Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Espectáculos
  • Clasificados
  • Servicios
  • Cartelera y Tv
  • Deportes
  • Contraportada

Venganza y enigma criminal mueven los hilos de la serie "¿Quién mató a Sara?"

TELEVISIÓN. Fue escrita por el chileno José Ignacio "El chascas" Valenzuela y llegará por Netflix a 190 países, en ocho idiomas.
E-mail Compartir

Amelia Carvallo

Este miércoles 24, Netflix sumará una nueva producción latinoamericana a su catálogo con el estreno de la serie mexicana "¿Quién mató a Sara?", escrita por el chileno José Ignacio Valenzuela ("Amor a domicilio", "Marparaíso"), que aborda en clave thriller el violento asesinato de una adolescente.

En sucesivas miradas al pasado y saltos temporales, la serie entrega pistas sobre los días previos y la jornada en que ocurre el crimen de Sara Guzmán, una adolescente de 16 años que pasa sus vacaciones bajo la hospitalidad de la familia Lazcano, junto con su hermano Álex.

Este último, un adolescente también, asume ante la policía la responsabilidad del crimen y encubre a los verdaderos culpables a cambio de pasar una breve condena en la cárcel.

Abandonado a su suerte, Álex es condenado a 30 años de cárcel de los cuales cumple 18. Al salir en libertad lo único que busca es vengarse de Rodolfo Lazcano, quien era el novio de su hermana y sospechoso del asesinato. Todo se complica cuando inicia una relación sentimental con la menor de los Lazcano, Elisa, quien era una niña cuando ocurrieron los hechos y que también busca saber la verdad.

Los actores principales (Manolo Cardona quien tiene el rol de Álex, y Carolina Miranda, que interpreta a Elisa), conversaron sobre cómo construyeron sus personajes y adelantaron algunos de los hilos que tejen a este misterio.

-A Álex lo mueve la venganza, ¿cómo fue explorar ese sentimiento desde la actuación, Manolo?

-La verdad es que se tocan muchos temas y tabúes de manera muy abierta en la historia, como parte de los personajes. En cuanto al tema de la venganza, ciertamente es el motor de mi personajes: Él, a pesar de lo sucedido, quiere tomar justicia por su propias manos, y llega, como en una caja de Pandora, a destapar muchos secretos de cada uno de los integrantes de la familia Lazcano, todos los que tuvieron que ver en algo con la muerte de su hermana Sara. Es un thriller muy bien dirigido, escrito y actuado, un proyecto del cual nos sentimos muy orgullosos.

-¿Qué te pareció el guión?

-La historia no está basada en hechos reales, es ficción, es un thriller de misterio lleno de suspenso, acción, intriga y romance. Es una serie muy bien escrita, por José Ignacio Valenzuela, por 'El chascas', que teje muy bien todos estos hilos y que va llevando al espectador hacia adelante con las acciones de todos los personajes.

El machismo

Producida por la mexicana Perro Azul, "¿Quién mató a Sara?" llegará a más de 190 países y es la primera historia y serie latinoamericana de la plataforma Netflix que es traducida a más de ocho idiomas.

-Carolina, ¿cómo fue explorar la relación padre-hija que tienes con César Lazcano, que es un patriarca tan machista?

-Fue duro, porque Ginés García es un excelente actor y te hace entrar tanto en el personaje, te ambientaliza tanto el set, que ya básicamente como actriz lo único que tienes que hacer es dejarte ir y escucharlo y conectar con él, de verdad mis respetos a Ginés como actor. A nivel personal, el hecho de llevar una relación tan machista con un padre de ese estilo, fue complicado porque yo no crecí con eso, mis papás son personas muy unidas, tranquilas, que no tienen este tipo de estereotipos, este tipo de problemas, entonces de pronto enfrentarte a estas realidades es complicado y te das cuenta que, como Elisa, seguramente muchas mujeres sufren este machismo y opresión que existe todavía dentro de los hombres. Al mismo tiempo es muy lindo saber que lo vas a destapar y que Elisa no es un personaje que se deje, así como espero que hayan muchas mujeres allá afuera que no se dejen, que nos las opriman y que puedan alzar la voz.

-¿Qué ecos puede traer al tema del femicidio la serie?

-Creo que más que un femicidio cuenta la historia de un asesinato, evidentemente de una mujer, pero va mucho más allá, te muestra la oscuridad de cada uno de los personajes, de cómo están dibujados y de sus historias pasadas, y eso es lo que hace realmente rica de ver esta serie. Sin embargo, sí, se está tocando este tipo de temas y a nivel personal me da mucho gusto, porque es algo que ahorita estamos viendo en México y mundialmente, el maltrato sobre la mujer. Saber que existen este tipo de cosas en donde se busca la justicia, se busca que el responsable y el culpable tengan un castigo me da mucho gusto, sabemos que la gente que está allá afuera, tenga pronta respuesta y justicia en sus vidas y en sus historias.

Cierra la sala de cine romana donde Fellini veía películas

CRISIS. Cuarenta años tenía el recinto que debió bajar el telón producto de la pandemia. Morricone dio un concierto ahí.
E-mail Compartir

El pequeño cine Azzurro Scipioni, ubicado en Roma, Italia, era donde el aclamado realizador Federico Fellini ("La dolce vita") solía ir a ver películas, y el director de orquesta Ennio Morricone ("La misión") daba conciertos a una reducida asistencia: pese a estar en el centro de la historia cinematográfica contemporánea, esta semana informó su cierre debido a la crisis por el covid-19.

"Vendo urgentemente 90 hermosos sillones para cine o teatro, provenientes del ya cerrado cine Azzurro Scipioni", escribió en Facebook el propietario de la sala Azzurro Scipioni, Silvano Agosti (83), anunciando el fin del histórico pequeño cine donde a Fellini le gustaba ir a ver películas.

La sala ubicada en el barrio de Prati, en Roma, abrió en 1983 y había resistido ante la competencia de las grandes cadenas con sus propuesta de películas de autor en un ambiente pequeño, recogido, sin grandes tecnologías, pero conservando el encanto del cine de barrio.

"No me decidí yo a cerrar. Ha sido el Estado el que me cerró. Al comienzo de la pandemia coloqué un ramo de flores cada tres asientos para indicar los que se debían ocupar. Me pareció una distancia razonable", dijo Agosti al diario La República, pero los cines nunca volvieron a abrir.

El director de la sala explicó después que hay que seguir pagando el arriendo aunque el cine esté cerrado, motivo por el que decidió vender las butacas: "50 euros cada una (poco más de $42 mil), las compré en 200".

Agosti definió su trabajo como "un cine que no mentía", porque "yo siempre y solo yo proyecté las obras maestras que nadie quería. Y la gente salía feliz porque aquí encontró la vida".

A este cine, lleno de recuerdos y cárteles de una época en la que se descendía por una empinada escalera, solían llegar quienes buscaban autenticidad en el séptimo arte: el escritor Alberto Moravia ("La romana"), los directores Federico Fellini ("Boccaccio 70"), Michelangelo Antonioni ("Blow up"), Bernardo Bertolucci ("Último tango en París"), Marco Bellocchio ("Vincere"), e incluso el compositor Ennio Morricone ("Cinema Paradiso") realizó en Azzurro Scipioni un concierto para pocos invitados.

Durante este año se realizaron recolecciones de fondos entre los amigos y vecinos del cine para salvarlo, dinero que permitió sobrellevar algunos gastos, pero ahora el cierre es definitivo. La Municipalidad de Roma y la Fundación Cinema pretenden crear iniciativas para "que el valor de los 40 años de historia de Azzurro Scipioni no se pierda".