Correo
Convicciones democráticas
El gobierno y muchos dirigentes de izquierda que lo integran, han reaccionado con penosa ingenuidad y oportunismo frente a los hechos luctuosos ocurridos en Venezuela. El régimen que encabeza Maduro es una dictadura químicamente pura, que ha conculcado las más elementales libertades públicas, ha instaurado un sistema policial, ha violado brutalmente los derechos humanos, ha destruido las bases de la economía, ha extendido el flagelo de la corrupción y ha frustrado el porvenir de varias generaciones de venezolanos.De lo anterior no cabe ninguna duda, aunque haya autoridades que se nieguen o acomplejen de reconocerlo. Centrarse sólo en la transparencia del acto electoral y prescindir de más de 10 años de atropellos flagrantes y sistemáticos a la democracia, las libertades y los derechos humanos básicos, habla muy mal del nivel de los dirigentes chilenos de izquierda y, al mismo tiempo, alerta sobre la extrema endeblez de sus convicciones en relación con los valores que debieran informar una concepción política, social, económica, cultural y moral de un auténtico sistema democrático.
Gustavo Adolfo Cárdenas Ortega
Posición antidemocrática
El Partido Comunista chileno, Miguel Díaz-Canel en Cuba, Daniel Ortega en Nicaragua, Xi Jinping en China y Xiomara Castro en Honduras han reconocido la dictadura tiránica de Nicolás Maduro en Venezuela. Curiosamente, todos pertenecientes a la izquierda. Después de esto, ¿queda alguna duda de que la extrema izquierda es antidemocrática?
Felipe Jara S.
Rol de FF.AA.
Si en las Fuerzas Armadas de Venezuela no se quebrare la verticalidad del mando, lo más probable es que mientras cuente con el favor militar, Maduro seguirá en el poder. Y si estas se dividieren, se produciría una guerra civil, puesto que las guerras civiles no son entre civiles, sino que entre militares divididos, normalmente entre "constitucionalistas o legalistas" y "revolucionarios, golpistas o intervencionistas".
Sólo unas como instituciones organizadas y jerarquizadas al servicio de la nación y no al gobierno de turno pueden salvar al país de su autodestrucción.
Adolfo Paúl Latorre
La realidad se impone
Reducir la evasión es clave y esto se propone enfrentarlo desde diferentes ángulos. No obstante, es llamativo que en el Gobierno se señale ahora que no se pueden subir impuestos con este nivel de fisuras en la recaudación y de ahí el foco en la elusión. Aunque en campaña electoral se anunció una reforma tributaria de envergadura (4,1% del PIB), la realidad ha hecho mutar la estrategia cambiando su foco.
Dado que el Gobierno no tiene mayoría en el Congreso Nacional, ha optado por esta alternativa con foco en la elusión como eje central (en la propuesta inicial de la reforma tributaria esto era un eje secundario). Así, el Gobierno, erróneamente, se autoimpuso sus propios límites a una mayor recaudación tributaria global en este cuatrienio de haber reconocido la nueva realidad desde un principio.
En este protocolo recién firmado hay acuerdos que es imposible discordar: impuestos justos, debido proceso, etc. Pero aún no hay unanimidad en los cambios a la gobernanza del Servicio de Impuestos Internos (SII) y en la operacionalización del secreto bancario.
Se busca hacer al SII más autónomo del gobierno de turno y que tenga indicadores de desempeño más claros. Sin embargo, el consejo asesor externo del SII genera cierta interrogante respecto a la responsabilidad unipersonal del director del SII en la estrategia de recaudación.
Si las decisiones de este comité técnico tienen carácter vinculante en cuanto a la juridicidad de las circulares que emite el SII, devalúa el rol del director, quien es el responsable último.
Finalmente, este comité asesor diluye la responsabilidad del director del servicio en las grandes decisiones, amén de los potenciales conflictos de interés que se incubarían.
Francisco Castañeda
Ley Karin
Comparto una preocupación urgente: la falta de capacitación en acoso laboral y sexual en un alarmante 35% de las empresas chilenas, según el reciente informe de Equidad Empresarial y Buen Gobierno. Con la ley Karin entrando en vigor el 1 de agosto, que sanciona 18 nuevas formas de acoso laboral, es crucial actuar rápidamente.
Es alarmante que el 12,5% de las empresas no tenga políticas de prevención establecidas y que un preocupante 32% carezca de programas específicos para abordar el acoso sexual. Estas cifras subrayan la necesidad urgente de que las empresas implementen medidas efectivas para proteger a sus colaboradores, cumplir con la nueva normativa y, al mismo tiempo, otorgar seguridad y bienestar.
La iniciativa, impulsada por el trágico caso de Karin Salgado nos recuerda la importancia de crear entornos laborales seguros y respetuosos. Miguel Capurro, director de Capital Humano de Randstad, propone políticas claras, capacitación con enfoque de género y un ambiente seguro para denuncias como pilares fundamentales para enfrentar esta problemática.
Es imperativo que las empresas vean la prevención del acoso no sólo como una obligación legal, sino como una oportunidad para fortalecer la cultura organizacional y mejorar el bienestar de sus equipos.
Nitza Sánchez Socia