El desafío de los consensos
Al cierre de esta edición, los resultados de las elecciones de consejeros constitucionales efectuadas el domingo 7 de mayo, dejaron de manifiesto a nivel nacional el fortalecimiento del Partido Republicano como colectividad, dejando tras de sí a las demás colectividades de la coalición "Chile Vamos". Por otra parte, en la centroizquierda se fortalece el Partido Socialista junto a Apruebo Dignidad.
Lo anterior, refleja que el Partido Republicano tendrá un rol preponderante desde la oposición al momento de plantear sus ideas, pero el gran desafío será tener la capacidad de escuchar las ideas de los demás partidos de la centroderecha y también de la centroizquierda, caso contrario, se correría el riesgo de redactar una Constitución que refleje las ideas de otro extremo político, ahora, ubicado en la derecha, repitiendo la mala experiencia de la primera Convención Constitucional cuya propuesta de Carta Magna finalmente fue rechazada.
Por otra parte, en el oficialismo, la alta votación del pacto Unidad para Chile da cuenta que tanto los partidos de la nueva izquierda, liderada por el Presidente Boric, como el socialismo democrático, representado por el Partido Socialista, necesariamente deberán consensuar planteamientos políticos que se reflejen en la nueva Constitución. Además, constituirá un desafío para el oficialismo en el sentido que "Apruebo Dignidad" o, en otras palabras, la nueva generación política que actualmente gobierna, necesariamente deberá escuchar las opiniones de la izquierda moderada al momento de fijar posiciones sociopolíticas.
En consecuencia, el Partido Republicano y el socialismo democrático junto a Apruebo Dignidad, se enfrentan al desafío de la moderación, la capacidad de escuchar y valorar el aporte de los políticos nuevos y con experiencia. Si lo anterior no se consolida, corremos el riesgo que la nueva Constitución se rechace en el plebiscito de salida.