Difícil transición hacia el fin de la pandemia
Los casos diarios y las hospitalizaciones han disminuido drásticamente, pero ¿estamos listos para abandonar las restricciones". El Minsal mantiene la resolución sanitaria que obliga su uso (mascarilla) en espacios abiertos, medida que no se levantará hasta que los indicadores así lo recomienden con claridad.
El alcalde de Chile Chico, comuna ubicada en el extremo sur, fue quien mediante una ordenanza definió que ya es posible transitar por las calles de la ciudad sin tener que usar obligatoriamente mascarilla, barbijo o tapaboca. La decisión sorprende porque se esperaba que el Ministerio de Salud (Minsal) fuera el que informara sobre ese punto en particular y otros definidos en pandemia con alcance nacional.
Si bien hay sorpresa no es de extrañar debido a que un alto porcentaje de la población siente que la pandemia fue superada y necesita abandonar medidas y restricciones que a más de dos años resultan molestas.
Es entendible y está en sintonía con lo que ocurre mayoritariamente en el mundo. La desescalada partió por los confinamientos, los aforos y otros como tomar la temperatura al ingreso de lugares cerrados y el uso de la mascarilla se convierte en una sugerencia para los espacios abiertos.
Son países que llevan meses de delantera en el control de los contagios y han sufrido los estragos de una infección que ha causado un alta tasa de mortalidad. Por ello, también pasan por el cansancio pandémico y optan por relajar las medidas preventivas tras la caída en indicadores.
El covid, según ellos, pasa a ser una enfermedad endémica que requiere de los cuidaos propios de una influenza estacional. Hay vacuna y medicamentos para combatirla pero si hay contagios en población vulnerable o no se toman los cuidados pueden tener en un desenlace fatal, como ocurre con la actual influenza. Pero el autocuidado ya no es impuesto por decreto.
En Chile aún no llegamos a este punto y lo dispuesto por el alcalde de Chile Chico no pasar a ser más que una anécdota en el proceso pandémico que hemos vivido. El Minsal mantiene la resolución sanitaria que obliga su uso en espacios abiertos y, según declaraciones del organismo, no se levantará hasta que los indicadores así lo recomienden en un escenario mundial distinto.
No podemos soslayar que la aparición de una nueva variante contagiosa y letal no está descartada, más aún si sabemos que el número de vacunados en vastos sectores del mundo es casi nulo. Y existen otros lugares, como en ciudades chinas, donde los rebrotes han obligado a retomar las medidas restrictivas pese a la molestia en sus habitantes.
La transición hacia el final de la pandemia debe ser con pasos seguros y no amparado en sensaciones, tiene que haber certeza de un claro control de la enfermedad.