Familia del pequeño Gonzalito recibirá una millonaria indemnización
DEFINITIVO. La Corte Suprema rechazó el recurso de casación interpuesto por el Servicio de Salud de Antofagasta y deberá pagar más de 700 millones de pesos.
El caso del pequeño calameño Gonzalo Calderón, fue ampliamente conocido por la comunidad loína, que desde el principio quedó impresionada por la condición de parálisis que quedó el menor tras errores en una atención médica en el año 2014.
Desde ese momento su madre Sandra Guarda y una de sus hijas iniciaron un proceso judicial en busca de justicia, la que ya es conocida luego de cumplir con todos los procesos judiciales.
El Servicio de Salud de Antofagasta había sido condenado a pagar una suma un poco superior a los 700 millones de pesos a la familia del menor por los daños y perjuicios ocasionados. Sentencia que fue recurrida de casación ante la Corte Suprema.
Finalmente el máximo tribunal rechazó el recurso y mantuvo los montos que deben cancelarse a los familiares.
En la sentencia (causa rol 59.715-2020), la Tercera Sala del máximo tribunal descartó infracción en el fallo que estableció la falta de servicio del hospital Carlos Cisternas de Calama al provocar la encefalopatía hipóxico-isquémica que dejó al menor con un 100% de discapacidad física e intelectual.
Por consiguiente, al Servicio de Salud de Antofagasta deberá pagar indemnización total de $701.796.941 a la familia de menor de entonces cinco años que terminó con parálisis total por la mala administración de anestesia durante un procedimiento dental.
Alegría y tristeza
La madre de Gonzalo, Sandra Guarda, reconoció que recibió la noticia con alegría, pero también con un dejo de tristeza.
"Alegría, porque al final se hizo justicia con mi hijo y se comprobó que hubo una negligencia médica, que hubo un error que le cambió la vida a mi hijito. Y que lo ocurrido no fue porque yo era cochina, sucia como me repitieron", dijo la progenitora.
Y la tristeza, también la embarga, porque pese al dinero que recibirán su hijo seguirá en fermo. "Todo el dinero del mundo no me devolverá a mi hijito".
Explicó que el dinero que llegará será para mejorar la calidad de vida de Gonzalo. Brindar las comodidades que necesita y consultar especialistas para que le realicen un buen diagnóstico y sepan que evolución se puede esperar.
"Lo primero será comprar una casita para mi hijo. Hoy vivimos en la casa de mi mamita, quien nos recibió con mucho cariño, pero no contamos con las condiciones para que tenga una buena calidad de vida. Necesitamos una casa en la que podamos contar con su dormitorio, con sus cosas y que los traslados sean más fáciles", explicó la acongojada madre.
También piensan comprarse un auto para tener mayor seguridad en los desplazamientos y no sufrir los desaires en las distintas locomociones.
Cree que tras tantas dificultades que han tenido que sortear es tiempo de que el pequeño Gonzalo reciba una mejor vida, porque se lo merece.
Junto con solucionar los aspectos materiales, Sandra Guarda, insistirá en nuevas consultas con los mejores especialistas. "Quiero que lo vuelvan a ver y que me digan si alguna vez podrá volver a hablar o caminar. Necesitamos saber eso para definir que tratamientos podrán venir más adelante".
Recuerdos
Sandra, aún recuerda que su pequeño Gonzalo, en 2014 y con cinco años se aprestaba a ingresar a primero básico al igual que una de sus primas. Y ella confiada lo llevó al control dental que terminó por dar un vuelco en 180 grados en su vida.
Ya no fue el mismo. Un niño alegre y feliz, "aunque debo reconocer que no ha perdido su alegría. El no se ve triste. Es muy alegre y contagia, pero yo sé todo lo que ha sufrido durante estos años".
Hoy tiene 12 años y desarrolla su vida junto a su madre y hermanos, quienes se encargan de entregar el cariño y las atenciones que necesita.
"Naty, Tiare y Diego están con él. Cada uno tiene sus tareas con Gonzalo y lo hacen con mucho cariño. Como familia hemos enfrentado su enfermedad y hemos vivido alegrías y tristezas, pero siempre estamos para él".
"Quiero que lo vuelvan a ver y que me digan si alguna vez podrá volver a hablar o caminar".
Sandra Guarda, Madre del pequeño Gonzalo, que quedó con parálisis por un error médico.