Índice de ocupación de camas críticas es una de las principales debilidades del Carlos Cisternas
SALUD. El médico y presidente temporal de la Coordinadora de Profesionales de la Salud de Calama, Juan Carrillo, dijo que durante gran parte de 2019 el 95% de las camas del hospital estuvieron ocupadas, lo que está lejos del estándar de la OCDE.
La emergencia sanitaria a consecuencia de la propagación del COVID-19 que hasta ayer registraba 881 casos confirmados en Calama, mantiene a prueba al Hospital Carlos Cisternas, que a menos de dos años de su inauguración como centro de alta complejidad, debe lidiar con una pandemia que a la fecha le ha costado la vida a 28 personas en la comuna.
Recinto médico que aún estaba en una fase de preparación cuando sobrevino el coronavirus y que desde antes presentaba una baja disponibilidad camas críticas, según detalló el presidente temporal de la Coordinadora de Profesionales de la Salud de Calama, Juan Carrillo, quien además es médico de la Unidad Respiratoria del HCC.
Cerca del 100%
Sobre este último punto, el profesional precisó que "el Hospital Carlos Cisternas, con las 202 camas que teníamos hasta entes de la pandemia, tenía un índice de ocupación de camas muy por sobre el estándar, que establece que la adecuada debiera ser entre 80 y 85% y en las unidades de hospitalización de adultos hemos tenido ocupaciones de cama, durante todo 2019, por sobre el 95%".
En este sentido, Carrillo dijo que es necesario readecuar el recinto a la población que atiende, trabajo que está pendiente y que requiere de la participación de epidemiólogos, planificadores y profesionales de la gestión, entre otros, aunque también recalcó que el HCC "estaba en eso, pero lamentablemente nos pilló la pandemia".
Cuál es el riesgo
Respecto del riesgo de tener un porcentaje cerca del 100%, el médico explicó que "estar sobre 85% de índice de ocupación de camas significa que ante cualquier aumento en el requerimiento, por la influenza estacional o algún accidente grave que involucre a muchas personas que requieren hospitalización; no vas a tener camas disponibles a menos que adelantes el egreso de los hospitalizados y cuando haces eso corres el riesgo de no completar los procesos adecuadamente y los pacientes que diste de alta de manera precoz, podrían reingresar".
Hay un límite
Consultado el doctor Francisco Muñoz, quien es el referente COVID-19 del hospital de Calama, sobre cuál es la situación de la dotación de camas, ahora en un escenario de pandemia, dijo que "hemos ido aperturando y complejizando camas, además de las estrategias que estamos desarrollando en el apoyo en red. De igual forma señalar que con los nuevos ventiladores podremos tener más camas críticas, pero igual debemos ser claros en que todo tiene un límite".
Asimismo, respecto de si hay equipos o dispositivos que aún deban implementarse o comprarse, aclaró que "se están incorporando naricearas de alto flujo para poder hacer ventilación en pacientes en prono, además de los ventiladores que están llegando. Además, hemos incorporado una central de monitorización en la unidad de COVID-19 y con ello estamos con equipamiento completo".
Personal capacitado
Carrillo, acerca de la falta de profesionales de la salud, especificó que el hospital requieren, principalmente, especialistas en enfermedades respiratorias, enfermedades del sueño y en el área neuropsiquiátrica, pues "Calama tiene una gran carga de enfermedades respiratorias y de enfermedades mentales, principalmente depresión y trastornos del neurodesarrollo y todos los técnicos que trabajan en torno a estas áreas. También necesitamos contar con una unidad de oncología, pero más que eso, contar con una unidad de oncología integrada en un programa de manejo del cáncer".
Muñoz, por su parte, dijo que recinto "cuenta con especialistas, un importante número que viene de Venezuela. Aunque a nivel de servicio público siempre hay una necesidad mayor de funcionarios. Respecto a especialista de pacientes críticos hemos trabajado en reasignar funciones de médicos generales, anestesistas y extranjeros, además de preparar a nuestro personal de enfermería como medida de contingencia".
En relación a si hay déficit de personal paramédico, el doctor precisó que "hemos tenido una brecha importante ya que a nivel país hay un déficit en preparación de este personal. De igual forma hemos contratado personal de apoyo, a pesar que su demanda ha sido alta en todos los hospitales y clínicas", dijo, y agregó que "como medida se está evaluando en contratar a estudiantes de enfermería que estén en último año".
202 camas contaba el área crítica del Hospital Carlos Cisternas hasta antes de la pandemia por el COVID-19.
2019 el porcentaje de ocupación de las camas fue cercano a un 95%, de acuerdo al médico Juan Carrillo.