Pablo Orellana G.
De visita por la comuna el diputado Jaime Araya analizó la contingencia local, se refirió a su postura ante lo que será la discusión del quinto retiro, pero también del rol de los ejecutivos de Codelco en Calama. Además, explicó que es partidario de crear un fondo de estabilización de las harinas ante el aumento de este bien de primera necesidad, y abordó además la seguridad pública que afecta a la ciudad.
¿En qué contexto se enmarca su visita a la comuna?
-Esto no es una visita, es parte del trabajo que nos ha encargado la ciudadanía, y que es trabajar en el territorio y escuchar a la gente, eso lo fundamental. Es además, conversar con la gente, cara a cara, escuchar sus necesidades y tomar el pulso de las conversaciones con las personas, y en eso lo primero que me llevo es la preocupación de la gente por el quinto retiro, el tema de la delincuencia y la contaminación. Temas que creo se han ido repitiendo en las distintas conversaciones que hemos tenido. Y como representante de este territorio se debe estar fuertemente enraizado con sus temáticas, y me duele profundamente las carencias que tiene Calama, porque es una de las ciudades que más ha aportado a la historia de nuestro país, y la que históricamente ha sido maltratada por Codelco Chile.
¿Va a ejercer un rol de mayor fiscalización hacia Codelco?
-En este nuevo ciclo, y ojalá que las personas que están a cargo de la estatal, entiendan que no necesitamos relacionadores públicos acá. Necesitamos gente que viva acá, que entienda las carencias que hay y se comprometan en serio. Lo que se merece Calama es el mejor trato de la empresa que más produce cobre para el país.
En cuanto al tema medioambiental ¿Cómo analiza usted esa relación que tiene precisamente Codelco con la salud pública de Calama?
-Lo primero es que haya un gran pacto entre Codelco y Calama y que se reconozca por parte de la estatal y que la ciudad no siga esperando. Lo segundo, y que la comunidad sepa, es que estamos analizando incorporar nuevas figuras legales y que persigan la responsabilidad penal de los ejecutivos de la empresa -públicas o privadas-, que se vean involucrados en episodios de contaminación y que esa contaminación haya tenido afectación de las personas y como lo es el caso de Calama.
Nos parece muy relevante que las figuras que son bastante débiles en responsabilidad penal, se puedan perseguir respecto de personas que han actuado, a veces deliberadamente, en contra de la población de Calama y que podría ser una regla a futuro, y que el interés de las empresas no esté por sobre la comunidad, con respeto al medio ambiente y la salud pública. También que los ejecutivos de Codelco comiencen a dar la cara a la ciudadanía, Codelco es un monstruo que no tiene cara, con ejecutivos que reciben altas remuneraciones por una labor que muchas veces va en desmedro de lo que son los intereses de las personas, su salud, y el desarrollo de la ciudad y progreso.
¿Debe haber un cambio en el gobierno corporativo de Codelco?
-Creo que se requiere nuevas formas legales, pero también un cambio de actitud. Queremos que haya ejecutivos comprometidos con Calama, y no delincuentes ambientales mandando en Codelco. Eso es un tema que debe quedar claro. No puede ser gente que siente absoluto desprecio y ninguna valoración por la gente de la ciudad, esté a cargo de la principal estatal del país. Yo creo que una empresa que genera tantos recursos para el país, requiere de una administración seria, responsable, empática y humana. No se trata de los fríos números e inversiones, se trata de que haya un buen trato a sus trabajadores, responsabilidad con sus trabajadores contratistas, responsabilidad con el entorno, Calama y el medio ambiente.
En otro ámbito, usted se ha comprometido a aprobar un quinto retiro.
-Yo soy integrante de la bancada del quinto retiro, y lo soy porque siempre he estado convencido de que si uno en campaña se compromete con la gente, cuando le toca ser autoridad no puede estar dando explicaciones. Yo me comprometí a apoyar el cuarto retiro, el que no llegó a ser efectivo, pero este quinto retiro es por un tema de coherencia y consecuencia. Yo di mi palabra, pero no sólo por eso, sino porque además entiendo que esta es una medida que apoya mucho a las familias de clase media, y creo además que hay que restarle dramatismo a esta conversación sobre el quinto retiro. Esta es una medida que tiene un impacto importante en la economía, pero se deben mirar otros factores que no están dentro de los fríos números. Tiene que ver en cómo se compensa la angustia de los padres de familia que no puedan pagar el colegio de sus hijos; de las madres que son jefas de hogar y no puedan pagar sus arriendos o créditos hipotecarios, o de jóvenes que no pueden ir a la universidad porque no pueden costear lo que significa estar en la zona central. Hay un conjunto de factores que no son ponderados a la hora de decir que no se puede efectuar el retiro. El mercado de capitales se sostiene sobre el pago de pensiones de hambre, y eso no corresponde, el principal aporte que reciben las aseguradoras de fondos proviene del trabajo de las personas.
Usted también ha propuesto la iniciativa de generar un mecanismo de estabilización de la harina.
-En cuanto a estoy en la previa a la reforma tributaria, vemos que el alza de las harinas, y que es un componente fundamental dentro de la canasta básica, se puede generar un mecanismo de estabilización, esto porque el conflicto entre Rusia y Ucrania, va a generar esas externalidades como un mayor aumento de la harina y por ende del pan. Espero que este sea discutido y vayamos viendo cómo ayudar en esta materia a que el impacto en el precio no siga aumentando, y más bien poder generar una estabilización de ese producto de primera necesidad.
La seguridad es otra de sus preocupaciones.
-Me parece que la delincuencia el narcotráfico y su control debe ser la agenda prioritaria en Calama. Y además, uno espera que las autoridades del gobierno central apliquen planes especiales y excepcionales con la ciudad. No puede ser que una madre que va en busca de su hijo a la escuela termine con una bala alojada en la cabeza, o que haya personas que sientan el total derecho de arreglar sus temas a balazos. Esto corresponde a una desigualdad social que en otras partes del país no se ve, hay que corregirlo con urgencia y firmeza que se requiere. Se necesitan medidas concretas, urgentes y con la inyección de recursos para combatir esta situación que aqueja a los calameños.