Hace una semana que el nuevo Hospital "Carlos Cisternas" fue inaugurado con una gran satisfacción para las autoridades y la comunidad, que ya visualiza un ostensible cambio producto de la mayor dotación, modernos equipamientos y un edificio de cientos de metros construidos que permitirá mayores comodidades y atención de un mayor número de pacientes.
Hasta ahí todo bien, porque las proyecciones son positivas, pero es necesario poder dotarlo del personal suficiente para cumplir satisfactoriamente los servicios planificados.
Y para ello hay que continuar con la contratación del personal requerido, de lo contrario de nada servirá contar con un edificio de tremenda envergadura.
De allí que el Gobierno está planificando la llegada de profesionales de Venezuela, lo que permitiría completar el staff que debe contratarse el próximo año. Esto debido a la falta de interés de profesionales chilenos por asentarse en Calama.
Mientras tanto, poco a poco se ha completado la planta de facultativos que se han requerido para dar inicio al nuevo hospital, y es necesario continuar con este proceso.
Al respecto, se debe precisar que hace poco el gobierno regional ha realizado un convenio con el Hospital Clínico de la Universidad de Antofagasta para poder afrontar el déficit de facultativos a nivel regional.
Otra de las situaciones que también se discute es respecto a las exigencias que tienen los profesionales extranjeros para ejercer en el país con el fin de buscar las acciones para que puedan ejercer su especialidad cumpliendo con los reglamentos establecidos pero sin trabas.
Aquí el problema no es si son chilenos o venezolanos, sino que el nuevo hospital pueda contar con los profesionales que se requiere y que lleguen en el tiempo oportuno para satisfacer la demanda de salud que existe actualmente en la ciudad, sin que tengan que recurrir hasta Antofagasta para poder ser atendidos.