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El agua está presente de forma abundante en muchos pequeños planetas

ESTUDIO. Los científicos estiman que, a diferencia de lo que ocurre en la Tierra, el elemento se encuentra "incrustado" en rocas o bajo la superficie.
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Agencias

El agua está presente de forma abundante en muchos pequeños planetas extrasolares pero no fluye en océanos y ríos como en la Tierra, sino que probablemente está incrustada en la roca o en bolsas bajo la superficie, según un estudio liderado por la Universidad de Chicago y el Instituto español de Astrofísica de Canarias (IAC).

Un estudio publicado en la revista Science revela que hay una abundante población de exoplanetas de agua y roca alrededor de estrellas enanas de tipo M, que son las más comunes de la Vía Láctea.

Para este estudio, liderado por los investigadores Rafael Luque, de la Universidad de Chicago y el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), en el sur de España, y Enric Pallé, del IAC y la Universidad de La Laguna (ULL), en el archipiélago atlántico español, se analizaron de forma detallada el radio y la masa de 43 exoplanetas pequeños conocidos alrededor de estrellas enanas M, que son el 80% de las estrellas de la Vía Láctea.

Mundos acuáticos

Rafael Luque explica en un comunicado que descubrieron la primera prueba experimental de que los mundos acuáticos existen como población, y que, de hecho, son casi tan abundantes como los planetas terrestres.

Según se desprende del estudio, muchos más planetas de los que se pensaba podrían tener grandes cantidades de agua, llegando a contener hasta el 50% de la masa total del planeta.

Enric Pallé manifestó a Efe que la mitad de estos planetas es agua, de forma que la cantidad es ingente y si lo tuviera en forma de océano este tendría miles de kilómetros de profundidad, pero los datos parecen apuntar que la capa más superficial está derretida y el agua está debajo y hasta el núcleo.

Añadió que, en algún momento, habrá agua líquida y no se sabe si hay vida, pero sí se sabe que una mayoría de planetas son iguales a la Tierra en composición, con lo que las probabilidades de encontrar vida aumentan mucho por este motivo.

Cuando los investigadores analizaron la muestra se encontraron con algo inesperado, como es que las densidades de un gran porcentaje de los planetas sugerían que eran demasiado ligeros en relación a su tamaño como para estar formados solo por roca.

Por ello, creen que estos planetas deberían estar formados por la mitad de roca y la mitad de agua u otra molécula más ligera, y han descubierto que es la densidad del planeta y no el radio, como se pensaba anteriormente, lo que separa los planetas secos de los húmedos, comentó Rafael Luque.

Sin embargo, estos planetas están tan cerca de sus soles que cualquier agua en la superficie existiría en una fase gaseosa supercrítica, lo que ampliaría su tamaño.

Agua "incrustada"

Por ello, los científicos piensan que, en este tipo de población, el agua estaría probablemente incrustada en la roca o en bolsas bajo la superficie, en lugar de fluir como océanos o ríos.

Estas condiciones serían similares a las de la luna Europa de Júpiter, pero muy diferentes a lo que ocurre en la Tierra, que es un planeta "seco a pesar de que casi toda el agua está en su superficie, lo que le da una apariencia muy húmeda. El agua de la Tierra es solo un 0,02% de su masa total, mientras que en los mundos acuáticos es el 50% de la masa del planeta", apuntó Enric Pallé.

Agregó que descubrieron que los pequeños planetas alrededor de estas estrellas pueden ser descritos por una población discreta de familias: planetas muy similares a la Tierra, planetas con el 50% de su masa formada por agua (mundos acuáticos o "water worlds" en inglés) y mini-Neptunos con atmósferas extendidas de hidrógeno y/o helio.

Este hallazgo contradice la idea generalizada de que estos mundos son o bien secos y rocosos o bien tienen una extensa y tenue atmósfera de hidrógeno y/o helio.

Y sugiere, por el contrario, que, a diferencia de los planetas rocosos, estos mundos ricos en agua se formaron fuera de la denominada "línea de nieve", es decir, a una distancia en la que la temperatura era lo suficientemente baja como para que los compuestos más ligeros como el agua se solidificaran y se formaran granos de hielo sólidos, migrando posteriormente hacia el interior. La distribución de tamaños y densidades de exoplanetas es una consecuencia directa de la formación de planetas a diferentes distancias de la estrella y no de la presencia o no de una atmósfera, comentó Pallé.

Según los investigadores, los próximos pasos serán entender la estructura interna de los mundos acuáticos, es decir, dónde se almacena el agua, y si estos planetas pueden albergar una pequeña atmósfera de vapor.

Investigación afirma que la contaminación del aire puede provocar cáncer entre las personas que no son fumadoras

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El tabaquismo es la primera causa de cáncer de pulmón pero también el radón, un gas radiactivo que se asienta sobre suelos graníticos, y la contaminación del aire, elementos que llegan a provocar carcinogénesis o mutación de células que desembocan en esa enfermedad que desarrolla un 15% de la población no fumadora.

En París, en el marco del congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO, por sus siglas en inglés), científicos del Francis Crick Institute and University College London, presentaron un estudio que alerta de cómo la polución del aire promueve cambios cancerosos en las células de las vías respiratorias y genera más casos de cáncer de pulmón de células no pequeñas entre personas que no han fumando nunca.

En una entrevista a Efe, el jefe de Oncología Médica del hospital universitario Doce de Octubre, en Madrid, Luis Paz-Ares, que presenta en el congreso un estudio, del que es el principal coordinador, sobre un nuevo tratamiento de inmunoterapia pulmonar, afirma que la polución y la presión ambiental es "junto al radón promotores de la carcinogénesis en el pulmón, de manera clarísima".

Paz-Ares, que también es jefe de la unidad de investigación clínica de cáncer de pulmón H120 del Centro Nacional de Investigadores Oncológicas (CNIO), explica que estas carcinogénesis se adquieren "no se transmiten a la progenie", y ha informado de que las mutaciones de un gen que son hereditarias suponen solo entre un 5% ó 7%.

Sobre el impacto del cáncer de pulmón (30.000 nuevos casos al año en España, de los que 4.500 son de no fumadores), Paz-Ares subraya que el 85% podría evitarse si se elimina el consumo de tabaco y emplaza a las administraciones a ser más restrictivos en los espacios públicos en los que se puede fumar y aumentar el coste de la cajetilla de tabaco.

También es muy importante, dice, que niños y adolescentes entiendan que el cáncer es una droga maligna y que si no mata da al paciente una calidad de vida malísima.

Y además es necesario que la sociedad vea al fumador como adicto, no como vicioso y esa perspectiva le ayudará a dejar el hábito. Paz-Ares aclara que aunque una persona haya fumado 30 años, "merece la pena dejarlo" , pedir consejo médico y ayuda en las consultas de deshabituación tabáquica.

Pese a la dureza del cáncer de pulmón, este oncólogo esgrime cifras positivas como el hecho de que en 20 años los pacientes con tumor metastásico (estadio cuatro) hayan pasado de una supervivencia del 2 al 20% a los cinco años.

De detectarse en una fase temprana los porcentajes de supervivencia mejoran significativamente. Del 75% en el estadio uno, al 45-50% en el estadio dos y al 25-30% en el tres.

15% de la población no fumadora podría experimentar mutaciones cancerígenas debido a la contaminación atmosférica.