Una nueva jornada de incertidumbre se vivió ayer en la búsqueda del alpinista chileno Juan Pablo Mohr, el islandés John Snorri y el pakistaní Muhammad Ali Sadpara en la montaña el K2, la segunda cumbre más alta del mundo, en donde los tres deportistas perdieron la comunicación con el campamento base el pasado viernes.

"Nuevas búsquedas con helicóptero no dieron resultados", declaró ayer a la agencia AFP el secretario del club alpino de Pakistán, Karrar Haidri, quien reafirmó los temores respecto del futuro de Mohr, Snorri y Sadpara, al afirmar que los "helicópteros del Ejército pakistaní sobrevolaron sin resultado el K2 hasta una altura de 7.000 metros".

Según Chhang Dawa Sherpa, jefe de la expedición, un equipo de rescatistas partió a pie para dar con los deportistas como complemento a la búsqueda aérea.

"Desgraciadamente no tenemos ningún rastro", afirmó Sherpa, quien ya había dado luces del fracaso en las labores del ejército pakistaní en la madrugada del domingo.

El último que vio a mohr

Sajid Sadpara fue el último alpinista que tuvo contacto con el deportista nacional, Snorri y su padre, Muhammad, antes de perderles el rastro en el sector conocido como "cuello de botella", ya que tuvo que abandonar el ascenso para regresar al Campamento 3 (C3) debido a un problema con su regulador de oxígeno.

"En la noche del 5 de febrero iniciamos el ascenso a la cumbre del K2", contó Sajid, quien agregó que mientras el grupo subía hacia la cima, otros escaladores nepalíes y europeos descendían del C3, momento en el que sintió los efectos de la falta de oxígeno.

"Las posibilidades de que algún ser humano sobreviva durante dos o tres días a ocho mil metros, con la severidad del frío, son muy bajas", dijo Sadpara.

Desde que fue escalado por primera vez en 1954 el K2, situado en la cordillera del Karakórum, es una de las montañas más peligrosas del mundo y uno de los ascensos más difíciles de realizar, debido sobre todo a temperaturas que caen en invierno hasta los -50 grados, vientos de 200 km/h o el riesgo constante de avalanchas.

8.611 metros es la altura que

5 alcanza el K2, ubicado en la cordillera del Karakórum.

Una inesperada baja podría sumar en las próximas horas el Abierto de Australia, luego que ayer el español Rafael Nadal (2º ATP) reconociera que lo ha pasado mal en los últimos 15 días debido a fuertes dolores de espalda, que ponen en duda su participación en el primer Grand Slam de la temporada.

El español, de 34 años, no pudo disputar con su país la Copa ATP de la semana pasada en terreno oceánico (que ganó Rusia al vencer en la final a Italia) debido a estas molestias y a la fecha no ha disputado ningún partido de competición desde noviembre pasado, al margen de un encuentro de exhibición hace nueve días en Adelaida, ante el austriaco Dominic Thiem (3º ATP).

"No estoy muy bien desde luego", señaló ayer en Melbourne, refiriéndose a sus molestias en la espalda. "Es verdad que en los últimos 15 días lo he pasado mal", aclaró Nadal, que ayer entrenó en la pista central de Melbourne Park con su coach Francisco Roig.

Con todo, Nadal insistió en que su lesión "no es grave", aunque admitió que eso no le asegura que pueda estar presente esta noche (pasadas las 23:30 horas de Chile), en su partido de la primera ronda del torneo contra el serbio Laszlo Djere (56º ATP) .

"El músculo sigue estando tenso y eso hace difícil poder jugar con libertad de movimientos", explicó el zurdo, ganador de 20 Gran Slam, récord de la categoría masculina que comparte con Roger Federer.

"Hacemos todo lo posible. Mi fisioterapeuta está aquí, mis médicos, todo el mundo está ayudando de todas las maneras posibles. Espero estar listo, eso es todo. Sé que las cosas pueden cambiar muy deprisa", cerró el campeón del Australian Open en 2009.

Zlatan Ibrahimovic, autor de dos anotaciones en la goleada 4-0 del líder AC Milan ante el Crotone del chileno Luis Rojas (no ingresó), consiguió superar ayer la barrera de los 500 goles como futbolista profesional en los nueve equipos donde ha jugado entre Europa y Estados Unidos.

El goleador sueco, que en octubre cumplirá 40 años, abrió el marcador a la media hora del duelo de San Siro tras una combinación con el portugués Rafael Leao y amplió distancias, con su tanto número 501, a los 64' tras aprovechar un centro de Theo Hernández.

Con sus goles y un doblete de Ante Rebic en 120 segundos (69' y 70'), Ibrahimovic le devolvió el liderato de la Serie A al cuadro rossonero luego que el pasado viernes, el Inter de Alexis Sánchez y Arturo Vidal le superara momentáneamente en la cima del Calcio gracias a su triunfo 2-0 ante Fiorentina, y selló otro récord personal, con 501 goles en clubes, en una carrera que empezó en 1999.

Hasta la fecha, lleva 83 en el Milán, que se suman a los 18 que anotó por Malmö, 22 en Barcelona, 29 en Manchester United, 48 en Ajax, 66 en Inter de Milán, 156 con París Saint Germain, 26 en Juventus y 53 con Los Ángeles Galaxy.

A estos números se suman los 62 goles en 116 partidos jugados la selección de su país.

"Es un deportista que tiene grandísimas motivaciones, que cuida su cuerpo de manera perfecta en todo, en la alimentación, en la recuperación, en la prevención. Para seguir a estos niveles significa que tienes un cuerpo excepcional, apoyado por un físico que pocos tienen", comentó el DT milanista, Stefano Pioli, tras rubricarse el triunfo con el aporte de "Ibra".

"No hay un día donde no trabaje bien, en el que no hace su trabajo de fuerza. Nunca se salta nada. Sabe cuánto es importante estar bien. Si él lo está, con su calidad seguirá marcando la diferencia", agregó.

En su carrera, el sueco conquistó 31 trofeos, con 11 títulos de Liga levantados en Holanda, Italia, España y Francia. También ganó una Liga Europa con Manchester United y una Supercopa UEFA y un Mundial de clubes con el Barcelona.