El auge astronómico en la provincia de El Loa tomará fuerzas, luego que el próximo año comience a funcionar en el llano de Chajnantor el telescopio infrarrojo ubicado a mayor altura en el mundo. En el mismo sector ya funcionan 64 radiotelescopios que forman parte del proyecto Alma, y que monitorean los cielos de este complejo universo.
Los cielos limpios de nuestra zona, durante gran parte del año, convierten a El Loa en uno de los principales lugares de observación astronómica del mundo.
Al mismo tiempo, algunas empresas turísticas están incursionando en visitas nocturnas para poder admirar estrellas y galaxias que se iluminan en el espacio con algunos equipos ópticos.
Esto abre una gran oportunidad para poder generar pequeños centros astronómicos que puedan atraer a la comunidad a esta ciencia, que en los últimos años ha dado pasos agigantados para descubrir los orígenes y cómo se comportan los cuerpos celestes en el espacio.
El Observatorio Tokyo Atacama (TA0, en su sigla en inglés) buscará clarificar la formación de las galaxias y los planetas desde 5.640 metros de altura con un lente de 6,5 metros de diámetro.
Y para poder preparar guías turísticos en estos temas, se están planificando cursos que permitan capacitarlos para que puedan entregar información precisa y especializada en este tema.
Las entidades universitarias y organizaciones astronómicas instaladas en el norte, debieran adicionar otros equipos en observatorios menores, con el fin de encantar a los jóvenes en esta ciencia y adentrar a la comunidad en estos temas que causan mucha curiosidad y atracción.
El sector turístico debiera también involucrarse en estos nuevos proyectos que permitirán adicionar un nuevo atractivo a la zona, que ya reúne una gran oferta para quienes visitan la provincia.
El Loa es un sector privilegiado para poder observar el universo y no podemos desaprovechar esta oportunidad.