El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, informó ayer que Carabineros determinó la baja de los dos uniformados investigados por presuntamente haber disparado contra manifestantes en la comuna de La Florida la noche del lunes.
"De acuerdo a lo informado por Carabineros, esos funcionarios se encontraban conduciendo un vehículo que no portaba adecuadamente su placa patente y se encontraban bajo la influencia del alcohol, por lo que se dio inició a un procedimiento interno, lo que derivó en su baja de la institución", señaló Galli y agregó que el Gobierno presentó una querella por homicidio frustrado por este hecho, la cual quedará en manos de la Fiscalía Metropolitana Oriente.
El fiscal jefe de Flagrancia Oriente, Omar Mérida, dio a conocer nuevos antecedentes de la indagatoria que preside, la cual calificó como una "investigación compleja", reconociendo que "tiene la dificultad de hacer coincidir las pruebas que se encontraron en el sitio del suceso, que son particularmente de carácter balístico, con armas que han sido revisadas en este período investigativo de 12 horas".
Carabineros confirmó también la información a través de un comunicado, donde indican que se determinó cursar la baja respectiva de ambos funcionarios involucrados y afirman que no tolerarán "situaciones fuera de norma, protocolo o al margen de la ley".
Diez heridos
La situación se dio el lunes en la intersección de calles Vicuña Mackenna con Trinidad, cuando un grupo de personas protestaba supuestamente contra el aniversario de la institución.
Hasta ese lugar habrían llegado en un vehículo sin patente trasera los excarabineros, quienes habrían realizado los disparos contra la manifestación, hiriendo a 10 personas, para luego huir.
Sin embargo, tal como detalló el jefe de la Zona Metropolitana Este de Carabineros, general Enrique Bassaletti, personal de la SIP de la 36 Comisaría de La Florida, escucharon los disparos e iniciaron el seguimiento de los involucrados.
Ambos exfuncionarios se encuentran en libertad a la espera del término de las pericias que realiza el Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones (PDI), que compara los casquillos recuperados tanto en el lugar de los hechos como de un vehículo utilizado por los imputados, más las balas extraídas a los heridos y un arma particular incautada a los excarabineros.