Punto de vista
En la carta que envió excusándose de participar en el acto de inauguración de la estatua del presidente Patricio Aylwin, el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle afirmó: "Patricio Aylwin supo liderar el deseo de unidad del pueblo chileno, sentar las bases del desarrollo que permitieron a miles salir de la pobreza e iniciar una senda de crecimiento económico".
Lo cierto es que quien sentó las bases del desarrollo y del crecimiento económico fue el presidente Pinochet. Por otra parte, Aylwin no lideró la unidad del pueblo chileno, por el contrario, con su Ley Indígena fue el causante del "conflicto mapuche" y en lugar de haber pacificado el país, como lo hizo Jorge Montt luego de la cruentísima guerra civil de 1891 -con sus leyes de amnistía- y lo propuso el cardenal Silva Henríquez, le echó más leña a la hoguera.
Adolfo Paúl Latorre
Responsabilidad
Consternación ha generado el video que en los últimos días se ha viralizado y que muestra a dos menores de edad amedrentando con armas blancas a transeúntes, a plena luz del día, en el centro neurálgico del país.
Más allá de la condena transversal que el hecho ha motivado, lo cual es siempre necesario, pues episodios de esta naturaleza deben ser repudiados de la manera más enérgica, no podemos como sociedad obviar la inherente responsabilidad que tienen los padres como principales responsables de salvaguardar la integridad de niños, niñas y adolescentes (NNA), y el Estado, que juega un rol preponderante en entregar herramientas a las familias para una parentalidad positiva.
La crisis actual en la que se encuentran algunas familias, especialmente aquellas precedidas de procesos migratorios altamente complejos, es la evidencia del debilitamiento de los vínculos familiares y otras distorsiones en su concepción y estructura. Ello trae consecuencias nefastas para la sociedad, siendo una de las más relevantes la delincuencia juvenil y el ambiente de inseguridad en que muchos NNA se desarrollan.
Sin embargo, frente a esa realidad es imprescindible que el Estado asuma un rol más activo en entregar a los padres o adultos responsables las herramientas y el soporte necesario para acompañar la labor de las familias, entendidas como el núcleo central donde se hace posible la humanización de NNA. Los aprendizajes que niños y niñas adquieren en el seno familiar son insustituibles y representan el más eficaz mecanismo de prevención frente a cualquier problema social.
Harry Grayde K. Director ejecutivo de World Vision
Mundial
Sea quien sea el campeón, considero que ha sido deportivamente un muy buen Mundial de Fútbol. Había pocas expectativas; sin embargo, ha sido el mundial de las grandes sorpresas y de los buenos arqueros. Los arbitrajes, con algunas excepciones, han estado dentro de lo que se esperaba y el público muy correcto. Jorge Valenzuela Araya
Desalinización
El cambio climático nos está transformando y en Chile son lentas las respuestas a estos nuevos equilibrios de la naturaleza. La sequía nos ha golpeado duro desde hace varios años; en el futuro, el recurso agua será deficitario para el consumo humano, la agricultura, la minería y en general para todos los procesos industriales. Sin embargo, existe la tecnología para ir dando respuestas a este déficit: las plantas de desalinización de agua de mar que funcionan en otros países desde la década del 60.
En Chile, en los últimos años se ha empezado aplicar esta tecnología, aunque con muchas dificultades debido a la participación de grupos que se oponen a su uso, ya que los residuos contaminarían y dañarían la flora y fauna si se devolvieran al océano.
Sin embargo, toda aplicación tecnológica tiene ventajas y desventajas. Hoy en día, varias de las desventajas se han ido superando, como la contaminación o alto consumo de energía, entre otros. Dependiendo del tipo de planta, los principios generales para transformar agua salada (agua de mar oceánica y agua estuarina) en agua dulce son: osmosis inversa, destilación, congelación, formación de hidratos, evaporación relámpago y electrodiálisis.
En Chile, la minería y su industria son los principales impulsores de este tipo de plantas desalinizadoras y cada día van aumentando debido a su necesidad de producción y a los principios ambientales. Sin embargo, para el resto de las áreas su uso es incipiente. Existen, pero pocas. Falta una política de Estado para generar un verdadero florecimiento de estas plantas, sobre todo para el consumo humano y la agricultura. Hay que recordar que en el futuro no solo faltará el agua para consumo humano, sino también para los alimentos, por lo que se hace prioritaria una política estatal que genere las inversiones para la construcción y operación de estas plantas. Hacerlo mañana ya será tarde.
Dr. Julio Inda Fuenzalida Director de la Escuela de Ingeniería Universidad del Alba