Katherine Jofré S.
Más de 100 familias fueron desalojadas desde el terreno tomado ilegalmente entre las calles Frei Bonn con Alonso de Ercilla, desde el 2013. Estas serían las que finalmente quedaron después del incendio de 2018. Hasta ayer había un 70% de avance en la desocupación y antes de mañana ya debería quedar este sector sin moradores.
En cuanto salió el sol, se comenzó a evidenciar como avanzaron las maquinarias. Lo que no se llevó el fuego en el 2018, esta semana lo arrasaron las retroexcavadoras. Las autoridades indicaron que aproximadamente queda un 30% de viviendas de material ligero en pie. Hoy se concretaría la remoción total, ya que pasivamente las autoridades están esperando que las familias saquen sus cosas personales.
Plazos
"Tenemos un plazo de tres días para terminar la remoción, ya que nosotros como municipalidad permutamos este terreno al Serviu, ellos van a hacer el cierre perimetral y dentro de ese trabajo tendremos que remover miles de toneladas de escombros, lo que se hará en estos próximos días", explicó el alcalde de Calama, Daniel Agusto.
"Ha sido un arduo trabajo, donde muchas personas han venido a colaborar. Hasta el viernes (mañana) trabajaremos para desocupar este espacio, la gente esta saliendo, sacando sus cosas y nosotros estamos respetando eso, ya que ellos saben que tienen que salir", agregó la gobernadora de la Provincia El Loa, María Bernarda Jopia.
Se estima que al momento más de 100 personas están trabajando en el lugar, limpiando, removiendo y colaborando con las familias para que saquen sus cosas de la forma más rápida posible.
Desocupación
Según lo informado las cuadrillas tienen plazo hasta mañana despejar el terreno de las improvisadas viviendas, para luego con los camiones llevarse las toneladas de escombros que han estado agrupando para que sea más fácil su retiro.
Las autoridades comentan que ha sido un proceso rápido. "Velozmente el terreno comienza a desocuparse y en medio ingresan camiones o autos, que son cargados con cosas de las familias que estaban instaladas ahí", comenta uno de los trabajadores que realizan la limpieza.
Desalojados
Una de las desalojadas, era Margarita, quien no quiso dar más antecedentes de lo que vivía.
Ayer permaneció sentada en medio de los escombros y cubierta de una nube de tierra.
"Nos sacaron sin avisarnos, sabíamos que podía pasar, pero lo hicieron de madrugada. Estamos llevándonos lo que podemos, porque finalmente no sabemos donde iremos. Pasamos la noche en la intemperie, ojalá el alcalde pueda dormir con lo que nos hizo, los que más han sufrido son los niños", explicó la mujer de origen boliviano.
Al ser consultada si sabía qué era una toma ilegal y si estaba con sus documentos al día, no quiso seguir contestando.
Objetivo
"Necesitábamos recuperar este espacio por temas de seguridad, hay muchos que no tenían nada que hacer acá, había muchos que estaban en condiciones ilegales y frente a la presencia policial incluso no quisieron asumir sus controles. Aquí hay dos tipos de almas, aquellos que de plano estaban metidos en tema de delincuencia y los otros que necesitan una oportunidad, con estos últimos vamos a trabajar. Con esas personas se ha tenido mucha consideración, por eso destaco el respeto con el que ha actuado personal de carabineros", agregó el alcalde.
El gobierno provincial maneja que aproximadamente pudieron desalojar más de cien familias estos días, ya que hay una gran cantidad de gente que se fue con el incendio del 2018 y otro grupo, aceptó la salida del barrio transitorio y se fueron voluntariamente desde el inicio del mes de julio.
"Debo valorar a aquellos que accedieron y logramos entendernos, ellos aceptaron las distintas opciones que tiene el gobierno para que en el futuro puedan tener su casa propia. Hay familias que están arrendando un terreno, mientras esperan el barrio transitorio y hay otras que simplemente nunca nos quisieron entender", señaló Jopia.
Familias
La duda que tenían muchos calameños, es qué iba a ocurrir con esas familias que no se sumaron a los comités de viviendas que se formaron. Las autoridades habilitaron el polideportivo para hacer preguntas, donde los niños pueden acceder a una colación y la gente puede preguntar por su situación.
"Estamos buscando que las familias busquen redes de apoyo para que ellos puedan relocalizarse y buscar otra instalación para vivir. Hemos tenido buen efecto con eso, lo que significa que gente que había en la toma tienen grupos familiares, residencias donde irse o posibilidades de arriendo", explicó Tamara Aguilera, directora de la Dideco.
Se pensó que habría familias con alta vulnerabilidad social y para ellas se destinó un sector del cual no darán mayor información, para albergar a quién lo necesite.
"Eran 73 familias chilenas catastradas viviendo en la toma después del siniestro, el resto serían extranjeros, los que tendrán que regularizar su situación, tanto para poder acceder a trabajo y así optar a arrendar un espacio. Las soluciones son para quienes cumplan con requisitos y obviamente quienes estén con alta vulnerabilidad, estamos abiertos a aportar ayuda, pero hasta el momento no nos ha llegado nadie", agregó la directora de la Dideco.
Hoy continuará la demolición de las viviendas que quedan en pie. Luego de esto el Serviu se hará cargo de cerrar el perímetro y además sanitizar las más de 70 fosas existentes.
"Hay familias que están arrendando un terreno, mientras esperan el barrio transitorio y hay otras que simplemente nunca nos quisieron entender"
María Bernarda Jopia, Gobernadora Provincial
"Quienes estén con alta vulnerabilidad, estamos abiertos a aportar ayuda, pero hasta el momento no nos ha llegado nadie"
Tamara Aguilera, Directora Dideco
100 personas en terreno
Son cerca de 50 trabajadores los que están dedicados únicamente a la función de botar y remover las viviendas que estaban en este terreno.
Existe otra porción de gente, entre profesionales, asistentes, que están destinados a verificar en terreno la situación de la gente, si necesitan información y para guiarlos para que saquen sus cosas
En total son más de 100 personas las que trabajarán hasta mañana en este sector para dejar despejado todo el terreno.