Pablo Orellana G.

Polémica generó la detención del concejal José Astudillo (RN), al interior de un concurrido supermercado local, por parte del personal del recinto, pues éste habría traspasado la línea de cajas sin pagar una serie de productos, hecho que fue advertido por los guardias.

El hecho se registró la tarde del domingo, cuando José Astudillo concurrió a efectuar compras "como todos los domingo, tengo una rutina en la que concurro a la radio y luego concurro a comprar mercadería a ese supermercado, del cual soy cliente habitual, y el único que tiene carritos scooter, el que uso porque soy autovalente, y al llegar a la caja la muchacha de empaque sacó toda la mercadería, salvo una bolsa reciclable que no fue vista por la muchacha. Incluso, pasé la tarjeta y la clave para el pago total, pero eso no ocurrió", manifestó el concejal tras su salida del Tribunal de Garantía.

Detención

Al continuar con su relato, el edil explicó que tras el pago, "fue un guardia quien se acercó, pidió ver las cosas y me consultó si estaba todo pagado. Yo mostré la boleta, y para mi sorpresa, las cosas de la bolsa reciclable no estaban canceladas. Es ahí donde se produjo el problema e incluso, pese a mi intención de explicar y pagar los productos, no se me permitió esa posibilidad", manifestó el concejal.

Debido a esto, José Astudillo debió permanecer bajo custodia de Carabineros, y ayer fue trasladado hasta el Tribunal de Garantía, donde enfrentó el control de detención bajo el cargo de hurto simple.

"Dentro de las medidas ofrecidas en torno a este proceso descarté un acuerdo con el fiscal, así también la firma, puesto que en ambos casos estaría aceptando algún grado de responsabilidad. Por ende, acepté ir a juicio, para con ello comprobar el mal entendido", agregó Astudillo.

En este caso, el Tribunal de Garantía decretó 40 días para la investigación del ilícito, además de la prohibición absoluta de acercarse al supermercado mientras dure la misma, medidas que José Astudillo deberá cumplir mientras este proceso legal se desarrolle y que deberán ser verificadas por las autoridades pertinentes.

Astudillo precisó que "nunca estuvo en mí el retirar cosas sin previo pago, por lo que no quise aceptar las medidas ofrecidas por el juez, porque no tengo antecedentes y porque tampoco era mi intención retirarme sin pagar", reclamó el edil calameño.

M ás de 576 millones de pesos en cocaína escondía el automóvil de un comerciante de Alto Hospicio, quien pretendía llegar con la droga hasta Calama. El cargamento ilícito fue detectado por el Servicio Nacional de Aduanas en la avanzada de Quillagua, gracias al uso de perfiles de riesgo y tecnología no invasiva.

A través de un escaneo del camión de Rayos X de Aduanas, se estableció que el vehículo tenía su estructura modificada y con el apoyo de un can detector se determinó el lugar exacto donde estaba el poderoso alcaloide. Tras lo anterior, los aduaneros desarmaron el auto y hallaron 29 paquetes de color negro, los cuales en su interior contenían un total de 28 kilos 800 gramos de clorhidrato de cocaína.

Dennys Beltrand Santos, director del Servicio de Aduanas de Iquique, explicó que el procedimiento responde al rol de protección de las fronteras y de la ciudadanía que se realiza para evitar todo tipo de contrabando. "En este caso, el comerciante viajaba junto a su familia y un amigo. Al momento de controlar el pasavante del automóvil, se detectaron algunas inconsistencias en su relato y se derivó el vehículo a un proceso de revisión con tecnología no invasiva".

Una vez detectado el ilícito, el comerciante E.E.G.M., de 27 años de edad, pidió disculpas a su familia y amigo, puesto que ellos no sabían de sus planes. Asimismo, se notificó de la situación al fiscal de turno y el imputado junto a la droga y los medios de prueba fueron entregados a la policía. El control de detención se realizó en el Juzgado de Pozo Almonte y el fiscal Hardy Torres López relató los hechos e imputó a E.E.G.M. el delito de tráfico de drogas en calidad de autor y grado de consumado.

El comerciante quedó en prisión preventiva por los 120 días de la investigación.

Un taxista que esperaba clientela a la salida de una conocida discoteque de avenida La Paz sufrió una brutal paliza en instantes que se trenzó en una discusión con una pareja de hermanos que salía del recinto de entretención nocturna.

Aunque los motivos de dicha agresión aún no están claros, el taxista fue embestido por los enajenados hermanos, quienes lo golpearon con tal violencia, que le fracturaron seis costillas y le provocaron lesiones en su rostro, las cuales fueron diagnosticadas por el equipo médico de turno que lo atendió como graves.

Fue la intervención de Carabineros la que detuvo el ataque al transportista, justo cuando efectivos policiales efectuaban una fiscalización al recinto de entretención nocturna, el cual impidió que los agresores continuaran con el brutal castigo.

Debido a las lesiones causadas en la golpiza, el afectado debió ser trasladado hasta Antofagasta para recibir atención especializada y que lo estabilizara, producto de las heridas que presentaba al ser atendido en la urgencia del hospital.

Los agresores, en tanto, fueron arrestados por Carabineros por su responsabilidad en este violento hecho, luego de ser individualizados por personal de seguridad que los identificó previo a su detención por parte de la policía uniformada a cargo del operativo.

De acuerdo a la versión de algunos testigos del hecho, las agresiones se produjeron en instantes en que el taxista ofrecía sus servicios de traslado a quienes se retiraban del emplazamiento, cuando los dos agresores lo increparon tras una suerte de contacto físico -un topón- que habría molestado a los hermanos, quienes presentaban un evidente estado de ebriedad, condición que los habría exaltado y que los motivó a golpear al taxista con fuerza y brutalidad.