Bienestar digital
En muchos colegios de nuestro país, los equipos docentes se están preparando para cerrar un año académico que alternó entre aulas presenciales y online con cierta incertidumbre sobre cómo será la realidad sanitaria 2022.Es un hecho que la tecnología llegó para quedarse en la educación y el cambio de paradigma nos obliga como docentes, estudiantes, padres y apoderados a hacer un cambio cultural radical, pues los datos son alarmantes: el tiempo de conexión ha aumentado un 45% durante el último año y las personas -en promedio- pasan 3 horas y 15 minutos cada día en el celular.
Desde esa perspectiva, la enseñanza de la ciudadanía digital, integrando la seguridad online como parte del currículum, permitirá a las nuevas generaciones comportarse de manera empoderada y tomando los resguardos necesarios.
Sin duda, es un gran reto para los colegios, que deberán crear instancias de desarrollo profesional para los docentes, sensibilizar a la comunidad educativa e incorporar el concepto de bienestar digital, que busca construir una cultura positiva en torno a la tecnología, para mantener un sano equilibrio.
Carolina Bergamasco Directora de Proyectos e Innovación de Cognita Chile
Violencia y armas
Hoy, cualquiera, sea joven, adulto o viejo, maneja un arma de fuego. No solo para defenderse, sino para atacar y matar al que lo mire feo o le haga un gesto raro. Si un conductor, de cualquier tipo de vehículo, comete, sin darse cuenta, una infracción, puede que se encuentre con alguien que decida desenfundar una pistola para dispararle a raíz de ese suceso. Matar a otro ser humano se ha vuelto una costumbre difícil de definir. No existe respeto alguno por la vida de otro ser. Si el Gobierno no reacciona, llegará un momento que salir a la calle será convertirse en un blanco de tiro ante cualquier pelafustán.
Renato Norero V.
Mujeres en la alta dirección
Por cinco años consecutivos, desde Mujeres Empresarias venimos entregando a la ciudadanía el Ranking IMAD, estudio realizado junto a la Dirección de Estudios Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Chile (DESUC) y que revela la participación femenina en la alta dirección de las empresas más importantes en Chile.
Las brechas de género en la alta dirección de empresas siguen siendo un desafío en nuestros tiempos y es por ello que venimos trabajando por 20 años en formar a mujeres para asumir cargos de primera línea y directorios. Las empresas cada vez están más motivadas, esta vez son 126 quienes integran el Ranking IMAD, compuesto por compañías IGPA, empresas públicas, multinacionales y de la banca, con ventas superiores a 100.000 UF anuales y 100 trabajadores o más.
Un avance de los resultados de este Ranking IMAD que podemos adelantar es que en la edición 2021, el 84% de las empresas tiene mujeres en sus directorios. La mayoría de las empresas que participaron tiene al menos una mujer en este nivel.
El Ranking IMAD revela la importancia del liderazgo de la mujer para las empresas actuales y poder liderar, junto a los hombres, de manera efectiva y con total éxito. Todo esto, en la línea de lo que Chile necesita: que el talento femenino sea incorporado a la toma de decisiones y sean un aporte a la competitividad del país. Los invitamos a sumarse a este desafío.
Carolina Eterovic y Francisca Valdés Directoras ejecutivas de Mujeres Empresarias
Desigualdad laboral
Aunque cada vez hay más avances en la materia, aún está muy latente la desigualdad de la mujer en el mundo laboral. Hace solo algunas décadas las mujeres no tenían derecho al sufragio y hasta nuestros días el trabajo doméstico no remunerado resulta invisible, centrándose solamente en la producción de bienes y servicios que puedan ser consumidos. Gracias a una prolongada lucha y a diferentes movimientos sociales de mujeres, estos temas han cobrado relevancia. Es por ello que Chile tiene un desempeño superior al promedio mundial; no obstante, no es fácil ser mujer en el mundo del trabajo remunerado, sobre todo en el cono sur.
Por lo anterior, podemos señalar que algunos de los motivos principales por los que aún existe la desigualdad de la mujer en el mundo laboral es la percepción de que hay pocas mujeres con la experiencia necesaria, razones sociales relacionadas con el "rol clásico" de la mujer y la discriminación al momento de elegir directoras mujeres.
El escenario actual exige unir esfuerzos para erradicar los estereotipos de género y lograr que haya más participación de mujeres, en direcciones y diversos ámbitos del mercado laboral.
Al respecto, a nivel local, el proceso constituyente puede ser un aporte para lograr mayor igualdad, transformando progresivamente la percepción errada que se tiene de las mujeres en la sociedad.
Marcela Letelier Porras