Bolivia: torturan a una alcaldesa y el Gobierno advierte violenta escalada
CHOQUES. Tras la crisis originada en las sospechas de fraude electoral, ayer el líder opositor Luis Fernando Camacho llegó a La Paz para entregar carta de renuncia a Evo Morales. Gobierno dice que no dimitirá. Un joven es el tercer fallecido en hechos violentos.
La noche del miércoles en La Paz fue una de las más violentas en las últimas semanas. Tanto en la capital boliviana como en el vecino municipio de El Alto se registraron hasta la madrugada de ayer fuertes choques entre defensores y contrarios al presidente Evo Morales, en una nueva jornada de disturbios ante la crisis por la que atraviesa el país tras las elecciones.
Esta vez los disturbios se produjeron entre grupos de universitarios que exigen la renuncia del presidente, al que acusan de fraude a su favor en los comicios del 20 de octubre, y mineros que defienden la victoria de Morales para un cuarto mandato.
Una fuerte lluvia contribuyó a dispersar a los grupos de violentos, pero ayer el ministro de Defensa de Bolivia, Javier Zavaleta, atribuyó "la escalada de violencia en el país" a un llamado del líder cívico Luis Fernando Camacho, que horas antes había llegado a La Paz con intención de entregar una carta a Evo Morales para que firme su renuncia.
Zavaleta culpó al líder del Comité Pro Santa Cruz de instigar a "grupos de choque organizados, que están viniendo a provocar", y lo invitó a que "haga un llamado a pacificar y repliegue a estos grupos". "Estamos a un paso de contar los muertos por docenas", agregó.
Alcaldesa humillada
Una de las situaciones más complejas la vivió la alcaldesa de la localidad de Vinto, Patricia Arce Guzmán, del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS).
La autoridad comunal fue sacada con violencia del municipio, que después fue saqueado e incendiado, y los manifestantes la arrastraron descalza, por cinco kilómetros, hasta el puente de Huaykuli, mientras la grababan con celulares. En ese lugar fue humillada, la insultaron y la torturaron, dijo poco después a la prensa y a la policía.
También le cortaron el pelo, la hicieron arrodillarse, le gritaron "asesina" y la bañaron con pintura roja. Después de una hora, la volvieron a liberar.
Otra víctima fatal
En nueve de las diez ciudades más importantes de Bolivia la ola de violencia ha ido creciendo. En Cochabamba se produjo la noche del miércoles la tercera muerte desde que se iniciaron las manifestaciones. Se trata de Limbert Guzmán, un estudiante de 20 años.
"Expreso mi profundo pesar por el fallecimiento del joven Limbert Guzmán, víctima inocente de la violencia promovida por grupos políticos que alientan el odio racial entre hermanos bolivianos", expresó Morales a través de su cuenta de Twitter.
De los 170 heridos que se han reportado en las últimas semanas, al menos 60 se produjeron esa misma noche.
"¿por qué renunciar?"
Después de asegurar que el líder opositor Luis Fernando Camacho podrá entregarle a Evo Morales una carta en la que le pide renunciar, el Gobierno boliviano descartó que el presidente vaya a renunciar antes de concluir su actual mandato. "¿Por qué tendríamos que renunciar, si acabamos de ganar las elecciones?", sostuvo el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera.
"El presidente Evo y su vicepresidente hemos sido elegidos para gobernar del 22 de enero de 2015 al 22 de enero de 2020. Es nuestra gestión, lo dice la Constitución, lo dice el voto popular", señaló.
García Linera apuntó a Mesa y a Camacho por los enfrentamientos entre detractores y afines a Morales ocurridos en la víspera en Cochabamba, donde mataron a Limbert Guzmán, y llamó a la oposición a dejar la violencia.
A quienes humillaron a la alcaldesa Arce los llamó además "fascistas" y aseguró que el miércoles fue el "día de la vergüenza" por estos sucesos.
Otra víctima fatal
Las protestas en Bolivia estallaron la misma noche de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de octubre por la suspensión repentina de la transmisión de los resultados oficiales justo cuando obligaban a una segunda vuelta entre Morales y el candidato opositor Carlos Mesa.
Cuando se retomó, casi 24 horas después, concedían la victoria en primera vuelta a Morales. Ambos candidatos llamaron a la movilización de los suyos, lo que ha derivado en disturbios. En este contexto, Morales ha accedido a que la OEA, apoyada por países como España, México o Perú, realice una auditoría electoral de carácter vinculante. Mesa, en cambio, no la acepta porque dice que es fruto de un acuerdo unilateral entre el Gobierno y el bloque hemisférico.
"Hay tiempo para repetir la elección"
El opositor y candidato a la Presidencia de Bolivia, Carlos Mesa, asegura que hay tiempo "más que suficiente" para repetir los comicios del pasado 20 de octubre y ha señalado que el país vive una "situación inmanejable" con las violentas manifestaciones en las calles. Mesa ha rechazado en reiteradas ocasiones los resultados oficiales que le dan la victoria al presidente Evo Morales en primera vuelta. "Son un fraude gigantesco", dijo a CNN.
3 personas han fallecido desde que estalló la crisis. Mientras, la OEA audita las elecciones presidenciales.