Antucoya lidera programa de desarrollo de capacidades y competencias para jóvenes
PROGRAMA. Trabajo con el Liceo de María Elena busca intervenir y estandarizar las carreras técnicas para preparar mejor a los estudiantes para la vida laboral.
Mejorar las capacidades y competencias para la vida laboral de los jóvenes que estudian en liceos técnicos y ampliar su abanico de oportunidades laborales e impactar positivamente en la empleabilidad, ese es el objetivo del Programa de Acompañamiento impulsado por Minera Antucoya en el Liceo Técnico Profesional Científico Humanista de María Elena.
Esta iniciativa, que contempla la alianza virtuosa entre Antucoya, CCM-Eleva y la municipalidad de María Elena, cuenta desde el 2018 con la participación de decenas de jóvenes, que han sido favorecidos para completar sus prácticas laborales o con su participación en programas de aprendices.
En esa línea, los estudiantes de tercero y cuarto medio que cursan la especialidad de Mecánica en el Liceo María Elena TPCH, fueron parte del hito del lanzamiento de la versión 2022 del Programa de Acompañamiento, el cual busca apoyar el desarrollo de las habilidades del Siglo XXI, con actividades de aprendizaje y un conversatorio donde además participaron profesionales de Antucoya.
"En 2018, Antucoya fue la primera minera en trabajar con el Sello Eleva y el Marco de Cualificaciones Minero, desarrollado por la alianza CCM-Eleva, porque hacía falta un puente que acercara las especialidades de educación técnica o industrial, a las necesidades reales del mundo laboral y la industria minera. Estamos muy contentos de aportar desde nuestras compañías a mejorar las oportunidades de las personas de las comunidades cercanas a nuestras operaciones", precisó el gerente de Asuntos Públicos Norte de Antofagasta Minerals, Jorge Araneda.
Actividades
En la jornada se reforzaron las habilidades de liderazgo, trabajo en equipo y comunicación efectiva, competencias transversales con las que se buscó romper el hielo y generar "comodidad emocional" entre los alumnos y alumnas. Una segunda actividad consistió en desarrollar habilidades como la escucha activa, y la buena comunicación. "Las metodologías se basan en la experiencias de las y los estudiantes, en situaciones en que los invitan a poner en juego las distintas habilidades de interacción, como por ejemplo, la capacidad de expresarse de manera clara y adecuada al contexto, y la capacidad de liderar para lograr un objetivo o una meta", expresó Verónica Santander, coordinadora Técnico-Pedagógica de la alianza CCM-Eleva.