Tiempo perdido
Con el fin de promover el retorno a clases presenciales en marzo, las autoridades han adelantado la fecha de vacunación Covid-19 para profesores en Chile para "recuperar el tiempo perdido y asegurarles a todos nuestros niños y jóvenes la educación de calidad que tanto necesitan y merecen".
Al respecto, es interesante preguntarnos ¿cuál es, en realidad, el tiempo perdido que debemos recuperar? Muchas escuelas y docentes hicieron esfuerzos por continuar con las clases en modalidad virtual y fue necesario que las familias y los propios docentes contaran con mejor conectividad, acceso a computadores y capacitaciones para mejorar el dominio de herramientas digitales, con inversión de su propio presupuesto. También hubo estudiantes con dificultades para dar continuidad a su educación con el formato a distancia, por no contar con las condiciones mínimas para conectarse desde sus hogares, dejando en evidencia la gran desigualdad de condiciones. ¿Por qué entonces el retorno a clases presenciales se considera la solución al problema? ¿Por qué no hubo iniciativas para mejorar la conectividad y acceso a tecnología de las familias rezagadas? ¿Por qué no hubo acompañamiento a los docentes para "mejorar" la calidad de la formación que ahora se cuestiona?, ¿Dónde están las mejoras en infraestructura para las escuelas que, tarde o temprano, volverán a recibir a sus estudiantes?
Un llamado a las autoridades: Sería más importante hablar del valioso tiempo perdido para la educación chilena impulsando los cambios que se necesitan para lograr una educación integral en vez de lanzar "frases para el bronce" tildando a los profesores de "flojos" mientras se pasean por los matinales.
Andrés López
Mar revuelto
Nuestro barco nacional navega en un mar revuelto y si recapitulamos por lo menos cuatro realidades coyunturales y notorias están afectando hoy a nuestro barco-país; una, un joven malabarista muere en incidente con carabineros; otra y por este hecho hubo protestas con incendios y destrucción en zona sur; tres, nuevos atentados con incendios y destrucción de maquinarias y bienes en zona de la Araucanía, por último cuatro, se presentó una llamada crisis humanitaria por presión de ingreso clandestino en zona norte del país todo lo cual genera preguntas fundamentales ¿habrá o quedará alguna autoridad que ponga el mínimo y suficiente orden en nuestro país?
Hasta aquí todo parece indicar que enfrentamos como nación una crisis directiva, institucional y administrativa muy preocupante.
José Manuel Caerols Silva
Independientes
Parece que los partidos políticos, no entendieron el mensaje que les entregó la ciudadanía el 25 de Octubre, casi un 80% no los quiere de nuevo manejando el país, solo un 2%, porcentaje familiar y de amigos más cercanos los apoya, pero lo que no tiene nombre es la burla hacia los candidatos independientes, quienes solo tendrán menos de un segundo para dar a conocer sus propuestas proyectos e ideas. Sí como lo lee, a tal punto es el descaro, que hasta un eterno expresidenciable, manifestó " Congreso hizo trampas, arrastró los pies, hizo todo lo posible para que no resultara lo de los independientes".
Pero bueno, algo habrá que hacer y hago un llamado a no votar por todos aquellos iluminados y mesías apoyados por partidos políticos y también aquellos que se declaran independientes pero con casa política que los cobija, que tendrán cobertura en los medios de comunicación y en particular la TV.
Roberto Espinosa Fabres
Año de San José
Todos los hombres somos hijos de Dios y, por lo tanto, todos tenemos como Padre a nuestro Padre Dios. El motivo es muy sencillo. Es que Él no desea ser para nosotros un mero Creador, que ya es bastante. Quiere ser mucho más, un Padre.
Pero, además, todos tenemos en este mundo un padre. Pues Jesucristo, Dios hecho Hombre, también quiso tener uno y ese padre es San José.
Es verdad que, a diferencia de nuestros padres, José no engendró a Jesús. Pero, igual que a nosotros, su padre, José, le enseñó a Jesús a dar sus primeros pasos, a pronunciar sus primeras palabras, a sonreír, a llorar, a gesticular, a comer, a jugar, a estudiar, a realizar tareas domésticas y ayudar en casa, a pasarlo bien con los parientes y amigos, a trabajar y a descansar.
José le enseñó a Jesús a vivir las virtudes y de modo particular a amar a su Madre, María, y a todos.
José le enseñó a Jesús a ser fuerte en la adversidad, en el sufrimiento y en el dolor.
Valentín Abelenda Carrillo