Aprovechando las energías renovables
Cuando hoy se discuten medidas para reducir la contaminación, es necesario mirar a las energías limpias. Los recursos en la región están disponibles además para poder potenciar la generación de energía eléctrica para vehículos y sumarnos así a los planes de descontaminación.
Nuestro país se ha sumado a diversos compromisos internacionales para contribuir en la reducción de gases de dióxido de carbono y poder frenar el cambio climático que está alterando el comportamiento de la naturaleza.
En la realidad nacional, están los desafíos de terminar con la generación de energía con petcoke o a petróleo, reducir la emanación de gases de los vehículos de transporte y terminar con fuentes contaminantes como estufas a leñas y otras.
Creemos que la única manera de poder dar pasos con mayor efectividad es seguir construyendo una matriz energética con energías renovables no convencionales, como la geotermia, solar y eólica.
Esos tres sistemas hoy en día están en operaciones en nuestra región y con varios proyectos que esperan sus aprobaciones para instalarse en la zona.
Es una oportunidad que no podemos perder y que debemos que aprovechar, considerando las grandes extensiones de terreno que tenemos en la zona, y que las condiciones climáticas son óptimas para el desarrollo de este tipo de energía.
Es más, la calefacción, el uso de agua caliente y la electricidad, debieran generarse en nuestros domicilios con este tipo de energía y prescindir del gas u otros combustibles fósiles.
Las faenas mineras de la zona necesitan una gran cantidad de energía permanente, pero todavía estamos lejos que todas ellas puedan producir dependiendo exclusivamente de estas energías.
De allí, la importancia de ir poniendo fin a aquellos sistemas de generación que provocan un gran impacto en el entorno, como ocurre con varias hidroeléctricas, y buscar energías alternativas.
Con las energías renovables no tendríamos inconvenientes en restringir o bajar los consumos, lo que nos permitiría además ser más productivos pero bajo normas ambientales que no pondrían en riesgo nuestro futuro.
Además se abren importantes opciones para poder generar la suficiente energía limpia, para poder exportarla a otros países del cono sur.