicio de las audiencias al precisar que el imputado "tomó dos cuchillos desde la panadería en que trabajaba, y los trasladó al domicilio que compartía con su expareja y su hija".

Luego y haciendo uso de su derecho a comparecer Martel Claudio dijo "nunca agredí o maltraté psicológicamente a ninguna de las dos. De eso pueden dar fe sus familiares", dijo.

Una VOZ

En sus intervenciones y respuestas al fiscal Marcelo Bravo como a los jueces, Martel Claudio aseguró que, "no recuerdo bien la noción del tiempo. No tenía idea de qué día era por ejemplo. Y el día de las muertes sólo recuerdo que cumplí con ir a trabajar y (el tono de ) una voz y sólo después supe lo que había hecho", dijo en relación a las muertes que perpetró la madrugada del miércoles 27 de julio del 2016.

Eliut Martel también detalló que su vida con su expareja tuvo altos y bajos y que esta estuvo marcada "por las constantes infidelidades que Deiny cometía. De hecho su estadía en Calama era en un comienzo muy breve pues ella quería terminar la relación por tercera vez, pero su paso por la ciudad se extendió más de la cuenta y en ese tiempo nunca hubo maltratos", aseguró a los magistrados.

En sus intervenciones, Martel Claudio detalló por ejemplo que fue él quien trajo a las víctimas a Calama "para verlas, compartir con ellas y disfrutarlas, pero la relación con Deiny no iba bien por momentos, y las infidelidades eran la causa de nuestros problemas como pareja", agregó.

Estrategia

Parte de los argumentos expuestos por el imputado son la base de la estrategia de la Defensa, "porque Eliut Martel no era y no es un enajenado, sólo sufrió un estado crepuscular que nuestra perito explicará y detallará como parte de las pruebas que expondremos para explicar que al momento de efectuar las muertes él no se encontraba bien y mantenía alterados algunos sentidos, como el del tiempo, y que la profesional explicará", dijo el abogado Pablo Verdejo.

Martel agregó que "sólo me enteré que Claudia era mi hija biológica sólo en este proceso legal. Yo pensaba que padre es el que cría y no sólo el que engendra, pero las infidelidades de Deiny, a pesar de todo, nunca fueron problema para cuidar de la pequeña", dijo como parte de su defensa.

Las pruebas, testimonios y peritajes efectuados continuarán siendo analizados y expuestos al Tribunal Oral en lo Penal de Calama, y como parte de este nuevo proceso que busca determinar si Eliut Martel actuó en plenitud mental o ataviado por supuestas enajenaciones que lo llevaron a perpetrar las muertes.

Un motorista de Carabineros sufrió la fractura de su pie izquierdo luego que intentara efectuar un control a una camioneta que evadió la fiscalización.

El hecho se produjo cuando el efectivo policial se desplazaba por avenida La Paz, advirtiendo que un conductor hacía lo mismo a bordo de una camioneta la que no tenía sus placas patentes por lo que procedió a efectuar una fiscalización y un control preventivo.

Pero el procedimiento del policía no tuvo buena respuesta por parte del conductor, quien no quiso colaborar con el efectivo en motocicleta y tomó una acción evasiva, la que por poco termina con la vida del motorista quien debido esquivarlo para no ser impactado, desestabilizándose y cayendo a un costado de la vía, justo frente al cementerio Topáter.

El afectado en tanto debió ser trasladado de urgencia al hospital del Cobre, donde se le diagnosticó la fractura de su pie izquierdo tras evadir el impacto con el vehículo mayor, el que por poco lo hubiera arrollado de no ser por la maniobra evasiva que logró efectuar.

Controles

Carabineros en tanto, continuará y reforzará sus controles vehiculares no sólo en ese sector de ingreso y salida hacia la comuna de San Pedro, sino que en otros puntos de la ciudad y que son monitoreados minuto a minuto a través de un software que detalla cada fiscalización efectuada por los equipos desplegados en sectores donde se presume hay tráfico de móviles robados y cuyo fenómeno es constante en la comuna y la región.

En este último sentido la institución ha insistido en alertar a la población a tomar medidas de cautela y cuidado con vehículos como camionetas y jeeps de uso industrial, debido a que son el principal objetivo de organizaciones criminales que buscan retirarlas del país con destino a Bolivia.

Se informó además que el funcionario afectado se encuentra recuperándose de la lesión sufrida y que tras recibir los cuidados y atención médica no presenta otro tipo de heridas atribuidas al hecho que por suerte le pudo costar la vida al intentar aplicar un control preventivo al conductor sospechoso.

Una mujer de 23 años fue sorprendida por Carabineros cuando intentaba quitarle una bicicleta a un abuelito de 90 años que se encontraba en la plaza Héroes de La Concepción, cerca de las 11 horas.

De forma flagrante los efectivos vieron cómo la joven intentaba arrebatarle la bicicleta al longevo hombre que se encontraba sentado en el concurrido espacio público de avenidas Granaderos.

Al efectuar el procedimiento, Carabineros constató que al momento de su intervención la mujer ya le había sustraído un par de lentes de sol, los que escondía entre sus ropas.

Tras ser detenida, los efectivos comprobaron que mantenía antecedentes policiales previos.

Llamó la atención de los efectivos a cargo del procedimiento que pese a ser un punto de bastante afluencia, al estar los Servicios Públicos en el sector, no hubiesen personas que prestaran colaboración al abuelito, quien por suerte encontró el apoyo de Carabineros que efectuaban un patrullaje por el lugar donde se efectuaba el ilícito.

Una mujer de 24 años, que se dirigía hasta su trabajo, fue interceptada por un desconocido que intentó quitarle su cartera iniciando un tenso forcejeo para quedarse con el accesorio.

El hecho se registró en calle Oriente y cuando la víctima intentaba tomar hacia la avenida Balmaceda, en ese punto fue abordada por el antisocial quien sin aviso ni advertencia se le abalanzó sobre para quitarle su cartera.

Ante la resistencia de la víctima apareció en escena otro desconocido, los que juntos aprovecharon su superioridad numérica y comenzaron a darle duros golpes de puño en su rostro y tórax, para luego arrebatar el accesorio a la joven de 24 años.

La joven debió concurrir hasta la Primera Comisaría para efectuar la denuncia, pero debido al cuadro de estrés y el miedo provocado por los antisociales, no pudo recordar descripciones físicas de los agresores ni otros datos que aportaran para la identificación de los violentos asaltantes que se aprovecharon de su mayor fuerza física y del factor sorpresa para atacarla y quitarle parte de las pertenencias que portaba al momento de ser interceptada.