A través de un comunicado de prensa, los líderes de la comunidad indígena de Caspana, Germán González; de la junta de vecinos, Juan Anza; y de acción católica, Julio Colamar, informaron que a partir de este lunes 25 de enero, entrarán en cuarentena preventiva, suspendiendo todas las fiestas patronales y costumbristas que deberían de desarrollarse en el mes de febrero, con el objetivo de evitar los contagios por coronavirus en dicha localidad precordillerana.
Através de la firma del Decreto 265, efectuado por el Ejecutivo, este facultará a las Fuerzas Armadas a colaborar con materias de control y fiscalización en fronteras, principalmente en el norte de Chile y como lo son las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta.
Se trata de la modificación del Decreto 265 firmado por el Jefe de Estado en 2019, que permite el apoyo de las Fuerzas Armadas en el control de la frontera en materia de narcotráfico y crimen organizado y que, a partir de ahora, amplía su objeto y permite el control del ingreso ilegal por pasos no habilitados en las regiones del norte del país.
Una expresión del ingreso ilegal es el tráfico ilícito de migrantes y trata de personas, esto es, cuando terceros facilitan o promueven la entrada ilegal al país, con el ánimo de lucrar. Según cifras de la PDI, el número de imputados por este delito, aumentó en más de un 25 por ciento entre el 2019 y el 2020. Generalmente, esta clase de delitos implica que los migrantes son sometidos a condiciones inhumanas y ponen en riesgo sus vidas para ingresar ilegalmente al país.
De acuerdo a los datos entregados por la Policía Internacional de la PDI, en lo que va de este 2021 se han registrado 63 ingresos clandestinos por las fronteras de la provincia de El Loa, los que han sido detectados por la institución o bien se han autodenunciado -principalmente venezolanos-, quienes debieron efectuar ese trámite ante las autoridades migratorias de la región de Antofagasta.
El dspliegue de las Fuerzas Armadas en las fronteras de El Loa podría producirse una vez que la autoridad administrativa, el ministerio del Interior y Seguridad Pública, así lo estime y que oficie al alto mando de esta colaboración, y que sE sumaría a los esfuerzos para evitar la migración ilegal hacia territorio nacional, sobre todo por pasos no habilitados o con la ayuda de los llamados "coyotes".
La preocupación por el aumento de la movilidad de personas a los pueblos del Alto El Loa y la comuna de San Pedro de Atacama, genera que las mismas comunidades adopten medidas de autocuidado, como son la instalación de barreras y cordones sanitarios, como también cuarentenas preventivas con la finalidad de evitar contagios por coronavirus en tiempo de pandemia.
A este respecto, el director del Departamento Andino de la municipalidad de Calama, Arturo Bruna manifestó que están realizando un llamado a la comunidad a no visitar estas localidades ubicadas en el Alto El Loa. "Eso es lo principal, y como hemos visto las propias comunidades están haciendo cierre de los pueblos. Ellos mismos están instalando barreras, tal como Caspana que estableció cuarentena por algunos días, y también Ayquina tiene cerrado los pasos para que la gente no vaya, los pueblos más alejados, a excepción de Lasana y Chiu Chiu".
Luego agregó que "nosotros como Departamento Andino estamos coordinando con carabineros para que tengan mayores controles en las pasadas, en la carretera", como una de las principales medidas implementadas para evitar el constante aumento de movilidad de personas en dichas localidades precordilleranas.
Lamentablemente este tipo de acciones no resultan del toda efectivas: la presidenta de la comunidad de Lasana, Celia Pérez, planteó que durante el fin de semana llegaron personas que no cumplieron con los protocolos sanitarios establecidos en tiempos de pandemia. Todo esto a pesar de las señaléticas instaladas en diferentes puntos del poblado de prohibición de desplazamiento de manera libre en la búsqueda de evitar los contagios por coronavirus.
De igual forma la comunidad de Caspana determinó la entrada en cuarentena preventiva a partir del lunes 25 de enero por 10 días, con la opción de poder extender este período de ser necesario, y la suspensión de las festividades religiosas, patronales y costumbristas, que tendrían lugar durante el mes de febrero.
Todo esto con el objetivo de disminuir los riesgos ante eventuales contagios por Covid-19, a raíz del aumento considerable de nuevos casos registrados en la capital de la provincia El Loa.
Mientras que en la comuna de San Pedro de Atacama en Fase 3 de Preparación en el plan Paso a Paso, se continúa con los cordones sanitarios de acuerdo a lo explicado por el hasta ayer, presidente del consejo indígena de dicha localidad precordillerana, Sergio Cubillos, quien indicó que durante el fin de semana contaron con más de mil turistas que recorrieron la comunidad sampedrina.
Esta situación ha resultado tema de debate en el Concejo Municipal de San Pedro de Atacama, donde la concejala María Teresa Véliz, solicitó en su minuto una fiscalización más estricta a todos lo que lleguen al poblado, incluso con la petición del PCR, además de agendar reuniones de trabajo con las autoridades sanitarias regionales, y de enviar los antecedentes de la problemática que están enfrentando por la pandemia al ministro de la cartera.
Pero, la edil también reconoció la falta de recursos económicos para cumplir con algunas iniciativas destinadas a un mayor control de los visitantes a la comuna.
No debemos de olvidar que en el último tiempo han aumentado de manera exponencial los casos de personas diagnosticadas con coronavirus, donde la comunidad sampedrina tan solo cuenta con unidad de atención primaria de salud, debiendo trasladar a los pacientes más de cuidado al hospital Carlos Cisternas de Calama.
Todo esto a pesar de las restricciones establecidas con medidas sanitarias, como son el aislamiento social y también el cierre de algunos locales comerciales, tal como detalló la presidenta de la junta de vecinos de Socaire, Carmen Plaza, quien señaló que "nosotros mantenemos abierto los almacenes, y permanecen cerradas las cocinerías y restaurantes" para evitar los contagios en esta época de crisis sanitaria a nivel nacional.
Por su parte, Héctor Cruz dirigente de la localidad de Camar, sentencia que ellos no han tenido mayores inconvenientes, ya que mantienen los controles sanitarios y no permiten el libre acceso de personas ajenas a la comunidad.