Constanza Caldera Pfeiffer
La postergación de la maternidad y la disminución de nacimientos es una tendencia que también se observa con fuerza en la Región de Antofagasta. Así, al revisar las estadísticas publicadas por el DEIS del Ministerio de Salud, en la última década de los 10.016 alumbramientos registrados en el 2010, la mayoría de ellos se concentraban en mujeres menores de 30, siendo los 20 años el rango de edad con más partos (542), seguida de los 24 años (532) y 19 años con 528. En este año la edad promedio de la progenitora era de 26 años.
Una realidad muy distinta a la observada 10 años después, cuando de los 7.156 (2.860 menos que el 2010) nacimientos registrados el 2020, parte importante de ellos corresponden a mujeres que tienen cerca de los 30, siendo los 31 años la edad que alcanza el mayor número con 429, seguida de los 27 años con 428 y 28 años con 425. La edad promedio de las madres fue de 28 años.
En tanto, el 2020 los nacimientos de madres con 20 años fue de 255, un número mucho menor al registrado en igual edad el 2010 (542).
Tendencia
Pero este no es el único dato que llama la atención porque del total de nacimientos el año pasado, un 54,5% de ellos (3.903) corresponden a mujeres con educación media, seguida de 2.819 (39,3%) con estudios superiores y 318 (4,4%) con estudios básicos y primarios.
Una realidad muy diferente a la del 2010. Ese año de los 10.016 nacimientos, 6.257 corresponden a mujeres con educación media (62,4%); 2.774 con estudios superiores (27,6%) y 956 a básicos y primarios (9,5%).
La presidenta del Colegio de Matronas y Matrones de Antofagasta, Karina Díaz, cree que esta baja en el número de nacimientos como la postergación en la edad para ser madre responde a que existe más acceso a la información, las proyecciones profesionales que se tienen y que las mujeres se han empoderado en su rol.
"Antiguamente se creía que la función de las mujeres era procrear, que solo venía a eso. Y la verdad es que ahora muchas incluso han decidido no ser madres, que es absolutamente válido. Y también lo han retrasado porque existen más posibilidades de seguir estudiando, hay más puestos de trabajo para las mujeres que se han creado a lo largo del tiempo. Hay más ámbitos en los cuales poder desarrollarnos y creo que de alguna manera esto ha colaborado mucho en una planificación de una paternidad responsable", dijo.
Díaz agrega que la esperanza de vida se alargó, por lo tanto, eso también permite ir postergando la edad para ser madres. A eso se suma, indicó, que son pocas las mujeres con muchos hijos, pues la mayoría tiene entre uno o dos lo que también permite ser madre a una edad más avanzada.
María Fernanda Tapia (34) estudió administración de empresas y actualmente trabaja en una compañía ligada a la minería. Se casó hace cuatro años y comenta que no está en sus planes de ser madre, si bien no ha descartado del todo la posibilidad de tener hijos, cree que es muy probable que no los tenga.
"La verdad es que nunca me ha llamado la atención ser madre. Veo a algunas amigas con sus hijos y si bien los niños son hermosos, no es algo que me quite el sueño. No puedo cerrar del todo la opción todavía, pero no sé es algo que cada vez veo más lejano sobre todo ahora con lo difícil que está la vida con la pandemia", indicó.
Tapia agrega que en sus planes está seguir estudiando y perfeccionándose y que espera ansiosa que termine el covid para poder seguir viajando, ambos planes cree que son incompatibles con la posibilidad de ser madre.
Cynthia González (33) sí tiene hijos. Esta psicóloga tiene una hija de casi tres años y un niño de siete meses. En su caso, siempre quiso ser madre, pero reconoce que ya con dos es suficiente.
"Siempre me gustaron los niños. Tengo dos hermanas con harta diferencia de edad, con las que tuve siempre mucha afinidad. Ser madre ha sido lo más lindo que me ha pasado y mis hijos son lo más importante en mi vida, pero es difícil para las mujeres porque además de ser madre, tienes que ser trabajadora y esposa y responder en todos los ámbitos. Además el teletrabajo ha sido un desafío aun mayor", comentó.
Madres extranjeras
Otro de los datos que llaman la atención en las estadísticas publicadas por el Ministerio de Salud, es el número de nacimientos de madre extranjera. Una información que está disponible desde el 2014, año en que los hijos de mujeres de otros países era mínima de un 0,2% (21 nacimientos), cifra que aumentó a un 28,2% el 2018 cuando hubo 2.270 alumbramientos. Mientras que en el 2020, del total de nacimientos (7.156) un 25,4% fue de madre extranjera (1.816).
Así, del total de nacimientos registrados en los últimos 7 años (49.241) un 15,8% corresponde a madres de otros países (9.600).
"Antiguamente se creía que la función de las mujeres era procrear, que solo venía a eso. (...) ahora muchas incluso han decidido no ser madres, que es absolutamente válido".
Karina Díaz, Colegio de Matronas y Matrones