Primera etapa de conservación del teatro de Chacabuco culmina en diciembre
PROYECTO. La jefa de Conservación de la Fundación Altiplano, Lucía Otero, explicó que las obras en esta fase inicial, constan en retirar los escombros y trabajar en el diseño de la nueva estructura.
Compartiendo una visión mucho más integral de los aspectos que debe aunar el proyecto de conservación, y eventualmente restauración (lo que todavía debe definirse), del teatro de la exoficina Chacabuco y su legado en la historia salitrera de la región, la jefa de Conservación de la Fundación Altiplano, Lucía Otero, conversó con El Mercurio de Antofagasta, para hablar sobre los múltiples desafíos que conlleva desarrollar este trabajo, desde una perspectiva más inclusiva con las comunidades.
¿Quiénes hoy están impulsando este proyecto y cuánto tiempo dura? ¿Cuáles son sus etapas?
-El programa empezó en el mes de diciembre de 2022, y terminan en el 2023. Las obras de emergencia tiene una duración de tres meses y ahora mismo estamos en el trámite de solicitar el permiso al Concejo de Monumentos Nacionales, para poder entrar en el sitio. Así que las obras de emergencia están previstas que inicien en el mes de julio. El profesional a cargo del diseño comenzó en enero y termina en diciembre.
¿En qué consiste el programa de emergencia?
-El proyecto de emergencia consiste en el desarme y protección del teatro. Sacar todo lo que hay dentro y proteger el inmueble hasta la restauración ¿Cómo vamos a proteger ese inmueble hasta entonces?, es la propuesta que estamos afinando ahora con el Gobierno Regional (Gore).
En una primera etapa, no habrá una restauración, sino que una protección del teatro.
En ese sentido, ¿tienen pensando, eventualmente, realizar también la restauración?¿Cuándo sería?
-Uno de los objetivos del programa es el diseño para su restauración y es lo que estamos trabajando en estos momentos.(….) Cuando se entregue en diciembre el proyecto debe ser aprobado por CMN tras esto podría iniciarse la restauración. Sabemos que por parte del GORE Antofagasta hay un compromiso de iniciar la restauración en el momento en el que se apruebe el proyecto.
¿Cómo está el resto de la infraestructura del teatro? Entiendo que al caerse el techo, de esa forma, había una mayor presión sobre el resto de la infraestructura, lo que podía profundizar el deterioro.
-Eso lo estamos estudiando; Al colapsar la cubierta el edificio está en estado de emergencia, ya que además de la funcionalidad pierde también un elemento fundamental que apoya el sistema constructivo (...) es importante considerar que el edificio ya ha sido restaurado en dos oportunidades, lo que también es un factor a consider; estamos estudiando la estructura, realizando el diagnóstico para ver qué es exactamente lo que falló, pero por lo que hemos visto en la escuela taller con los distintos especialistas que trabajaron en el proyecto, es que en el fondo las cerchas fallaron, no tanto así la estructura del hormigón del teatro, por lo que se requiere un diagnóstico estructural. También vamos a hacer pruebas en el hormigón para ver la resistencia que tiene actualmente, pero todo está en función del nuevo diseño.
¿Cuál, diría usted, es la importancia del este proyecto?
-Porque tiene una importancia histórica para la región de Antofagasta, es parte de los cimientos. Todo lo que la región es ahora viene de la época del salitre, por eso preservar este tipo de conjuntos, no solo es importante por su historia, sino también para la memoria.
¿Cuál de las dos acciones que realizarán como parte de la preservación y eventual restauración, es más desafiante?
-Ambas son muy importantes y desafiantes, un es una medida de emergencia y la otra de conservación que requiere el sitio. Pero más desafiante, a mi parecer, es hacer el diseño de restauración, porque la parte del desarme de la obra de emergencia, es un desafío técnico, pero un proyecto de restauración es un desafío adaptativo, donde nosotros no trabajamos a puertas cerradas, sino que abrimos el proyecto a la comunidad, mediante talleres de conservación de participación ciudadana. En ellos tenemos a especialistas que están relacionados con el ámbito y a los usuarios de los proyectos, entonces aunar todas las opiniones, las posturas y necesidades de la comunidad, es bastante complejo, y contentar a todos en la realización de un diseño participativos, es mucho más desafiante.
El taller de conservación Chacabuco, apunta a eso, son 6 talleres más un seminario final que termina con la recogida en un libro de todas estas miradas, donde en cada uno de estos talleres se van viendo estos temas, como el valor, los daños, el tema de la necesidad y el plan de manejo en el modelo de gestión y la propuesta que se abre a la comunidad.
"Estamos analizando la infraestrucura para ver qué es lo que falló, pero por lo que hemos visto, podemos decir que fallaron las cerchas. Por eso el techo cayó".
Lucía Otero, Jefa de Conservación de la, Fundación Altiplano