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ENTREVISTA. Leonel Rodríguez, jefe de operación social de Hogar de Cristo::

"El 90% de la gente en calle

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Colaboración

La pandemia del COVID-19 ha dejado expuesto a uno de los grupos más vulnerables frente a la enfermedad: las personas sin techo. El gobierno ya los considera "población de riesgo", un verdadero avance que se suma al anuncio de adelantar el Plan Invierno, con rutas médicas, y que se duplicará el número de albergues. Alentador, tomando en cuenta que en Calama hay más de 300 personas en calle.

Para el jefe de operación social de Hogar de Cristo, Leonel Rodríguez, "el 96% de las personas en situación de calle no provienen de Calama, han llegado atraídos por la promesa del bienestar minero, pero eso es sólo un espejismo. En la ciudad el costo de la vida es carísimo, entonces terminan más solos, sin redes de apoyo, sin familia, sin nadie que los reciba para pasar la pandemia".

De los 211 casos positivos en la región, se confirmó que hay 21 personas contagiadas de coronavirus en Calama.

Vulnerables

Cuando el sistema de salud colapsa, las personas más vulnerables y que tienen más dificultad de acceso, como son la gente de calle y los adultos mayores, son quienes tienen menos atención de la que habitualmente padecen durante el año. "Los precios de los remedios se han elevado… recién tuve una reunión con Guillermo Alvarado, director de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco), quien nos está entregando apoyo para enviar los remedios a las casas de los adultos mayores, muchos postrados y con enfermedades crónicas. Es indiscutible que solos no pueden conseguirlos, están realmente solos".

Expone que existe un número importante de adultos mayores, que además de vivir en situación de pobreza, sufren de enfermedades crónicas. "Un grupo importante tiene diabetes, otros enfermedades respiratorias o hipertensión arterial. Otro problema es que para activar todos los beneficios que se están ofreciendo se necesita internet, pero la mayoría no tiene acceso a estas herramientas. Entonces sucede que los beneficios les están llegando por goteo", asegura el sociólogo.

Según la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2017, Antofagasta es una región donde viven 30 mil personas en contextos de pobreza, y son estos grupos los que tienen el mayor riesgo de contraer el COVID-19. En la ciudad de Calama, el Hogar de Cristo acoge a cerca de 100 personas en sus programas para adulto mayor, personas en situación de calle y educación inicial, y con todos ellos se han tomado las máximas medidas de seguridad posibles.

Prevención

"Desde el 2 de abril, hemos declarado en cuarentena preventiva a nuestra hospedería, para evitar que sus usuarios se contagien al entrar y salir de ella. No es una medida fácil. Es una medida drástica pero necesaria, dada la alta capacidad de propagación del coronavirus, más en una población de alto riesgo como la ya descrita. El problema es que nuestra causa tiene capacidad para acoger a 35 personas, ¿qué pasará con las otras 265 personas que quedarán dando vueltas sin destino por la región?".

-¿Qué medidas están tomando al respecto?

-En Calama no existen más centros de acogida, es una realidad dramática. Ahora estamos realizando rutas calle, que consisten en ir al encuentro de aquellos que no tienen dónde pasar su cuarentena, les llevamos alimentación, artículos de higiene, agua, abrigo e información, pero esto no es suficiente.

Además, puntualiza que la esperanza de vida en personas que viven en condición de extrema pobreza tiene una diferencia de 10 años con el resto de la población. "En Calama hay más personas jóvenes en situación de calle, pero nosotros siempre decimos que una persona que tiene 50 o 55 años, se trata de un adulto mayor, por el deterioro que produce la calle, esto es un fenómeno muy característico de Calama", asegura.

-¿Cómo se explica esto en una ciudad con altos ingresos?

- Calama es una ciudad de contrastes, por un lado es la segunda ciudad que más riqueza le entrega al país, pero, por otro, no tenemos universidades, no existe desarrollo académico, nada. ¡Hasta hace un año no teníamos hospital y había que viajar 6 horas para poder atenderse…! En el fondo, aún vivimos bajo el espejismo de la industria minera, donde los sueldos son bastante altos, pero la pobreza es más alta aún; es paradójico.

-¿Cómo es eso posible?

-Después de trabajar 9 años en la hospedería del Hogar de Cristo en Calama, descubrí un patrón que se repetía constantemente. Resulta que la mayoría de las personas en situación de calle, han trabajado anteriormente en la minería. Creo que esta constante se podría explicar desde la perspectiva del desarraigo social que producen los turnos de trabajo (los sistemas 20x10, 7x7, 15x10) en la industria minera, que terminan destruyendo la afectividad de los trabajadores, eso genera que una persona que hace 6 meses estaba ganado un sueldo de 800 mil pesos, ahora esté viviendo en la calle.

De acuerdo al Segundo Catastro de Personas en Situación de Calle, un 37% de ellos indica como causante de su situación los problemas familiares. "Producto del desarraigo emocional terminan adoptando conductas adaptativas como el consumo de alcohol y pasta base, eso es lo otro que también ofrece Calama: prostitución, narcotráfico, hacinamiento, un caldo de cultivo que genera más pobreza", sostiene el sociólogo.

-¿Quién está haciendo algo al respecto?

-En estos tiempos es importante destacar el trabajo de quienes lo dejan todo por otras personas, verdaderos héroes. No me refiero a los doctores o las enfermeras, que tienen bien ganado el título, hablo de los trabajadores de la hospedería. Su trabajo es bien cuestionado, inclusive por las familias. Muchos consideran un absurdo que alguien siga trabajando en el Hogar de Cristo, exponiéndose frente a personas que "se van a morir igual" por el alcohol, la droga o el coronavirus, no he visto que a ellos los aplaudan, son más bien cuestionados.

-¿Qué los mueve en la pandemia?

-Más que la institución, más que el sueldo, más que el reconocimiento, a los trabajadores del Hogar de Cristo, los mueve el vínculo con los más pobres, no son extraños para ellos, también son su familia.


no tiene dónde pasar la cuarentena"