Documento desclasificado detalla vínculos de saudíes con Al Qaeda
TERRORISMO. El informe, de 2016, fue divulgado por el FBI ante la presión de los familiares de las víctimas de los atentados se septiembre de 2001.
La Agencia Federal de Investigación (FBI) de Estados Unidos desclasificó un documento hasta ahora secreto que formó parte de sus pesquisas sobre la posible implicación del Gobierno saudí en los atentados del 11-S, tras una fuerte presión de los familiares de las víctimas.
El documento, que data de 2016, describe los contactos que tuvieron los terroristas con personas saudíes en Estados Unidos. El informe, de 16 páginas y con múltiples tramos censurados, se desclasificó por orden del presidente Joe Biden, sobre publicar documentos secretos sobre la investigación del FBI.
Esa indagación se centró en el presunto apoyo logístico que pudieron proporcionar a los terroristas un empleado del consulado saudí en Los Ángeles (California), Fahad al Thumairy, y un sospechoso de ser agente de inteligencia de Arabia Saudí en la misma ciudad, Omar al Bayumi.
El documento asegura que Al Bayumi proporcionó "asistencia de viaje, alojamiento y financiación" a dos de los terroristas implicados en los atentados del 11-S, Nawaf al Hazmi y Khalid al Mihdhar.
Al Bayumi fue detenido en Reino Unido tras los atentados y fue uno de los focos de la investigación oficial sobre el 11-S de una comisión del Congreso.
Esa comisión no encontró pruebas oficiales de que el Gobierno saudí hubiera estado implicado en la financiación de Al Qaeda o de los atentados, y la interrogante desde entonces ha sido cuánto sabía de las actividades de sus ciudadanos, como Al Bayumi.
Ese presunto espía saudí tuvo contactos con Al Thumairy, que en ese momento era diplomático en el consulado saudí y mantuvo llamadas con al menos dos futuros presos de Guantánamo, mientras que el informe describe que era "muy bien tratado" por el personal del consulado.
Aunque las partes censuradas del informe impiden confirmar contaba con el beneplácito del Gobierno saudí, la asociación de familiares de las víctimas, 9/11 United, la consideró una prueba. Por su parte, el Gobierno saudí dijo tener "toda la confianza" en que "no existe ninguna relación del reino" en los atentados.
20 años se cumplieron desde el atentado terrorista más grande en la historia, donde murieron 2.996 personas.