Actores locales evalúan de manera favorable, aunque con cautela, sorpresiva baja del IPC
ECONOMÍA. Este indicador que sirve para calcular mensualmente la evolución de la inflación, registró la primera baja en más de dos años, y se proyecta que este año retroceda a un dígito.
La sorpresiva baja en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registrada en febrero pasado, mes que registró una disminución de -0,1% en este indicador, surge como una favorable señal económica reconocida por diversas fuentes locales consultadas por El Mercurio de Antofagasta.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), con el registro apuntado en febrero el IPC acumuló un 0,7% en lo que va del año y un alza a doce meses de 11,9%. Una cifra que permitió bajar del 12,3% interanual registrado el mes anterior; y que expertos evalúan favorablemente ante el sostenido aumento de la inflación hasta llegar a dos dígitos, que no se reportaban desde los años 90.
Manuel Pérez-Trujillos, académico de la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Católica del Norte (UCN), la cifra reportada por el INE resulta positiva. "Cuando uno revisa los datos, transporte registra uno de los descensos más marcados y también en alimentos y bebidas no alcohólicas. Esto último es súper positivo, porque en definitiva el transporte es uno de los elementos más importantes en el coste de los bienes, por el tema de la logística. En concreto, con el tema de los alimentos y bebidas no alcohólicas también supone algo muy favorable, dado que justo estos son los elementos que configuran parte de la Canasta Básica de Alimentos, que ha crecido mucho más que el IPC durante el presente año. Esto ha afectado sobre todo a las familias más vulnerables". La disminución del IPC representa la primera caída mensual en más de dos años (noviembre de 2020).
"Esta baja del IPC durante febrero es una buena señal para el mercado, que pudiera comenzar a configurar un punto de inflexión y también rebajar la presión de la política monetaria sobre la economía. Principalmente pensando en lo que vaya a suceder en los próximos meses con la política monetaria, que por parte del Banco Central podría ser un poquito más flexible, tratando de bajar los tipos de interés para reactivar algunos sectores que en este minuto están sufriendo económicamente. Sobre todo en el proceso de contrataciones, como ocurre con la construcción y el comercio. En definitiva son buenas noticias, aunque estamos hablando de solo un dato, considerando que el mes anterior, en enero, subió por sobre las expectativas de lo que proyectaba el mercado. Queda por ver qué pasará en los siguientes meses, aunque si este mes marca una tendencia será bastante positivo para la economía", agrega Pérez.
La actividad económica en 12 meses medida por el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) en enero pasado creció 0,4% en comparación con igual mes del año anterior, en momentos en que el mercado esperaba una contracción. Mientras que el IPC de enero había anotado una variación mensual de 0,8%, superando también las expectativas.
El aumento de inflación en el país se ha atribuido en parte al excesivo aumento del gasto interno que causó la abultada liquidez aportada por los retiros previsionales y las transferencias fiscales universales. A este escenario se agregó el impacto en la economía global causado por la pandemia, como también debido al conflicto armado por la guerra sostenida entre Rusia y Ucrania.
Frente a este panorama el Banco Central ha determinado mantener la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 11,25%, en medio de un proceso de convergencia de la inflación que no se ha consolidado. El escenario central considera que la inflación total seguirá reduciéndose y retornará a la meta de 3% hacia la segunda mitad de 2024.
Ipc de un dígito
Antonio Sánchez, presidente de la Cámara de Comercio de Antofagasta, afirmó que el descenso de la inflación se convierte en una señal para la población. Sin embargo, precisa debe evaluarse con prudencia este descenso en el indicador.
"Es una señal muy positiva para toda la ciudadanía por cuanto ligado al IPC está la UF, y se fijan en la UF se fijan los arriendos y un montón de pagos y obligaciones de las personas. Por lo tanto, en la medida en que la UF suba menos eso favorece a los bolsillos de muchísimas personas. Ahora, respecto a las señales, si uno ve febrero del año pasado también fue muy bajo respecto a lo que se estaba dando. Porque los factores que hoy día influyeron en ese 0,1% negativo, principalmente están dado por los pasajes de avión, transporte y paquetes turísticos. Ahí hay una suerte de anomalía en la forma como se mide, que es lo que dicen los expertos. Por cuanto tú puedes comprar pasajes a bajo valor con mucha antelación y, por lo tanto, los valores que se dieron para este cálculo del IPC, corresponden a personas que habían programado viajes y podido comprar (pasajes) con bajos precios. Por eso hay ahí una incidencia muy importante que enmarca una distorsión que no podemos tomar esta cifra como una tendencia", dice.
"¿Qué sí es importante?. Yo creo que es una señal positiva en cuanto a lo que anuncia el Gobierno de que este año terminemos con una inflación de un dígito. Lo que sería importantísimo, en relación a que la tendencia este año sea a la disminución. Lo más probable es que a diferencia de febrero en los próximos meses se regrese a valores más elevados, pero con una tendencia anual, como lo anunció también el Ministro de Hacienda y el Banco Central, con un valor de un dígito y no de 12% como tuvimos el año pasado", expresa Sánchez.