Baja de pasajeros afecta a locomoción colectiva mayor y menor de Calama
REALIDAD. Frecuencia de tránsito de micros ha disminuido a menos de la mitad, mientras que colectiveros aseguran que sólo generan un 10% de los traslados habituales.
El COVID-19 no sólo ha mermado las ventas del comercio local -las que han caído según el gremio en un 90 por ciento-, la locomoción pública de Calama también ha comenzado a sentir los estragos y las medidas preventivas ha comenzado generar mermas aún no cuantificadas por el gremio del transporte.
"Hemos comenzado a sentir los efectos negativos de esta pandemia, puesto que hemos debido regular el tránsito de micros y ello nos ha llevado a disminuir a menos de la mitad las máquinas en circulación por Calama. Ha sido una medida impopular, pero que debimos acatar, por prevención para nuestros conductores como para los usuarios", dijo Juan Carlos Villarroel, presidente del Sindicato 177 de micros, el más grande de la ciudad.
Agregó que "pese a los ajustes que hemos hecho estamos muy complicados porque nuestros asociados deben trabajar para ganar su cuota diaria, para el día a día, pero en este escenario es sumamente complejo. Aun cuando hemos sanitizado máquinas, nuestros espacios comunes en la garita, y con la obligación de efectuar el lavado de manos de forma permanente. Pese a ello es complejo porque la gente no está en la calle, menos utilizando el sistema público de transporte.
Colectivos
El impacto ha sido igual de negativo para el gremio del transporte público menor. "Hoy sólo tenemos una flota equivalente al 20 por ciento total de la que la ciudad tiene para los usuarios. El tema es complejo, porque si ya es negativo para el dueño de un vehículo, el efecto es nefasto para quien le trabaja al propietario de un colectivo", explicó Fidel Vergara, presidente de la Asociación Gremial de Taxiscolectivos.
"Pese a que se han tomado las medidas de sanitizar cada vehículo, de entregar elementos de prevención del virus a los conductores, la comunidad no está utilizando el servicio habitual de líneas de colectivos. Y lo peor es que no sabemos si esto va empeorar aún más. La declaración de una cuarentena, de un aislamiento social total para Calama sería aún peor para nuestro gremio y el de la locomoción pública mayor", agregó Fidel Vergara.
En el caso de los colectiveros, el gremio ya está impulsando otros servicios para poder mitigar "en algo esta crisis. Una de estas es ofrecer servicios de compra a la comunidad. Para que ésta no salga, o lo haga lo menos posible, y para ello habilitaremos un sistema de compras y reparto de supermercados y ferias. De igual forma el traslado personalizado de pasajeros, así evitar los contagios por acercamiento dentro de un colectivo, o que deban esperar en puntos donde se puedan exponer al contagio", agregó el presidente de los colectiveros de la comuna.