Fue cuando la encargada de la sede social llegó al recinto, que se percató que delincuente habían ingresado presuntamente durante la noche.

Se trataba de un recinto ubicado en el poniente de la ciudad, el que fue atacado por los delincuente.

En el interior del lugar se dieron tiempo para buscar artículos de valor. Fue así que se llevaron algunas sillas e incluso dos sacos de entrenamiento.

En el lugar se realizan actividades deportivas, donde se utilizan este tipo de artículo en cada clase.

La sede no cuenta con mayor seguridad, por lo que no fue difícil para los ladrones ingresar para llevarse el botín en especies.

Los vecinos del sector no observaron movimiento irregulares o ruidos inusuales durante la noche que los alertara del robo concretado en el centro social.

Redacción

El robo de cobre se ha transformado en un delito recurrente en la zona norte del país. Bandas especializadas que se dedican a la sustracción de mineral, especialmente atacando a los trenes que transportan como parte de su carga este metal rojo.

Personal especializado de la Brigada de Robos de la PDI Calama, se encontraban realizando diligencias propias de su especialidad, cuando fueron alertados de un nuevo ataque a un maquinista.

Pese a estar fuera de su jurisdicción, debido a la cercanía con que se encontraban, no dudaron en ir a prestar colaboración.

Lo anterior sumado a que se podía tratar de los mismos delincuentes a los que le vienen siguiendo los pasos hace un tiempo.

Ataque

Según los antecedentes de carácter preliminar que se manejan sobre lo ocurrido, los hechos se registraron alrededor de las nueve de la mañana.

En ese momento, el convoy que trasladaba cobre desde una conocida minera de la zona hasta el Puerto de Antofagasta, fue interceptado por un grupo de al menos cuatro sujetos que actuaban encapuchados, lo anterior a fin de evitar ser reconocidos.

Según explicaron las víctimas al personal de la BIRO de la PDI, Calama, los antisociales utilizaban una camioneta para su desplazamiento.

Con esto además consiguieron acercarse hasta el sector donde se encontraba el maquinista, a quien intimidaron con lo que parecía a simple vista, ser un arma de fuego.

En ese momento y apuntándolo en todo momento, exigían al trabajador detener la marcha del tren, esto a fin de sustraer la carga que en ese momento trasladaba.

Los sujetos se dieron el tiempo además de utilizar una camioneta sin placa patente, a fin de evitar luego su ubicación. La víctima hizo caso omiso a las exigencias de los asaltante, pese a estar siendo intimidado con el arma de fuego.

No detuvo su marcha y muy por el contrario, decidió acelerar la velocidad para impedir que se concretar el robo de su carga.

El personal de la BIRO se encontraba realizando labores de carácter investigativo en el sector, por lo que decidieron concurrir de forma inmediata a la altura del kilómetro 38, específicamente la estación Poblete, lo anterior a fin de verificar en terreno la denuncia recibida.

Se realizaron diversos patrullajes por el sector intentando ubicar a los responsables de este nuevo robo, sin embargo fue imposible concretar su ubicación.

El hecho será investigado intentando su vinculación con el resto de los episodios de estas características.

Salió de su hogar en dirección a su lugar de trabajo, cuando fue víctima de un violento robo.

Fue la experiencia que vivió un hombre de 40 años que afirma haber sido abordados por al menos dos desconocidos cuando iba a trabajar.

Hechos que se registraron en la intersección de avenida Grecia con Javiera Carrera, en el sector sur de la ciudad.

Eran pasadas las siete de la mañana y transitaba en solitario por el sector, cuando afirma haber sido abordado por al menos dos desconocidos.

Afirma que se trataba de ciudadanos extranjeros por el acento con que hablaban.

No se percató en un comienzo que se acercaban a él de manera sospechosa, hasta que de forma sorpresiva fue atacado a golpes.

Lo lanzaron al suelo y una vez reducido, comenzaron a registrar sus vestimentas buscando especies de valor o dinero que pudiera mantener en su poder.

Le arrebataron su mochilas con su equipo de trabajo al interior, una billetera y según explicó, alrededor de 300 mil pesos en dinero en efectivo.

Cuando los hombres vieron concretado su objetivo, decidieron retirarse del lugar en dirección desconocida, todo con el botín que ya mantenían en su poder.

Cuando al afectado vio recuperada su tranquilidad, solicitó ayuda a personal de Carabineros.

Los efectivos acogieron el procedimiento y realizaron un recorrido por el sector para ir en busca de los presuntos responsables.

Pese a los esfuerzos realizados, la falta de información sobre los antisociales dificultaron la labor que realizaron finalmente de manera infructuosa.

Entre todas las especies que lograron sustraerle en medio de este violento robo, se llevaron cerca de 800 mil pesos. La víctima resultó con lesiones leves tras los golpes que recibió en medio del robo.