Constitución
Nadie le pasaría una locomotora a un niño, ni dejaría que el gato diseñe la jaula del canario, pero somos capaces de entregar la redacción de la constitución a un grupo de ciudadanos que solo deben tener más de 18 años y no haber sido condenado a pena aflictiva. Ni siquiera deben saber leer y escribir, pero sí sabrán definir el destino de la nación? Raro ¿no? ¿En qué cabeza cabe que para redactar una constitución no se requiera al menos de una profesión y una extensísima experiencia ligada a los distintos temas que abordará el nuevo instrumento legal?
El solo tener 18 años y no haber sido condenado (hay un delincuente que ha sido detenido 119 veces y, aparentemente, no ha sido condenado a pena aflictiva alguna) no es garantía de la sabiduría y objetividad necesarias para elaborar disposiciones que regirán la vida de los 20 millones de ciudadanos que, probablemente, seremos cuando se apruebe(¿?) la nueva constitución. ¿Y por qué la paridad de género?, ¿Es que no podrían haber más de 77 hombres o mujeres mejor calificados para la Convención Constitucional? ¿Y por qué asegurar eventuales cupos para los pueblos originarios? ¿Es que no son ciudadanos como nosotros? ¿Por qué discriminar? Que los pueblos originarios, con 1,6 millones de potenciales electores, elijan sus candidatos, voten por ellos e intégrense, de una buena vez, al resto de la sociedad. Es lo justo, ¿no?
Por otra parte, escuchaba que algunos opinaban que con este plebiscito se acabaría la violencia porque no habrían motivos para ella.
Por favor, no pequemos de ingenuidad y díganle eso a la familia del Carabinero, cabo segundo Eugenio Naín Caniumil, asesinado en la Araucanía o a aquel señor que, cuando salió a celebrar el triunfo del apruebo, le asaltaron su farmacia por séptima vez y además le robaron el auto. Sí, al igual que Condorito: ¡Exijo una explicación!
Rafael Mella Hernández
Borde costero
Por el vuestro Diario me he impuesto de lo hermoso que está quedando el borde costero y nuevo balneario de La Chimba, junto a la ayuda del sector privado, creo , que nunca se lo hubiese pensado la señora Ilabaca, concesionaria del sector, para descarga de explosivos en lanchones, los antofagastinos, me comprenderán, sobretodo mi amigo, periodista, profesor e historiador Jaime Nelson Alvarado, (Carajo). Y, qué pasa con el sector Sur, quien sin visión de futuro, entregó malas concesiones en el borde costero, hoy, son una calamidad, EL GRIEGO VIEJO y Cabañas Municipales, hoy, en completo abandono, perjudicando la vista a nuestro Océano Pacífico. Será posible que algún organismo haga una limpieza general y saquen los restos de murallas y otros que todavía quedan, es de esperar que no sigan entregando concesiones bajo la carretera y dentro de los 80 metros de la alta marea. Por qué no avanzar con la segunda vía hasta MEL/COLOSO, sería un gran aporte al turismo de nuestra región.
Miguel Bascuñán Sfeir
Carabineros
Otro mártir en Carabineros. Los matinales no hablarán de su asesinato, los diputados ni senadores no acusarán constitucionalmente a ningún ministro, ningún artista del jet set nacional escribirá encendidos tuit condenando su muerte. ¿Dónde está la famosa igualdad entonces? Hay chilenos de una clase provistos solo de derechos sin ninguna obligación ni reproches, todo se les perdonará todo se les justificará y habrá otros chilenos sin derecho a nada ni tan siquiera a la vida. Chile al revés.
Anne Müller
Estados Unidos
Hace tan solo un par de días, The New York Times publicó un video titulado How America Helped Stop Covid-19. Just Not in the U.S.
En este se revisa cómo las estrategias de prevención, simulación y acción contra el coronavirus en Tailandia y Corea del Sur, reconocidas internacionalmente, tuvieron como referente los protocolos y el financiamiento de iniciativas estadounidenses, un indiscutible líder mundial en materia de salud pública.
La conclusión es trágica y categórica: Estados Unidos no tuvo un liderazgo político a la altura del desafío sanitario, a pesar de poseer la infraestructura, los especialistas y las capacidades para poder controlar la pandemia. Los datos a simple vista lo confirman: el número de muertos en Tailandia por covid-19 es a la fecha 59; en Corea, 464, y en el gigante norteamericano, más de 230.000 y en ascenso.
Qué duda cabe. La polarizada elección presidencial de hoy realmente determinará el aumento o la disminución de muertes de ciudadanos estadounidenses. El mundo entero está expectante.
Camilo Barría-Rodríguez