Zelenski visita por primera vez el frente y destituye a jefe militar de Járkov por no defender la ciudad
GUERRA. Presidente de Ucrania también reiteró que Rusia debe ser declarada "Estado terrorista". Invasores dejaron ayer la ciudad clave de Kramatorsk sin electricidad.
En su primera salida fuera de la región de Kiev, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, visitó ayer a los soldados de su país en el frente de guerra en Járkov, en el día 95 de la invasión rusa y mientras se mantiene la intensa ofensiva en el Donbás. Más tarde, el mandatario ofreció una cadena nacional en la que anunció la destitución de un alto jefe militar por "no trabajar lo suficiente" para defender el territorio.
Tras recorrer las posiciones de su Ejército en la región, donde las tropas locales lograron desplazar al enemigo ruso en las últimas semanas, Zelenski evaluó la infraestructura destruida, se reunió con las autoridades locales y entregó premios a los soldados ucranianos.
"Siento un orgullo sin límites por nuestros defensores", indicó tras su visita, en la que estuvo siempre escoltado y con chaleco antibalas.
Zelenski informó que la región de Járkov tiene al menos 2.000 casas destruidas. La segunda urbe más grande del país se encuentra cerca de la frontera con Rusia y es una de las ciudades ucranianas más castigadas por misiles rusos, con barrios enteros destruidos, de los que habían sido evacuados muchos de los cerca de dos millones de habitantes del área metropolitana.
Horas después de la vista, Járkov registró nuevos ataques rusos, según informó Igor Térekhov, dirigente local.
Durante la noche, y en cadena nacional, el presidente Zelenski informó que había destituido al jefe de los Servicios de Seguridad para la región de Járkov porque "no trabajó en la defensa de la ciudad desde el primer día de esta guerra a gran escala. Estaba pensando solamente en si mismo".
No es el primer militar destituido por Zelenski. Hace dos semanas ya había despedido al jefe de las Fuerzas de Defensa Territorial, el comandante Yurii Halushkin.
Previamente, el sábado en la noche, Zelenski había reiterado que Rusia debe ser declarado un "Estado terrorista" por la comunidad internacional como muestra "la realidad diaria", en la que Moscú ha lanzado "ataques bárbaros con misiles y morteros" contra su país.
Hostilidades en donbás
El Ejército ruso prosiguió ayer con los ataques en varios puntos del Donbás, donde se acerca cada vez más al bastión militar ucraniano de Kramatorsk, localidad clave para el control del este ucraniano, a la vez que continuó la lucha por la ciudad de Severodonetsk, una de las mayores urbes de Lugansk.
Según Zelenski, Severodonetsk y su vecina Lisichansk se encuentran entre las "áreas clave" de la resistencia en el Donbás. "La situación es increíblemente difícil, pero nuestra defensa resiste y estoy muy agradecido a todos los que aguantan la presión de los ocupantes", dijo el mandatario.
Tras clamar victoria en la localidad de Limán, las tropas rusas pusieron en su punto de mira la ciudad de Kramatorsk, un importante nudo ferroviario del Donbás, considerado un centro administrativo del territorio controlado por Ucrania en la región de Donetsk.
Con unos 150.000 habitantes antes de la guerra, la ciudad se quedó sin electricidad como resultado de los combates, anunció ayer el alcalde Alexandr Goncharenko, mientras que en la región de Lugansk, donde las fuerzas ucranianas controlan actualmente solo el 5 % del territorio, el Ejército pudo contraatacar y alejar a las tropas rusas de un lugar estratégico: la carretera Bakhmut-Lisichansk.